Anciana de 80 años: vivir sola y abandonar las nociones humanas

(Minghui.org) Tengo 84 años. Mi marido fue el primero de nuestra familia en empezar a practicar Falun Dafa. Mi hija, un hijo, dos nueras y yo abrazamos la práctica, uno tras otro.

Salvaguardando nuestro sitio de estudio de Fa

Con la difusión de Falun Dafa, mucha gente empezó a practicar, y venían a mi casa para estudiar el Fa en grupo. Teníamos varios practicantes en la familia, así que, naturalmente, nuestra casa se convirtió en un lugar de encuentro lógico. Mi marido falleció más tarde.

El 1999, Jiang Zemin, en aquel entonces líder del Partido Comunista Chino, lanzó la persecución contra Falun Dafa. Mis hijos y yo fuimos perseguidos en diversos grados, y algunos fueron enviados a campos de trabajo forzado. A pesar del terror y del ambiente de alta presión, el grupo de estudio del Fa continuó reuniéndose en mi casa.

Mi hija falleció hace seis años. Mis dos hijos compraron casas en la ciudad, dejándome sola en el pueblo. A lo largo de los años, he sufrido la pérdida de mi marido, la persecución malvada, el traslado de mis hijos y el fallecimiento de mi hija. Fueron años duros y difíciles para mí, pero he mantenido firmemente el ambiente de estudio de Dafa en nuestra aldea. Shifu se ha esforzado mucho por protegernos.

En 2020, para ayudarme a salvaguardar el centro de estudios del Fa, mis hijos y mis nueras me ayudaron a renovar la vieja casa en la que vivía. De esta manera, ya no necesitaba ir a la ciudad para las vacaciones del Año Nuevo Chino, ya que mis hijos venían a casa a celebrarlo conmigo.

Mi tercer ojo está abierto y he visto muchas cosas durante mi cultivación. Cuando estaban renovando la casa, me quedé en casa de mi hijo en la ciudad. El día que estaban colocando el tejado nuevo, mi hijo me llamó por videollamada. Cuando la grúa estaba levantando las losas de teja, vi un fuerte campo de energía alrededor de la grúa, con innumerables luces doradas que se reunían en la parte superior del brazo de la grúa. Pensé que Shifu y los dioses rectos estaban ayudando en la renovación de mi casa. Mi más sincera gratitud no puede expresarse con palabras. Esta escena también fortaleció mi confianza en salvaguardar nuestro ambiente de estudio del Fa. Después de la renovación, continué estudiando el Fa con los practicantes en mi casa, e hicimos las tres cosas juntos.

Hubo muchas oportunidades de mejorar mi xinxing durante la renovación. Por ejemplo, los vecinos amontonaron plantones de cacahuete detrás de mi casa para alimentar a sus ovejas. Mi espacio no es grande y los contratistas ya no tenían sitio para almacenar arena, pero no quisieron apartar los plantones. Pensé en hablar con ellos varias veces, pero decidí dejarlo estar.

Sin embargo, un día, el vecino se levantó temprano y retiró los plantones de cacahuete; nadie de mi familia le pidió que lo hiciera. Poco después llegó el camión con la arena, y el trabajo no se retrasó. Shifu me ayudó. Les conté a mis hijos y nueras este incidente, y lo del campo de energía ayudando con la grúa que había visto. Se alegraron de oírlo.

Experimenté muchos otros sucesos milagrosos durante la renovación. Sólo a través de cultivarnos diligentemente y la práctica verdadera podemos agradecer la salvación compasiva de Shifu y la inmensa gracia de Dafa.

Mirar hacia adentro y cultivarme diligentemente

El año pasado tuve tres sueños en poco tiempo y me di cuenta de que Shifu me estaba dando pistas.

En el primer sueño, me dirigía a pie a algún lugar. Había una persona vendiendo vinagre que insistía en que comprara un poco y me pedía que lo probara. Probé un poco, y era extremadamente agrio. Le dije: "No lo compraré". Poco después llegó otra persona vendiendo vinagre y también insistió en que lo probara. No era tan ácido, pero seguí diciendo: "Yo no uso vinagre. No lo compraré".

En el segundo sueño, también iba de camino a algún sitio cuando alguien me paró y quiso venderme rodajas de espino enrolladas. Me pidió que las probara. Estaban muy agrias, así que no las compré y seguí mi camino. Luego me paró otra persona, que quería que comprara también rodajas de espino. Sabían deliciosas, pero seguí diciendo: "¡No las compraré!".

