La vida feliz de mi hermano

(Minghui.org) Mi hermano menor, Yong, tiene 57 años. Fue un bebé grande y sano, siempre fue fuerte. Pero no era muy inteligente y a veces le costaba expresarse. Le iba mal académicamente y solo terminó la escuela media. Nuestra madre decía que acabaría haciendo trabajos físicos.

Y resultó ser cierto. Después de dejar la escuela secundaria, Yong cargó sacos de grano para el pueblo, empujó carros para una empresa de construcción y trabajó como albañil. No tenía problemas para hacer estas cosas porque era fuerte. Cuando mi padre se jubiló en una mina de hierro, Yong ocupó su lugar allí como excavador. Después de casarse, se trasladó a otra fábrica donde trabajaba su mujer y siguió haciendo trabajos manuales. Cuando lo despidieron, se convirtió en vendedor ambulante y vendía maíz o cacahuetes hervidos. Por mucho que trabajara, sus ingresos nunca superaban el umbral de la pobreza.

Cuando empecé a practicar Falun Dafa a finales de 1998, le di a Yong un ejemplar de Zhuan Falun. Tanto él como su mujer lo leyeron, e incluso practicaron durante un tiempo. Aunque dejaron de hacerlo después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) iniciara la persecución en julio de 1999, siempre supieron que Dafa es bueno. Ambos, especialmente Yong, siempre me apoyaron en mi creencia.

Curiosamente, su situación cambió después. La mina de hierro en la que trabajaba Yong empleó a una empresa contratista cuyo supervisor conocía a Yong y sabía que era honesto y trabajaba duro. El supervisor lo contrató para dirigir las excavadoras contratadas en el sur de China. En el trabajo, Yong se volvió de alguna manera más inteligente, como si su inteligencia hubiera sido aprovechada. Una vez que bajó a la mina, dijo que "se sentía como en casa". De alguna manera sabía dónde estaba el mineral de hierro y cómo estaba distribuido, lo que confirmaban los instrumentos científicos. Algunos trabajadores bromeaban diciendo que Yong parecía tener un mapa del mineral en su cerebro. Y no solo eso, sino que, cuando estaba bajo tierra, incluso tenía un buen sentido de la orientación. Todos estos avances eran sorprendentes.

La capacidad de comunicación de Yong también mejoró. Durante las reuniones informativas diarias de la mañana, hablaba con claridad y al grano, tranquilizando a los trabajadores. Gracias a su excelente rendimiento, se hizo muy conocido entre sus compañeros. Más tarde, varias minas de hierro lo contrataron para encargarse de la seguridad y gestionar la producción subterránea. También trabajó con otros para gestionar empresas contratistas.

Los ingresos de Yong aumentaron con el paso del tiempo. En 2008, compró un gran apartamento. En 2017, su familia se trasladó a un apartamento más grande en una comunidad de lujo y se convirtió en mi vecino.

Tras el estallido de la pandemia en 2020, Yong siguió mi consejo y recitaba a menudo "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Siguieron más bendiciones. Primero, fue contratado por una mina de hierro con un salario de más de 200.000 yuanes al año. Ese mismo año, solicitó la jubilación bajo una categoría especial y le aprobaron la jubilación a los 55 años. Después de que Yong empezara a cobrar su pensión, su hija aprobó el examen de funcionario y se convirtió en empleada del gobierno. Más tarde, se casó con un buen joven que es muy amable con Yong.

Ahora un gran grupo minero contrató a Yong como ejecutivo y le paga bien. "¡Vaya! Nunca esperé que, después de hacer trabajos físicos toda mi vida, acabaría siendo un trabajador de cuello blanco", dijo. "La vida es tan interesante".

En la reunión familiar de este año, Yong parecía joven y feliz y sonreía todo el tiempo. Su yerno preparó toda la comida mientras Yong y su mujer jugaban con el nieto. "La vida no puede ser mejor", dijo Yong.