(Minghui.org) Después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) empezara a perseguir a Falun Dafa en 1999, seguí practicando a pesar de la presión de mi jefe y mi familia. Aunque hice todo lo posible por denunciar la persecución, no entendía lo que significaba cultivarme. En 2005 fui detenido y perseguido y dejé de practicar durante casi cinco años.

Esos cinco años fueron miserables. En el fondo, no podía abandonar el Fa. Siempre sentí que algún día volvería a practicar.

Me tomó cinco años de dolorosa lucha con la interferencia de varios pensamientos humanos para regresar a Dafa. Agradezco la compasión de Shifu y la ayuda de mis compañeros. Estoy de nuevo en el camino de ayudar al Shifu en la rectificación del Fa.

Teniendo experiencia de primera mano de quedarme atrás, estar deprimido, y eventualmente regresar a Dafa, me preguntaba si otros practicantes que habían dejado de practicar estaban teniendo las mismas experiencias. Sabía que Shifu no los abandonaría, y me dije que debía tenderles una mano.

En 2018, conocí a una tía lejana en mi ciudad natal. Ella había practicado Falun Dafa años atrás, pero fue perseguida por ello. Las autoridades del pueblo enviaron gente a su casa para vigilarla y coaccionarla para que renunciara a Falun Dafa. Ella se negó a cooperar, pero su hijo firmó una declaración en su nombre a sus espaldas. Debido a la intensa presión, dejó de practicar.

Más tarde desarrolló una grave dolencia en la rodilla y tuvo dificultades para desplazarse. Tenía poco más de 50 años, pero no podía hacer ni las tareas domésticas más sencillas. Buscaba tratamiento por todas partes y era una carga económica para su hijo. Cuando la encontré, estaba dolorida.

La convencí de que volviera a practicar Falun Dafa. Quería hacerlo, pero le preocupaba que Shifu no la aceptara. Le dije que Shifu se alegraría si volvía a Dafa y le hablé del progreso de la rectificación del Fa. Le dije que teníamos que salvar a la gente ayudándoles a renunciar el PCCh y sus organizaciones afiliadas. Ella aceptó todo lo que le dije.

Todavía tenía todos sus libros de Falun Dafa. Le di las conferencias recientes del Shifu y le enseñé los ejercicios. Empezó a leer el Fa y a hacer los ejercicios todos los días. Después de un tiempo, sus piernas mejoraron y pudo limpiar la casa. Al ver sus cambios y los milagros de Dafa, su marido también empezó a practicar.

Nuestro misericordioso y gran Shifu la animó a ella y a su marido. Un día, encontraron un racimo de más de 30 flores de udumbara floreciendo en su tendedero.

Yo tenía una compañera que trabajaba en el gobierno. Empezó a practicar Dafa a los 30 años. Cuando el exlíder del PCCh, Jiang Zemin, inició la persecución contra Falun Dafa en 1999, ella sólo llevaba practicando unos meses. Fue sola a Beijing para defender Dafa. A su regreso, fue sometida a una intensa presión por parte de su familia y su lugar de trabajo.

Creyó en Shifu y en el Fa, persistió en su cultivación y se negó a ceder. Sin embargo, aislada de los demás practicantes, fue abandonando poco a poco la cultivación y sintió que bastaba con ser una buena persona.

La llamé durante años. Siempre que me ofrecí a verla, ella solía evitar la invitación con una amable excusa. Cuando por fin nos reunimos, le hablé de la cultivación, pero hizo algunos comentarios casuales y pasó por alto el tema. Tenía la impresión de que sabía que Falun Dafa era bueno, pero no quería volver a practicarlo.

El año pasado, cuando se jubiló, volvimos a vernos. Me dijo que se había encontrado con otro practicante y que habían hablado sobre la cultivación. Comprendí que Shifu estaba pavimentando el camino para que ella regresara a Dafa.

Hablamos largo rato la siguiente vez que nos vimos. Me dijo que había sufrido mucho en casa durante años, sobre todo porque estaba demasiado apegada a su familia, y que estaba agotada.

Aunque había dejado de practicar, Falun Dafa estaba arraigado en su corazón. "Pienso en Dafa y en las dos frases ['Falun Dafa es bueno', 'Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno'] en los momentos cruciales. He superado estos años gracias a Falun Dafa y a esas frases auspiciosas", dijo emocionada.

No practicaba los ejercicios ni leía el Fa, pero llevaba consigo un libro de Dafa. Dijo que quería volver a cultivarse. Encontré un juego completo de las conferencias del Shifu y se las di, y ella las leyó con entusiasmo.

Comprendió muchos principios del Fa. Empezó a hablar a la gente sobre Falun Dafa y la persecución, y les ayudó a renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. Su xinxing siguió mejorando. Ahora hace los ejercicios todas las mañanas. Su marido empezó a leer los libros de Falun Dafa.

Lao Ding (seudónimo), de 89 años, empezó a practicar en 1996. Se mantuvo firme y fue a Beijing para hablar en favor de Falun Dafa. Le iba bien en muchos aspectos, pero no toleraba las críticas.

Lao Ding se mudó hace diez años y ya no leía el Fa con los demás practicantes. Le visité de vez en cuando y me enteré de que sólo hablaba con un practicante. Pero después de que tuvieran un conflicto, ese practicante dejó de visitarle. Lao Ding no buscaba a otros practicantes y no leía el Minghui Semanal porque no sabía cómo entrar en Internet. Se encerró en sí mismo.

Un día pasé por su casa y le encontré leyendo la biblia. Me dijo que era un regalo. Sólo la estaba hojeando y no hablaba en serio. Dijo que no interferiría con su estudio del Fa. Me sorprendió y le "sermoneé", basándome en el hecho de que nos conocíamos muy bien. Se dio cuenta de que eso no estaba de acuerdo con ‘practicar una sola vía de cultivación’ y dijo que regalaría la Biblia.

Otro practicante me dijo que Lao Ding ya no se comportaba según el Fa y se negaba a escuchar si alguien lo criticaba. También, comentó que había renunciado a Lao Ding. Yo estaba preocupado.

Pensé: "Lao Ding ha seguido a Shifu durante muchos años en las buenas y en las malas. Aunque no se ha conducido según el Fa por un tiempo, sigue siendo un practicante. Shifu atesora todas las vidas y aún más a los practicantes de Dafa. Debo ayudarle porque está temporalmente confundido".

Otro practicante y yo visitamos a Lao Ding y leímos juntos el Fa. Después de que hablamos, él vio sus defectos y quiso corregirse según los estándares del Fa.

Le llevé regularmente Minghui Semanal, y él pudo seguir el progreso de la rectificación del Fa. Está muy sano y parece tener unos 70 años. Aprendió a mirar en su interior cuando surgían conflictos y a eliminar sus apegos. Se llevaba bien con su familia. Debido al comportamiento recto de Lao Ding, un familia vio que Falun Dafa era bueno y empezó a practicarlo.

Cuando se publicó el nuevo artículo del Shifu "Porqué existen los seres humanos", le di un ejemplar a Lao Ding. Inmediatamente entendió que la rectificación del Fa del mundo humano se está acercando. Sintió una sensación de urgencia y empezó a hacer más para hablar a la gente sobre Falun Dafa y la persecución y ayudarles a renunciar al PCCh. Dijo que quería seguir al Shifu y que se cultivaría diligentemente.