En el tercer sueño, estaba cocinando una comida y recogía tallos de maíz para encender un fuego. Mientras los tallos ardían, vi una mazorca que aún no había sido recolectada. Me pregunté cómo había podido pasar por alto una mazorca tan grande cuando había recogido los tallos con tanto cuidado.

Al despertarme, me di cuenta de que Shifu me estaba insinuando que tenía apegos en mi cultivación, igual que al pasar por alto la mazorca de maíz. Debería seguir mirando hacia dentro. Una practicante me ayudó a escribir un artículo para compartir experiencias, y le conté las insinuaciones de Shifu en los sueños. Ella dijo: "No estoy segura de que mi entendimiento sea correcto, y es sólo una referencia. La gente [china] a menudo usa la frase 'comer vinagre' o 'sentirse agrio' para describir los celos o la envidia. ¿Podrían ser tus dos primeros sueños la forma en que Shifu señala algo en tu corazón que es celoso?". Miré hacia mi interior y efectivamente encontré dos asuntos que me habían estado molestando durante mucho tiempo.

El primero estaba relacionado con la familia de mi hija, que lleva muchos años cultivando nuestras tierras familiares. Cuando mi hija vivía, solía dar harina de maíz y harina a sus dos hermanos todos los años. Hace cinco años que mi hija falleció y su marido dejó de darles nada. Incluso les quitó el subsidio agrícola para la tierra.

Mis hijos y mis nueras se hacen cargo de todos mis gastos, y mi nieta también me da dinero. No he gastado nada de mi pensión, y realmente no me falta dinero. Es sólo que me pareció que las acciones de mi yerno eran injustas para las familias de mis dos hijos. Mis hijos y mis nueras nunca le pedirían nada. Están bien económicamente y, como son practicantes, ni se les ocurriría discutir con él.

Otra razón por la que me parecía injusto era que, cuando mi hija vivía, mi yerno también practicaba Falun Dafa. Pero poco después de fallecer mi hija, dejó de practicarlo. Retomó sus viejos hábitos, como fumar y beber. A mí no me gustaban esos hábitos y, a veces, cuando estaba enfermo, le animaba a que siguiera practicando Falun Dafa. Pero él decía cosas negativas sobre Falun Dafa, así que lo menospreciaba.

Hablé de esto con los practicantes y entendí que mis celos venían de sentimientos de injusticia y de menospreciar a mi yerno por no practicar. Sabía que podía ser una deuda que tenía con él en una vida anterior. Además, su decisión de dejar de practicar también se debía a que era incapaz de soportar las tribulaciones. Al descubrir por fin mis apegos, pude soltarlos.

Hubo otro incidente que me molestó y me pareció injusto. En el pasado, un vecino intercambió terrenos con mi familia. En 2020, el Gobierno adquirió ese terreno para construir una autopista, y este vecino recibió más de 20.000 yuanes (2.734 dólares) como compensación. Sabía que, una vez intercambiado el terreno, no podía hacer nada. Sin embargo, esto seguía despertando mi apego a la pérdida. Ni me faltaba dinero ni gastaba mucho, pero mi apego al interés seguía profundamente arraigado.

El verdadero yo no se aferra al interés propio. Por eso en aquellos sueños no compraba nada, ya fuera vinagre o rodajas de espino, no quería nada. Eran sólo nociones que necesitaba extirpar completamente de raíz.

Al mirar hacia dentro, encontré envidia y nociones humanas que ponían obstáculos en mi cultivación. Cuando los eliminé, el nudo de mi corazón se desató, mi mente se aclaró y los principios de Dafa resonaron dentro de mí.

Superando las pruebas con pensamientos rectos

Una noche, no hace mucho, sentí dolor en el pecho. Intenté soportarlo, pero después no pude sentarme ni tumbarme. El dolor era tan intenso que era incapaz de concentrarme en mirar hacia dentro. No pude soportarlo más y supliqué a Shifu que me fortaleciera y me salvara. Apoyándome en firmes pensamientos rectos arraigados en mi confianza en Shifu y en Dafa, superé la tribulación.

Según los criterios de la gente común, se me considera una anciana y que mis hijos deberían cuidar de mí. Sin embargo, he estado viviendo sola por muchos años y necesito cumplir con los estándares del Fa para superar las pruebas claves de si creo genuinamente en Shifu y en Dafa.