​Comprender la verdad y cultivar Dafa: Salir a salvar a los seres conscientes

(Minghui.org) Este año cumplo 82 años. Conocí a una practicante de Falun Dafa que estaba aclarando la verdad sobre Dafa en las calles en 2003. Cuando se enteró de que yo tenía mala salud, me dijo que Falun Dafa es un sistema de cultivación muy virtuoso que tiene sus raíces en la tradición budista. También me dijo que el Maestro de Dafa está aquí para salvar a la gente. Me dijo que mientras creyera sinceramente que Dafa es bueno y recitara con frecuencia "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno", el Maestro de Dafa cuidaría de mí y podría recuperarme de mis enfermedades.

Después de regresar a casa, todos los días recité las frases "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" que me enseñó. Para mi sorpresa, me recuperé de las enfermedades que me aquejaban desde hacía mucho tiempo, como el dolor gástrico, el insomnio y la tos. Me sentí muy bien.

En ese momento, como mi marido acababa de fallecer. Lloré tanto que casi me quedé ciega. Después de recitar "Falun Dafa es bueno", mi vista se recuperó y mi estado de ánimo también mejoró. También les dije a mis hijos que había conocido a una persona realmente buena.

Después de eso, conocí a otra practicante de Dafa en un parque. Ella vendía cosas cerca y después de contarle mi encuentro con una practicante de Dafa un tiempo atrás, me sugirió que fuera a su casa a ver los vídeos de conferencias del fundador de Falun Dafa, el Maestro Li Hongzhi. A partir de ese día, comencé mi práctica de cultivación en Dafa.

Me uní a un pequeño grupo de estudio del Fa en 2005. Como soy analfabeta, solo escuchaba a los practicantes leer durante la sesión de estudio del Fa. Después de regresar a casa, pedía a mis hijos que me enseñaran las palabras que no podía leer.

Cuando mis hijos no estaban, incluso salía a la calle para pedir ayuda a los transeúntes. Algunos de los transeúntes a los que me acercaba se daban cuenta de que era analfabeta y se emocionaban mucho. Me decían: "¡Realmente no esperaba que una persona de edad tan avanzada aún quisiera aprender a leer!". Aunque aprendía a leer una palabra determinada, olvidaba cómo leerla al cabo de unos días. Le rogué al Maestro en mi corazón que me ayudara. Creo que el Maestro vio mi determinación en querer estudiar el Fa, y así me dio poder. En 2006, finalmente pude leer todo el libro Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa.

Salir para aclarar la verdad y salvar a los seres conscientes

Después de unirme al grupo de estudio del Fa, supe que el Maestro pide a los practicantes de Dafa que hagan bien las tres cosas. Por lo tanto, salí con los practicantes para aclarar la verdad sobre Dafa y salvar a los seres conscientes.

Después del brote de la pandemia, experimenté muchos incidentes que validaron la naturaleza milagrosa de Dafa. A continuación comparto algunos de ellos.

Como soy analfabeta, cuando salgo a esclarecer la verdad tengo que ingeniármelas para superar mi incapacidad de leer y escribir. Cuando alguien acepta renunciar al Partido Comunista Chino (PCCh) y sus organizaciones juveniles, le entrego un papel y le pido que escriba su nombre y la organización a la que quiere renunciar. A veces, una persona decide cancelar el nombre que había escrito en el papel. Pero trato de persuadirles de que no cambien de opinión y sigo aclarándoles la verdad. La mayor parte de las veces, siguen adelante con la renuncia al PCCh.

Como no sé ir en bicicleta, voy a pie a todas partes. Cuando voy al supermercado o a otras tiendas, aclaro la verdad sobre Dafa al personal de ventas y a los clientes y los animo a renunciar al PCCh. Cuando me encuentro con extraños en la calle, ya sean jóvenes o mayores, les aclaro la verdad. Incluso puedo persuadir a muchos estudiantes de primaria para que renuncien a los Jóvenes Pioneros [una de las organizaciones juveniles del PCCh] con éxito. La mayoría de los que aceptan renunciar al PCCh me ayudan a escribir sus nombres. Algunas de estas personas estaban realmente agradecidas. Por supuesto, también hay gente que no está de acuerdo en renunciar.

Al principio, mis hijos estaban preocupados por mi seguridad al ver que, a pesar de mi avanzada edad, seguía yendo a todas partes para aclarar la verdad. Les preocupaba que pudiera ocurrirme algo malo y también que sus empleos se vieran afectados debido a la política de implicación del PCCh. Por lo tanto, les dije con rectitud: "Esto no tiene nada que ver con ustedes, así que no tienen porqué preocuparse. No pasará nada malo. Tengo al Maestro protegiéndome, así que ¿de qué tengo miedo?".

Como han pasado tantos años, mis hijos ya no se preocupan ni me impiden salir a aclarar la verdad. Todos ellos recitan en sus corazones "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" y han renunciado al PCCh y sus organizaciones juveniles. Mis hijos también han dicho: "Mira, desde que mi madre practica Falun Dafa, su salud es muy buena. No parece una persona de más de 80 años".

Cuando salgo a aclarar la verdad, la gente me pregunta a menudo: "¿Cuántos años tienes?", y les digo que tengo más de 80 años. No me creen y piensan que tengo poco más de 60 años.

Recibir la protección del Maestro

Un día, fui a una comunidad residencial para aclarar la verdad. Una moto grande pasó muy cerca de mí y le dije al joven: "Soy una cultivadora de Falun Dafa, así que tengo a mi Maestro vigilándome. Si no fuera porque mi Maestro me vigila, si chocaras conmigo, definitivamente no te trataría amablemente. Recuerda recitar con frecuencia "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" y eso puede mantenerte a salvo".

Una vez, estaba comprando unas verduras en la carretera, cuando una minivan chocó contra mí y el conductor se marchó. Pero, entonces se dio cuenta de que me había golpeado, y regresó a ver cómo estaba. Le dije: "Me has golpeado". Rápidamente me preguntó: "Anciana, ¿cómo estás? ¿Está herida?". Le contesté: "¡Estoy bien!". Las personas que estaban a nuestro alrededor lo oyeron y se conmovieron por mi reacción. Algunos incluso dijeron: "Los huesos de esta anciana son muy fuertes. He oído un fuerte golpe".

A lo largo de todos estos años, he ofrecido incienso al Maestro todas las mañanas después de enviar pensamientos rectos. Luego, hago nueve reverencias al Maestro y le digo al retrato del Maestro: "Maestro, por favor, dale poder a esta discípula y dale la sabiduría para que me permita estudiar bien el Fa y salvar a más personas".

También quiero decir al Maestro: "Shifu, no te preocupes, me disciplinaré. Con Shifu aquí, nada malo me sucederá. Puedo progresar hasta hoy de una manera tan estable gracias al poder, la protección y el cuidado del Maestro. Gracias, Shifu. A partir de ahora, solo escucharé lo que diga el Maestro, tomaré el camino que Shifu ha dispuesto para mí y haré lo que Shifu quiera que haga".

También me gustaría aprovechar esta oportunidad para agradecer a mis compañeros practicantes su ayuda en la elaboración de este artículo de cultivación.

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