(Minghui.org) ¡Saludos venerado Shifu! ¡Saludos compañeros practicantes!
Comencé a practicar Falun Dafa hace tres años y medio. Soy de un remoto pueblo de montaña en China. Debido a mi numerosa familia y a nuestros limitados recursos, mi infancia estuvo marcada por la pobreza y el trabajo duro. Aunque sólo tenía 14 años, tenía varias responsabilidades, entre ellas ganar dinero para aliviar nuestra carga económica. Como mi situación era tan difícil, no entendía el sentido de la vida.
Me trasladé a Australia hace diez años. Tuve la suerte de oír hablar de Falun Dafa a través de las noticias en abril de 2020. Me enteré del poder de las nueve palabras especiales para mantenerme a salvo durante la pandemia (Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno). Empecé a buscar libros relacionados con Falun Dafa y encontré Zhuan Falun. Cuando vivía en China, no sabía nada de Falun Dafa ni del significado de las nueve palabras, aunque había visto las palabras "Falun Dafa" en materiales de aclaración de la verdad.
Durante las primeras fases de la pandemia de COVID, el gobierno australiano impuso cierres forzosos e instó a la gente a quedarse en casa. Esto me dio la oportunidad de leer Zhuan Falun, aunque al principio me costó entender los numerosos y profundos conceptos. Pero a medida que continuaba leyendo me asombraba.
Llegué a comprender que la vida humana procede del universo, y que la razón fundamental por la que somos humanos es volver a nuestro origen. También comprendí la importancia de seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Además aprendí que las nociones humanas a menudo se invierten, y que debemos hacer el bien en lugar de hacer daño. Me sentí increíblemente conmovida. Pensé: "¡Esto es lo que he estado buscando!". Zhuan Falun resolvió mis antiguas dudas y me dio una profunda comprensión de por qué estamos en este mundo. Quería cultivarme.
A través del estudio y la práctica diligentes, continué adquiriendo conocimientos más profundos. Me di cuenta de que Shifu vino a salvarnos, a purificar nuestros cuerpos, a eliminar nuestro yeli (karma) y a otorgarnos muchos dones preciosos. Shifu nos protege constantemente. Me sentí muy afortunada por haber encontrado una práctica tan extraordinaria. Estaba rebosante de gratitud y apenas podía expresar mi aprecio. Sólo podía dar las gracias a Shifu y tomar la resolución de cultivarme con diligencia, apreciar este regalo y no olvidar nunca la salvación de Shifu.
Una semana después empecé a aprender los cinco ejercicios de Falun Dafa. Estaba feliz y me sentía realizada. Había encontrado a mi Shifu, y estaba rebosante de alegría. Conté con entusiasmo a mi familia y amigos que había empezado a practicar Falun Dafa. Les expliqué que Falun Dafa no era lo que habían oído, sino una práctica que enseña a la gente a ser buena. Les dije que Zhuan Falun es un libro excelente y una guía para la cultivación.
Shifu siempre vela por nosotros
Falun Dafa respondió a todas mis preguntas y me abrió el corazón.
Quería convertirme en una auténtica cultivadora siguiendo los principios expuestos por Shifu en sus enseñanzas. Mi cuerpo pronto experimentó cambios significativos. Me sentía ligera y cómoda, y no me sentía cansada, hiciera lo que hiciera. Incluso mi complexión cambió. Me sentía feliz todo el tiempo, como si me hubiera convertido en otra persona, e incluso cuando eliminaba el yeli (karma) seguía siendo feliz.
Un día me di cuenta de que un bulto duro que tenía en el cuerpo desde hacía más de una década había desaparecido. Era del tamaño de tres cacahuetes y no me había molestado mucho, así que lo ignoré. Nunca fui al hospital para que me lo examinaran. Sin embargo, un día, mientras me duchaba, me di cuenta de que había desaparecido. Me pareció un verdadero milagro.
Cuando mi hija me llevó a casa de una amiga, me quedé dormida nada más subir al coche. Me sentía mal, tenía frío y mucha fiebre. Cuando llegamos a casa, le pedí que aparcara el coche al sol para poder dormir bajo la cálida luz del sol hasta que se pusiera. Dormí tres días seguidos sin comer ni beber, pero me sentía despejada. Sabía que era algo bueno. La tarde del tercer día comí medio tazón de gachas y, a la mañana del cuarto, me había recuperado por completo.
Una noche, después de empezar a practicar, me ofrecí a llevar a casa a un amigo. Sin embargo, de camino a casa, al tomar una salida de la autopista, me fallaron los frenos de repente. No podía parar el auto por mucho que pisara los frenos. El auto siguió avanzando hasta que se detuvo en un camino de grava cerca de una rotonda. Lo primero que pensé fue que menos mal que no había coches en la carretera, porque si no me habría estrellado. No tuve miedo porque comprendí lo que había pasado. Recordé lo que dijo Shifu en Zhuan Falun, y tal vez tenía una deuda con alguien y tenía que pagarla.
Comprendí que Shifu siempre velaba por mí. Siempre que había un incidente inesperado lo superaba sin problemas con la protección de Shifu. Cada vez que oigo la palabra "Shifu" mi corazón se llena de gratitud. Gracias, Shifu.
Cooperación con otros practicantes
Yo vivía en Costa del Sol, pero allí no había otros practicantes. En mayo de 2022, vi Shen Yun en un teatro de Gold Coast y conocí a practicantes locales. Estoy profundamente agradecida por toda la ayuda y el ánimo que me dieron. En septiembre de 2022, me mudé a Brisbane y empecé a participar en proyectos para ayudar a Shifu a salvar a los seres conscientes. Mi corazón está lleno de una inmensa alegría y un sentimiento de honor.
