(Minghui.org) Antes de empezar a practicar Falun Dafa en 2021, tenía muchas enfermedades extrañas. Por ejemplo, mis pies me picaban insoportablemente. Cuanto más me rascaba, más me picaban. Me dolían los pies y los lugares donde me rascaba supuraban pus y sangre. Incluso la piel del empeine se inflamó y ulceró gravemente. Fui a todas partes en busca de consejo médico. Visité a muchos médicos y probé diversos tratamientos, pero nada me ayudó.

Pronto empezó a supurarme pus por los oídos. Lo ignoré. Pero, a la mañana siguiente, la piel de las orejas y el cuello estaba dura, me picaba y me dolía. Sentía la cabeza y el cuello congelados, como si me hubieran inmovilizado con una escayola. Me costaba moverme libremente o darme la vuelta mientras dormía. Dos días después, tenía el cuerpo cubierto de pequeñas manchas rojas. El picor y las molestias aumentaron drásticamente. Sentía como si me estuvieran picando hormigas por toda la piel. Me sentía peor que muerta y estaba completamente desesperada.

Mi madre practica Falun Dafa. Engañados por las mentiras del PCCh (Partido Comunista Chino), a mi esposo y a mi hija les disgustaba mi madre e interferían en su práctica de cultivación. Rechazaron los intentos de mi madre de contarles la verdad sobre la persecución a Dafa y criticaron a Falun Dafa. Para evitar que mi esposo y mi hija se crearan ye, ella visitaba raramente nuestra casa.

Después de enterarse de mi estado, mi madre creyó que sólo Shifu de Falun Dafa podía salvarme. Sin embargo, la postura de mi esposo y mi hija en contra de Falun Dafa le dificultaba ayudarme. Me visitó y me dijo en voz baja: "Xiuli, en tu estado actual, ¡sólo Shifu puede salvarte! Recuerda recitar 'Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno', y Shifu te ayudará a mejorar". Mi madre también me contó cómo Falun Dafa curó sus pies doloridos y sus manos hinchadas, y describió los muchos milagros experimentados por los practicantes de Falun Dafa. Pensé: "He agotado todos los tratamientos posibles y nada me ha ayudado. Mi estado empeora. Escucharé el consejo de mi madre". Asentí con la cabeza.

Durante los días siguientes, dije sinceramente: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Lo repetía a lo largo del día e incluso por la noche mientras estaba en la cama. Mis síntomas empezaron a remitir a los pocos días, lo que me convenció para preguntarle a mi madre cómo practicar Falun Dafa. Aceptó encantada cuando le pedí que me enseñara los ejercicios. Les expliqué mi decisión a mi esposo y a mi hija. Se alegraron mucho de oír las buenas noticias y se maravillaron de los poderes milagrosos de Dafa. Mi esposo dijo: "Nos engañaron con las mentiras del PCCh. Deberías aprender la práctica".

Mi madre y yo estudiamos el Fa, practicamos los ejercicios y enviamos juntas pensamientos rectos. Mi salud mejoró día a día: el pus y la sangre que cubrían mi piel se secaron, y el picor y el dolor desaparecieron por fin. Por primera vez en mucho tiempo, experimenté la alegría de estar libre de enfermedades. Esta tribulación me hizo comprender la grandeza de Shifu y la magia de Dafa. Este milagro convenció plenamente a mi esposo y a mi hija. Su actitud cambió, respetaron Falun Dafa y me animaron de todo corazón a practicarlo. Ahora mi hija me recuerda a menudo que envíe pensamientos rectos en los cuatro momentos programados.

El 28 de mayo de este año, me caí y me fracturé el dedo gordo del pie. Cuando mi esposo me sugirió que fuera al hospital, le dije firmemente que no. "Creo en Shifu y el Fa y sé que me pondré bien. Después de todo, Shifu podría haber arreglado esto para ayudarme a eliminar el ye". Mi esposo no dijo nada más y mi dedo se curó a los pocos días.

Ha sido mi mayor honor y bendición practicar Falun Dafa. Sé que Shifu ha soportado mucho por mí y las palabras no pueden expresar mi gratitud. Estoy determinada a cultivarme hasta el final y ayudar a Shifu en la rectificación del Fa.