(Minghui.org) Hay un dicho en China: "Es fácil cambiar los ríos y las montañas, pero es difícil cambiar la naturaleza de una persona". Sin embargo, desde que empecé a practicar Falun Dafa, mi personalidad ha cambiado completamente.

Desde la infancia, era muy egocéntrico. Despreciaba a los demás. Más tarde tuve una grave enfermedad del hígado y estuve confinado en cama durante casi cinco años. Mi madre me cuidó. Todos mis familiares estaban muy preocupados, y eso me hizo más egocéntrico.

En lo único que pensaba era en cómo podía estar más cómodo. Nunca pensaba en los demás. Dormía la siesta todos los días al mediodía. Todos mis familiares tenían que salir de casa a esa hora. De lo contrario, un pequeño ruido me impedía dormirme. A veces, todavía no podía dormirme a las 4 de la tarde, pero mi madre tenía que regresar a casa para cocinar. Lo hacía todo en silencio para no molestarme, pero aun así, a menudo me quejaba con ella por hacer ruido.

Empecé a practicar Falun Dafa en 1995, y al poco tiempo estaba completamente sano. Aprendí del estudio del Fa que la naturaleza original de una persona es bondadosa, y el egoísmo no es parte del verdadero ser. Entonces, me esforcé por cambiarme. Pero debido a todos mis pensamientos y comportamientos habituales, ni siquiera sabía cómo empezar a pensar en los demás.

Con el tiempo, adquirí una comprensión más profunda de cómo pensar en los demás. Recuerdo que una vez, después de estudiar Zhuan Falun, de repente tuve una inspiración y sentí que tenía que poner a los demás antes que a mí. Gradualmente, a través de la cultivación, pude sentir más compasión por la gente. Cuanto más estudiaba el Fa, era más considerado. Me di cuenta que estaba desarrollando Compasión.

Cuando veía piedras grandes o trozos de vidrio rotos en la carretera, a menudo los recogía. Dejé de quejarme de la gente y empecé a tolerarlos más. Una vez, cuando iba en mi bicicleta eléctrica, un peatón paró un taxi, y el taxi se puso de repente frente a mí. Frené inmediatamente, pero me caí de la bicicleta. Estaba tan enfadado que me acerqué corriendo y agarré el cuello del conductor. El conductor estaba tan asustado que su rostro se puso pálido. En ese momento, recordé que soy un practicante de Dafa y que debo ser tolerante con los demás. Inmediatamente lo solté, me di la vuelta, recogí mi bicicleta y me fui. Esto sorprendió al conductor, que se quedó parado, sin saber qué pensar.

Después de casarme, mi entorno cambió mucho. Antes dependía de mis padres para todo, pero ahora me volví más responsable. No estaba acostumbrado a esto, pero traté de cambiar mediante la cultivación. Cuando iba de compras con mi esposa, la ayudaba a cargar las cosas pesadas. Cuando cocinaba, pensaba en lo que les gustaba a mi esposa y a mi hijo. Cuando tenía conflictos con los demás, podía mirar hacia dentro y no me quejaba siempre. Todos mis familiares, compañeros y amigos de mi esposa pensaban que yo era un "marido modelo". En realidad, pude hacerlo gracias a la cultivación.

Un compañero de clase de mi esposa se casó con una compañera mía. En su fiesta, todos hablaron de los grandes cambios en mí. Dijeron que yo era una persona nueva comparada con lo que era antes.

Dirigía una tienda y siempre intentaba poner en primer lugar las necesidades de mis clientes. Les ayudaba a elegir los artículos que eran mejores para ellos, no los que generaban más dinero. Una vez, un cliente adinerado compró un artículo, pero al poco tiempo se le rompió debido a una mala manipulación. No le importó y se limitó a comprar uno nuevo. Le expliqué cómo debía utilizar el artículo correctamente e incluso fui a un sitio web para revisar algunas cosas. Al final encontré el problema y le indiqué cómo solucionarlo. Desde entonces, confió tanto en mí que solo venía a mi tienda cuando necesitaba comprar este artículo.

No es fácil hacer negocios en China, ya que es un entorno de intrigas. Uno no solo enfrenta el engaño entre compañeros, las dificultades que crean los clientes problemáticos, los funcionarios gubernamentales corruptos, sino también la mala conducta de los proveedores. Como practicantes de Dafa, debemos ser buenas personas independientemente del entorno.

En una ocasión, compré unos productos a una fábrica, pero me di cuenta que tenían problemas de calidad después de revenderlos a los clientes. Aunque los productos podían seguir utilizándose con una simple reparación, pensé que los clientes estaban gastando demasiado por un producto de baja calidad.

Entonces contacté a la fábrica y pedí piezas de repuesto. Sin embargo, debido a una negligencia, lo que enviaron no coincidía con los productos. Así que tuve que pedir que volvieran a enviar las piezas. La fábrica estaba muy lejos y tardó mucho tiempo en ir y regresar. Cuando recibí las piezas correctas, retiré todos los productos y asigné a un técnico para que sustituyera todas las piezas que tenían problemas, lo que me tomó unos cuantos días más. Gasté mucho tiempo, energía y dinero en este asunto. Aunque mucha gente no entendió por qué lo hice, me sentí más tranquilo y libre de culpa. Sentí que era lo correcto.

Trato a mis empleados con confianza. Nunca les hago demasiadas críticas y nunca les extiendo las horas de trabajo sin motivo. Les proporciono comidas cuidadosamente preparadas, además de bebidas frías en verano y sopa caliente en invierno. A cambio, me tratan con respeto.

Durante mi trayectoria empresarial, todos mis clientes, compañeros y proveedores han hecho buenos comentarios sobre mí. Muchos de ellos saben que me he convertido en una buena persona gracias a mi cultivación en Falun Dafa. Muchas personas comprenden la verdad y se dan cuenta que el Partido Comunista Chino (PCCh) hace mal al perseguir a un grupo de buenas personas como yo. Algunos han renunciado al PCCh y han elegido un futuro mejor para ellos.

Al recordar mis 26 años de cultivación, he disfrutado de mucha felicidad. También he experimentado muchas dificultades, especialmente después de que el PCCh lanzara su persecución en contra de Falun Dafa en 1999. Sin embargo, comparado con lo que he recibido de la práctica de la cultivación, esas dificultades no significan nada.

Durante este tiempo, he cultivado un alto carácter moral, me he vuelto físicamente saludable, mentalmente pacífico y más noble. También he desarrollado relaciones sinceras y de confianza con los demás. ¿No son todas estas las cosas que la gente realmente desea?

Agradezco a Falun Dafa. ¡Estoy agradecido con nuestro gran y benevolente Maestro! ¡Cultivar Falun Dafa es la elección más noble que he hecho durante toda mi vida!

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