A veces lloro cuando estudio el Fa. Siento profundamente el tremendo esfuerzo que Shifu hizo por nosotros. Mi comprensión de los principios del Fa y la importancia del estudio del Fa se ha vuelto cada vez más clara, mis pensamientos rectos se han fortalecido, y Dafa es extremadamente preciosa para mí. La cultivación es seria, y no debo desviarme de mi camino. Debo hacer el mejor uso de mi tiempo para estudiar el Fa y salvar a los seres conscientes.
La primera vez que distribuí el Epoch Times, se publicó el artículo de Shifu Por qué existen los seres humanos. Cuando recibí los periódicos de los practicantes locales, me sentí muy honrada. Mientras distribuía los periódicos, me sentía feliz y ansiosa a la vez. Estaba ansiosa porque nunca lo había hecho antes. Sin embargo, me recordé que era una discípula de Dafa y que quería ayudar a salvar a la gente lo antes posible. ¡Era una oportunidad preciosa! Con Shifu guiándome, ¿qué debía temer?
Me deshice de mi miedo, sonreí alegremente y distribuí periódicos en lugares concurridos. Siempre que veía a un chino, le preguntaba: "¿Habla chino?". Visitaba tiendas regentadas por chinos, restaurantes chinos y pequeñas tiendas de comestibles, y les saludaba diciendo: "Hola, estamos repartiendo ejemplares del Epoch Times".
También empecé a repartir tarjetas de "Ganjing World". Los videos de Ganjing World están disponibles en varios idiomas, y la gente puede ver el artículo de Shifu, Por qué existen los seres humanos. Espero que la gente lea el nuevo artículo de Shifu y comprenda la verdad.
También ayudé con las entregas en los buzones. Cada vez que echaba materiales en un buzón, decía en silencio: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, y te deseo buena fortuna". Cuando me encontraba con gente por la calle, les ofrecía un volante. Un día hacía mucho calor y una familia se dio cuenta de que tenía las mejillas rojas. Amablemente me trajeron agua helada e incluso llenaron mi botella de agua. Sabía que era Shifu quien me animaba y me sentí profundamente conmovida. Gracias, Shifu.
Cada vez que salía a recoger firmas para una petición para poner fin al PCCh, conseguía entre 110 y 190 firmas. Algunas personas firmaban proactivamente la petición, y otras se la pasaban a otras después de firmar. Aunque soy una extraña, son amables. Algunos me ofrecieron fruta, y otros me dieron tarta. Algunos incluso quisieron tomarse fotos conmigo, me pidieron que me cuidara y me desearon buena suerte. Su calidez me conmovió profundamente, y me di cuenta de que todo se debía a la protección de Shifu.
Un domingo de hace dos semanas, planeé ir a un mercado de fin de semana para recoger firmas. Invité a otra practicante a acompañarme, pero cuando declinó, di media vuelta y pensé en volver a casa para estudiar el Fa. Tuve una sensación indescriptible, ya que era un día tan hermoso, pero estaba pensando en estudiar el Fa en casa en lugar de salvar a los seres conscientes. Así que cambié de idea y, en lugar de volver a casa, me dirigí inmediatamente al mercado de fin de semana para recoger firmas.
Recogí firmas allí solo hasta que el mercado terminó a las 14:00. No muy lejos del mercado había una piscina. Era un día caluroso y la zona estaba abarrotada, así que seguí recogiendo firmas. Me encontré con cinco personas que al principio se resistieron cuando mencioné el PCCh y dijeron que no querían los materiales. La segunda vez que hablé con ellos, seguían sin querer aceptarlos. La tercera vez que hablé con ellos, todos aceptaron los materiales y firmaron la petición. También conocí a algunos turistas chinos que lo entendieron. Creo que la gente espera ser salvada.
Un sábado, tres de nosotros decidimos ir a la playa a hacer los ejercicios. El tiempo empezó bien, pero cambió cuando estábamos haciendo el segundo ejercicio. Aparecieron nubes oscuras y empezó a soplar el viento. Normalmente leemos el Fa después de hacer los ejercicios, pero el viento era frío y no había ninguna zona protegida, así que decidimos ir a mi auto a estudiar. Leímos un rato y luego pensé: "Vamos a pasar más de dos horas estudiando el Fa aquí, y el aparcamiento es limitado, por lo que los turistas pueden tener problemas para encontrar aparcamiento. Esto no es lo que debe hacer un cultivador". Fuimos a un lugar tranquilo, aparcamos el auto y continuamos el estudio del Fa allí.
Tras estudiar el Fa, empezamos a recoger firmas. Aquel día estuvo lleno de historias asombrosas. Me di cuenta de que mientras tengamos pensamientos rectos para salvar a la gente y tengamos el deseo de salvar a los seres conscientes, estaremos recorriendo el camino divino dispuesto por Shifu.
Siento profundamente que participar en los proyectos de Dafa para ayudar a Shifu a salvar a los seres conscientes es el honor más sagrado y más grande. Cuando salgo a esclarecer la verdad, no suelo sentir sed, hambre ni cansancio. Lo más gozoso es poder estudiar bien el Fa y salvar a los seres conscientes. Estoy profundamente agradecida por los arreglos de Shifu.
En mi cultivación futura, espero hacer bien las tres cosas. Quiero realmente tener fe en Shifu y en el Fa, alcanzar el desinterés y la iluminación, y convertirme en una discípula genuina que no defrauda a Shifu.
¡Gracias Shifu por tu duro trabajo para salvarme!
Lo anterior es mi limitada comprensión en mi nivel actual. Si hay alguna deficiencia, por favor señálela.
Gracias, Shifu. ¡Gracias, compañeros practicantes!
(Presentado en el Fahui de Australia 2023)
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