​Mi atesorado Libro

(Minghui.org) Estaba muy endeudado y luchando contra la mala salud mientras hacía trabajos esporádicos en Beijing en 1998. Me sentía impotente y había perdido toda esperanza. Por casualidad, encontré Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa, en una barbería y me sentí inmediatamente atraído por sus profundas enseñanzas. Empecé a practicarlo y, desde entonces, mi vida se ha transformado por completo.

Zhuan Falun es un tesoro único para mí. A pesar de mis limitaciones económicas, no dudé en utilizar los 12 yuanes que había ahorrado para comprar un ejemplar del libro. El resto de los libros de Falun Gong los leí prestados o copiados a mano.

Una vez vi un ejemplar de tapa dura de Zhuan Falun en casa de un compañero practicante. Me gustó tanto que deseé tener uno y conservarlo para las generaciones venideras. Más tarde descubrí que ese ejemplar de tapa dura ya no se imprimía ni distribuía, por lo que mi deseo se convirtió en un sueño y en un grato recuerdo.

Después de que el Partido Comunista Chino comenzó a perseguir a Falun Gong en 1999, nuestra cultivación entró en una nueva fase. Me esforcé por hacer bien las tres cosas y ayudar a Shifu a salvar a la gente. Poco a poco olvidé mi anhelo por una copia de tapa dura de Zhuan Falun.

Un día en 2001, un vecino que me había oído aclarar la verdad antes, me apartó y me dijo: "Tengo un ejemplar de 'tu' libro, el cual es exquisito". Le pregunté cuál era el título del libro, de qué color era y cómo lo había conseguido. Me contó lo que había sucedido el día anterior.

Este vecino era estibador temporal en una pequeña fábrica de papel higiénico cercana a nuestro pueblo. La materia prima que utilizaba esta fábrica eran libros y periódicos reciclados recogidos en las estaciones de colección de residuos de todo el país.

El día anterior, este vecino había ido a otro condado a recoger materias primas. Mientras las cargaba, se fijó en un libro grande y grueso envuelto en una funda de terciopelo rojo, y se le iluminaron los ojos. El conductor lo miró y dijo: "Este es un libro de Falun Gong, así que no me atrevo a leerlo". Mientras hablaba, quitó casualmente la cubierta y tiró el libro a la pila de papel de desecho del camión.

El vecino no dijo nada, pero recordó dónde estaba el libro. Cuando descargó el camión, encontró y escondió el libro en su abrigo y lo llevó a casa.

Dada su detallada descripción, supuse que tenía que ser una copia del Zhuan Falun de tapa dura, el libro que yo había anhelado. Esa noche me enseñó el libro y, en verdad ¡era lo que pensé que era! Estaba muy emocionado: "Es un gran libro. Por favor, guárdalo con cuidado. Si no lo quieres, lo guardaré para tí. También puedo pagarte".

"¡Lo guardé para ti!", dijo él. "Aprendí lo bueno que es Falun Gong gracias a ti. También he visto lo mucho que has cambiado después de que empezaste a practicar. Eres tan firme y sincero en tu fe, y eso me conmovió. Pensé que seguramente te gustaría este libro. No quería que algo tan grande se arruinara". Me sentí tan agradecido que le di mi sueldo del día, que él aceptó con gratitud.

Me sentí profundamente agradecido con el compasivo Shifu por haber hecho los arreglos para que yo recibiera el libro. Desde el momento en que tuve el libro, lo aprecié mucho.

Más tarde, cuando me arrestaron por defender mi fe, le pedí a Shifu que protegiera el preciado libro para que no fuera confiscado por la policía, que, de hecho, nunca registró la habitación donde guardaba el libro, aunque confiscaron muchos otros libros y la impresora que utilizaba para imprimir materiales de aclaración de la verdad.

Poco después, también detuvieron a mi mujer y saquearon nuestra casa por segunda vez. Me preocupé por mis libros de Dafa, especialmente por el más preciado.

Después de ser liberado, un practicante vino a visitarme y me dio el libro preciado. Ocurrió que se había llevado el libro para guardarlo cuando se enteró de mi arresto. Mi gratitud con Shifu y con el practicante iba más allá de las palabras.

Estas increíbles historias sobre mi preciado libro me hicieron ver que Shifu nos vigila y protege en todo momento. Haré bien las tres cosas y llevaré a cabo mi misión histórica, ya que es la única manera de pagar la salvación compasiva de Shifu.