(Minghui.org) Me dolía el corazón cada vez que leía la sección "El corazón de ostentar" en la Sexta Lección de Zhuan Falun porque tenía dificultad en eliminar este fuerte apego. Siempre prestaba atención a lo que decía, pero mis palabras llevaban impregnada la mentalidad de ostentar. 

Por ejemplo, cuando alguien decía: "Tu ropa es atractiva", yo le decía a la persona con orgullo que mi hijo me había traído la ropa, cuánto había gastado, dónde había comprado la ropa, de qué marca era, etc. Mis palabras pretendían demostrar que tenía un buen hijo que me compraba ropa cara.

Cuando otros practicantes experimentaban yeli de enfermedad, les decía lo bien que había analizado su situación. Mi objetivo era mostrar que estudié bien el Fa, que tenía una buena cualidad de iluminación y fuertes pensamientos rectos.

Una practicante me dijo una vez que una persona no paraba de sacudir la cabeza cuando oía a otro practicante aclarar la verdad. La interrumpí y le conté cómo había aclarado la verdad con éxito. Quería demostrar que era culta y elocuente.

Cuando alguien me dijo que era buena con las computadoras, le dije que hacía años que usaba computadoras en el trabajo. Mi intención era demostrar que no era una trabajadora común.

Cuando alguien me dijo que había estudiado bien el Fa, me sentí satisfecha y le dije que solía dar discursos en el trabajo porque era muy capaz.

Cuando alguien me decía que había escrito un buen artículo y que mi caligrafía parecía buena, yo respondía con orgullo que me había graduado en la Segunda Universidad Normal, donde había recibido formación sobre escritura y arte, y que mi caligrafía no podía ser tan mala después de haber realizado durante años labores de comunicación en mi universidad y lugar de trabajo. Cada palabra que decía era para ostentar.

Es tal y como señaló Shifu en sus enseñanzas:

"...ya se ha hecho natural en él y tal vez lo hace inconscientemente" (Sexta Lección, Zhuan Falun).

Empecé a prestar atención antes de hablar para ver si mis palabras tenían la intención de ostentar.

Un día después de salir de nuestro estudio del Fa, de repente me empezó a doler el tobillo izquierdo. Me pregunté qué había pasado porque no me lo había torcido. Reflexioné sobre lo que había dicho aquella mañana y recordé una conversación. Cuando un practicante mencionó que otra practicante pudo entrar en el sitio web de Minghui e imprimir materiales de aclaración de la verdad, les dije a todos que yo le había enseñado cómo hacerlo, y como ella no tenía una buena educación, no fue fácil enseñarle.

¿No estaba ostentando? Dije: "Shifu, me equivoqué". Me arrepentí tanto que di un fuerte pisotón. Para mi sorpresa, dejó de dolerme el tobillo. Me había dolido durante 40 minutos, ¡pero en cuanto me di cuenta el dolor desapareció! Era una falsa apariencia, destinada a ayudarme a quitarme el apego a ostentar. Me alegré de reconocerlo.

Otro día tuve dolor de muelas. Pensé que mi dentadura postiza podría necesitar un reajuste. Pensando que las dentaduras se aflojaban al ajustarlas, no fui al dentista de inmediato. Al cabo de una semana, el dolor se intensificó. Apenas podía abrir la boca. No sabía qué hacer. De repente me di cuenta de que veía este problema como una persona común. ¿No debería un practicante de Dafa ver las cosas desde la perspectiva del Fa y mirar hacia adentro? ¿No he fallado otra vez en cultivar mi habla?

Recuerdo que un día mi esposo me gritó: "¿Cómo es que eres tan egoísta? ¿Qué te enseñó Shifu?". De inmediato le contesté: "Tu Shifu te dijo que fueras a la Universidad de Qinghua. ¿Lo has hecho?". Me miró con la boca abierta. Pensé: "¿Cómo puedes superarme, dado tu nivel?". En aquel momento no me traté como una cultivadora y me enfrenté a él de forma prepotente. Más tarde, incluso le conté el incidente a un compañero para ostentar de mi dominio.

Me sorprendió lo que descubrí al mirar en mi interior. Cuando descubrí mi apego a la ostentación y la mentalidad competitiva, mi dolor de muelas desapareció en un segundo. ¡Qué asombroso y maravilloso!

Me di cuenta de que no importa lo que nos pase, es algo bueno porque nos recuerda que debemos mirar hacia dentro y mejorar nuestro xinxing y nuestra cultivación.