Reconocer mis errores al memorizar el Fa

(Minghui.org) Durante mucho tiempo, no pude hacer bien las tres cosas. Sobre todo, no era capaz de concentrarme cuando estudiaba el Fa en el estudio grupal.

Mi visión se volvía borrosa cuando otros practicantes leían el Fa y no podía ver las palabras. No obtuve nada del estudio del Fa y en cambio me sentí incómoda.

Anteriormente, cuando estudiaba bien el Fa, sentía que mi cuerpo era ligero, y era capaz de resolver todos mis problemas y pasar todas mis pruebas.

Empecé a tener tribulaciones debido a mi mal estado mientras estudiaba el Fa.

Además, empecé a tener sueños extraños, que siempre se hacían realidad al día siguiente. Pensé que era una interferencia de mi alma secundaria [espíritu asistente]. Así que me comuniqué con él, pero no hubo ningún cambio.

Mi situación mejoró un poco cuando pedí ayuda a Shifu Li (fundador de Dafa), pero no mejoró en lo esencial. Miré hacia adentro, envié pensamientos rectos y discutí mi situación con otros practicantes, pero mi estado no mejoró en absoluto.

Empecé a tener miedo porque no sabía qué era lo que causaba este estado.

Un día, soñé que me presentaba a un examen.

Sentía que no podía aprobar el examen, así que le pedí al profesor que me permitiera buscar la ayuda de mis compañeros. El sueño reflejaba mi mentalidad en ese momento.

Quería pedir ayuda a los practicantes, pero no encontraba a nadie que pudiera ayudarme.

Un practicante me sugirió que memorizara el Fa. Lo intenté pero no pude concentrarme. Miré en mi interior y me pregunté por qué no podía memorizar ni una sola frase. Me di cuenta de que no podía persistir en la memorización del Fa porque no entendía los principios del Fa y no miraba hacia adentro.

Descubrí que podía recitar el Fa si miraba en mi interior y encontraba el apego que me retenía. De esta manera, pude concentrarme gradualmente.

En el proceso de memorizar el Fa, Shifu me reveló los principios del Fa en diferentes niveles. Me di cuenta de que mi entendimiento del Fa se había limitado a su efecto curativo, y que estaba muy lejos de asimilar la característica del universo de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Siempre me medí con estándares morales declinados, pensando que era mejor que los demás. Por ejemplo, a menudo iba a casa de una practicante y me quejaba de mi marido cuando teníamos conflictos.

Esto agravaba la situación porque la practicante y su marido me sugerían que me divorciara. También me empezaban a doler las piernas cuando estaba en su casa.

Supuse que lo sugerían porque tenían sentimentalismo hacia mí y no querían verme sufrir, sin embargo, en ese momento no miré hacia adentro. A través de la memorización del Fa, me di cuenta gradualmente de que toda la situación estaba relacionada con mis apegos y con un error que había cometido hace quince años, cuando el yerno de esta practicante tuvo una aventura y quiso divorciarse de su hija. En aquel momento, no miré su situación desde la perspectiva del Fa, y le sugerí que se divorciara.

Al final, su hija se divorció. Mientras memorizaba el Fa, recordé de repente lo que había hecho.

Me di cuenta de que no debería haber interferido en la vida personal de su hija. Admití mi error a Shifu y también compartí mi entendimiento con ese practicante.

Después de darme cuenta de mi apego, ya no me dolía la pierna.

En los últimos años, mi estado de cultivación se estancó, porque no había sido capaz de rectificarme en el Fa. Como resultado, tuve graves síntomas de yeli de enfermedad.

Cuando hacía el ejercicio de meditación, tenía sueño o no podía soportar el dolor. Pensé que era causado por mi búsqueda de comodidad y no miré más hacia adentro.

Al memorizar el Fa, descubrí que había hecho demasiadas cosas que no estaban de acuerdo con el Fa. Estaba en un mal estado porque no cumplía con el estándar de un verdadero practicante.

Tengo una propiedad de alquiler. Un día, por alguna razón, no pude recitar el Fa, así que fui a mi propiedad alquilada para tener un descanso.

Cuando estaba allí, miré hacia adentro y reconocí más de mis errores anteriores. Me di cuenta de que, aunque aclaré la verdad bajo todo tipo de presión, no me cultivé sólidamente.

Me di cuenta de mi apego a la fama y al dinero, que me llevó a casarme con mi marido. Mi marido es discapacitado y no puede caminar.

Sin embargo, sus padres eran ricos y le apadrinaban, así que me casé con él por mi apego a ganar una fortuna.

Los padres de mi marido tienen seis hijos y los visitaban a menudo durante las vacaciones. Mis suegros querían mudarse con nosotros, pero yo no quería vivir con ellos.

Así que tuvieron que comprar una casa para nosotros, lo que di por hecho.

Tras su muerte, heredamos su casa. Los hermanos de mi marido también le daban dinero, lo que me parecía natural.

A través de memorizar el Fa, me di cuenta de que la gran familia de mi marido era mi entorno de cultivación. Sin embargo, usé todo tipo de excusas para encubrirlo repetidamente.

Tenía conflictos con mi marido todo el tiempo y nunca miraba hacia dentro. Cuando pensé en ello, me di cuenta de que estaba equivocada, y me sentí culpable y avergonzada.

Resultó que había actuado en contra de las características del universo. Durante muchos años, cada vez que tenía tribulaciones, siempre pedía la ayuda de Shifu y confiaba en la ayuda de otros practicantes.

Pedí perdón a Shifu y le agradecí que me diera la oportunidad de rectificarme, pero en repetidas ocasiones no miré hacia dentro ni mejoré en la cultivación.

Después de desenterrar mis apegos y darme cuenta de mis brechas, descubrí que ya no tenía sueño en la meditación. Mi marido también cambió y se volvió amable cuando me hablaba.

La armonía volvió a mi familia.

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