​Cómo comprendí lo serio y lo solemne que es practicar Falun Dafa

(Minghui.org) Cuando sonó el despertador por la mañana, me levanté rápidamente para hacer las cinco series de ejercicios de Falun Dafa. Luego regresé a la cama.

Cuando me volví a despertar, me sentía hambrienta y mareada. No tenía energía y me sentía con la cabeza vacía. A duras penas llegué al baño y me apoyé en el borde del lavatorio para poder lavarme las manos. Cuando le dije a mi marido que tenía mucha hambre, se limitó a decir: "Entonces ve a prepararte algo de comer".

Mi marido no tardó en darse cuenta de que algo iba mal, sobre todo cuando vio la forma en que me ponía las manos sobre el pecho. Mi cara también mostraba el malestar que sentía. Así que decidió prepararme algo para comer.

Pensé que los compañeros practicantes recitan las dos frases "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno", cuando se enfrentan a dificultades. Así que empecé a recitar en silencio las dos frases una y otra vez. Al cabo de un rato, sentí que algo salía del lado izquierdo de mi pierna, lo que ocurrió dos veces. Esto me hizo comprender que mi cuerpo se estaba purificando.

Entré en la cocina y me senté en la mesa del comedor. Quería quemar incienso para el Maestro Li (el fundador de Falun Dafa), pero aún no tenía energías para caminar. De repente se me ocurrió un pensamiento: "¿No es esto una ilusión? Está aquí para perjudicarme. El mal me interfiere porque hay brechas en mi cultivación".

Una escena de mi hija, mi nieto y yo pasó por mi mente. La noche anterior estábamos viendo la televisión mientras bebíamos té y comíamos un aperitivo. En aquel momento estaba contenta y cómoda, pero en el fondo me sentía bastante inquieta. ¿Cómo puedo divertirme en la sociedad ordinaria cuando hay tantos seres conscientes que salvar? Me dije que pasarlo bien no ocurre tan a menudo, y que lo compensaría en el futuro. No pensé que esa idea pudiera afectar mi cultivación.

El Maestro dijo:

"El rigor del xiulian es tal que un lazo está vinculado con otro lazo; aunque sea un minuto, un paso, no pueden ser interferidos" (Otra vez un palo de advertencia).

"El xiulian en sí mismo es atravesar el camino de un dios. El corazón humano en todos lados es siempre un impedimento. Pero vuestro camino es muy estrecho, con un pequeño descuido, el camino se desvía, y una vez que se desvía, surgirán problemas, incluso problemas grandes, y si no puede retornar, será un lamento para siempre" Otra vez un palo de advertencia).

Comprendí lo que ocurría después de leer el Fa del Maestro. Mis pensamientos rectos surgieron y supe que el Maestro me protegía porque soy una practicante de Falun Dafa. Solo el Maestro tiene la última palabra. No debo reconocer esta ilusión, que es de naturaleza persecutoria. Si he hecho algo que no se alinea con el Fa, me rectificaré de acuerdo con las exigencias de Dafa. No dejaré ninguna brecha para que las viejas fuerzas puedan interferir conmigo.

Mientras pensaba en todo esto, sentí una fuerte fuerza desde lo más profundo y rompí a llorar. No sabía qué hacer, y mi marido también estaba sorprendido. No sabía por qué empecé a llorar y solo repetía: "Solo el Maestro tiene la última palabra".

Me levanté mientras lloraba y me di cuenta de que mi cuerpo se sentía muy ligero. Le dije a mi marido: "¡Ya estoy mejor! Es increíble". Me había convertido en una persona completamente diferente y era capaz de caminar con normalidad. Parecía haber despertado de un largo sueño y me preguntaba por qué había llorado. Mi lado que sabe en otras dimensiones debió ser testigo de lo mucho que el Maestro soportó por mí.

Comprendí que el gran y compasivo Maestro no se había dado por vencido y me había ayudado. Mi llanto significaba el despertar de mi alma, y mis lágrimas representaban lo que sentía hacia el Maestro. Salí de la cocina y decidí quemar incienso para el Maestro. Puse las palmas de las manos en la posición heshi (dos palmas juntas delante del pecho para mostrar respeto), y me incliné ante el Maestro, ¡con quien estoy siempre en deuda!

Superar esta tribulación me hizo más consciente de la seriedad y la solemnidad de la práctica de cultivación. No se puede pasar por alto nada. Un verdadero cultivador debe encontrar alegría en el sufrimiento de las dificultades. Cuando uno se complace en los beneficios materiales, se rendirá a mitad de camino y todo terminará en vano. Necesito estudiar más el Fa, cambiar mis nociones humanas y seguir los principios de Dafa. Tengo que dejar de lado el apego al sentimentalismo y elevarme más allá.

Seré aún más diligente en la cultivación. Recorreré mi camino con el Maestro hasta el final, y cumpliré mis votos históricos, a pesar de las dificultades.

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