(Minghui.org) Soy una mujer de 80 años que practica Falun Dafa. Me gustaría contarles una experiencia asombrosa que tuve recientemente.
Grave caída al intentar cruzar una calle
Un día de noviembre de 2022, intenté cruzar rápidamente una calle antes de que el semáforo para peatones se pusiera en rojo. De repente me caí con fuerza. Sentí que estaba a punto de desmayarme, pero me recordé que practico Falun Dafa y que estaría bien. Me incorporé lentamente.
Una joven vio lo ocurrido, me ayudó a levantarme y se marchó. Me costaba mucho andar y tuve que sentarme en el cordón de la acera. Me recordaba que era una practicante y pedí ayuda a Shifu. Volví a ponerme en pie y, dando con cuidado un paso cada vez, llegué a la entrada de mi edificio. Cuando intenté agarrarme a la barandilla para subir, me di cuenta de que no podía levantar el brazo izquierdo, que me dolía muchísimo. Me agarré a la pared con la mano derecha y subí lentamente hasta mi departamento.
Fracturas múltiples
Cuando me miré en el espejo vi que mi hombro izquierdo estaba caído y parecía dislocado. Pensé en ir al hospital para que un médico me volviera a colocar el hombro en su sitio y en hacer los ejercicios de Falun Dafa.
Vivía sola, ya que mi esposo falleció hace unos años y todos mis hijos se mudaron. Un amigo me acompañó al hospital y el médico, tras ver la radiografía, dijo que tenía el brazo izquierdo fracturado en varios sitios. Me dijo que, dada mi edad, no había mucho que pudiera hacer salvo tomar unos medicamentos e inmovilizarme el brazo y dejar que se curara solo. Le dije a mi amigo que lo curaría a mi manera y salí del hospital sin recibir ningún tratamiento.
El brazo se curó en 45 días
No conté lo ocurrido a mis hijos porque no quería que se preocuparan. Recordé haber leído una historia sobre cómo un practicante de Falun Dafa se fracturó la pierna en varias partes mientras lo torturaban en la cárcel. El médico de la prisión no se molestó en alinear el hueso roto y se limitó a ponerle una férula en la pierna. El practicante insistió en hacer la meditación sentado con ambas piernas cruzadas, a pesar del insoportable dolor. Al final, su pierna sanó como si nunca se la hubiera roto. Me dije que él y yo practicábamos la misma enseñanza y teníamos el mismo Shifu. Si él podía hacerlo, yo también.
Me dolía el brazo izquierdo, lo colocara como lo colocara, y el dolor se extendía por todo el cuerpo, haciéndome temblar. No podía acostarme y solo podía sentarme apoyada en una pared. Seguí recitando: "Falun Dafa es bueno; Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno", hasta que me quedé dormida. Cuando el dolor me despertó, seguí recitando las frases.
A pesar de la fractura de mi brazo, seguí con mi rutina de entregar material informativo, incluido el Semanario Minghui, a otros practicantes. La lectura del Semanario Minghui ha sido el principal canal para mantenernos conectados al sitio web de Minghui, ya que la mayoría de nosotros no podemos navegar por Minghui directamente en nuestras computadoras. Una practicante vive muy lejos y tengo que tomar un autobús para llegar a su casa. No me resultó fácil, pero con la ayuda de Shifu lo conseguí.
Otros practicantes vinieron a mi casa a recoger los materiales. Cuando vieron que mi brazo izquierdo estaba morado, me trajeron bollos al vapor y albóndigas. Su amabilidad me dio fuerzas y ánimos.
El dolor casi me impedía hacer los ejercicios. Pero me dije que tenía que perseverar. Necesitaba hacer los ejercicios para transformar mi cuerpo físico. Intenté hacer los ejercicios solo con el brazo derecho, pero el dolor seguía siendo insoportable. Me recordé que Shifu me observaba y que tenía que seguir adelante. Diez días después, podía mover un poco el brazo izquierdo. Entonces hice los ejercicios con los dos brazos, aunque el izquierdo aún no podía subir a la posición correcta. Poco a poco, mi brazo izquierdo mejoró y mis movimientos se hicieron más precisos.
Al cabo de 45 días, mi brazo izquierdo estaba completamente curado. Ese día, cuando pude sostener completamente el brazo izquierdo mientras hacía el segundo ejercicio, no podía dejar de llorar.
Hay un viejo proverbio que dice: "Se tardan 100 días en recuperarse de las lesiones óseas y tendinosas". Yo tenía más de 80 años y me recuperé de múltiples fracturas en el brazo sin tomar ningún medicamento. Todo lo que tenía era mi inquebrantable fe en Shifu y en Falun Dafa. Doy gracias a Shifu por su compasiva salvación.
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Categoría: El poder divino de Falun Dafa