(Minghui.org) Durante más de 20 años, trabajé en la Junta de Vecinos como guardia de seguridad. Ya me he jubilado y tengo más de 70 años e edad. Los Comités de Parrio son ramas a nivel de calle del Partido Comunista Chino (PCCh). No estaba acostumbrado al estilo hipócrita, despiadado y combativo que experimenté allí. Me las arreglé buscando excusas para aplazar el trabajo sucio.
Especialmente después de 1999, cuando el PCCh comenzó a perseguir a Falun Dafa, a los Comités de Barrio se nos asignó la tarea de vigilar a los practicantes locales e informar cada semana de todo lo que hacían o decían.
Por los practicantes que conocí, pude ver que son personas buenas y rectas. Son considerados con los demás y pueden soportar las dificultades. Había más de una docena de personas así en mi zona. Cuando estaba a cargo, nunca los acosé, y mucho menos los controlé ni los seguí. En mis informes, escribía lo buenos y cooperativos que eran. Así fue como me ocupé "del trabajo" durante muchos años y la persecución en nuestra zona no fue tan grave.
Hubo algunas ocasiones en las que me pidieron que participara en sesiones de lavado de cerebro contra los practicantes y aun así me esforcé por protegerlos.
En mi trabajo, a menudo tenía contactos con el personal de la Oficina 610 y llegué a conocer a algunos de ellos. Una vez, le dije al director de la Oficina 610 que estaba impresionado por lo decentes que eran estos practicantes de Falun Dafa y que no se comportaban mal. Estuvo de acuerdo conmigo. Creo que todos los agentes de la Oficina 610 entendieron de qué se trata Falun Dafa y cómo enseña a la gente a ser buena, aunque su trabajo fuera perseguir a esta gente buena.
Cuando se publicó el libro Nueve comentarios sobre el Partido Comunista en 2004, el PCCh lo prohibió inmediatamente. Hubo una orden de que cada vez que se encontrara un ejemplar del libro en una comunidad, todos los miembros del Comité de Vecinos estarían implicados. Creo que esto demostró su miedo al libro.
Me pregunté qué tipo de libro era y por qué el PCCh se asustó hasta tal punto. Cuando un día me encontré con el libro, lo leí detenidamente. Era un libro que exponía todas las mentiras del PCCh. Despierta a los ciudadanos chinos para que se sacudan el miedo y conozcan la verdadera naturaleza del PCCh. También ayuda a la gente a ver los numerosos crímenes que el PCCh ha cometido contra la nación china. ¡Me quedé atónito!
El libro enseña que el PCCh es un espectro maligno. Ha utilizado los medios más despreciables y repugnantes de la historia para llevar a cabo campañas de represión. Su tiranía dictatorial ha matado a innumerables chinos. Ha destruido la cultura y la moral tradicionales. Todo lo que propaga es falso y malvado. Lava el cerebro del pueblo chino en todo momento y sume a la nación China en la perdición y la tristeza.
Para saber más sobre la verdad, hablé a menudo con los practicantes de Falun Dafa. Estudié detenidamente los materiales que me dieron. También escuché noticias y temas de actualidad sin censura, especialmente a través de Radio Minghui y Sonido de la Esperanza (SOH -por sus siglas en inglés-). Creo que los podcasts han hecho que mi mente sea más lucida y mi corazón más amplio. Me sentí más despreocupado. Podía manejar los conflictos familiares con más calma y tranquilidad. Mi vida se volvió más armoniosa. Comprendí lo que es Falun Dafa y lo que hacen los practicantes de Falun Dafa.
Después de retirarme, seguí en contacto con los practicantes de Falun Dafa y aprendí más. Su carácter, sus palabras y sus actos me influyeron profundamente. En el pasado, les ayudé a devolver su amabilidad. Ahora entiendo que tengo una profunda relación predestinada con Falun Dafa. Mi vida anhelaba la divinidad y fui guiado e inspirado por lo divino.
Después de renunciar el PCCh y sus organizaciones afiliadas, nuestra familia fue bendecida. Mi esposa y yo solíamos tener todo tipo de enfermedades, pero ahora nuestra salud mejoró mucho. Tuvimos un grave accidente de tráfico, pero nadie resultó herido. Nos estafaron miles de yuanes, pero los recuperamos sin problemas. Fuimos protegidos y bendecidos por Dafa.
Por habernos beneficiado personalmente al aprender la verdad, a menudo contamos a nuestros amigos y parientes la verdad sobre Falun Dafa, la naturaleza malvada del PCCh y por qué hay que renunciar el Partido.
Después de que mi familia y yo fuimos testigos de la maravilla de Falun Dafa, mi esposa y yo decidimos practicar Falun Dafa, por nuestra cuenta. Este es un nuevo punto de partida para nuestra vida, un nuevo reto en nuestra vida.
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