(Minghui.org) Me gustaría compartir dos experiencias milagrosas que he tenido durante el proceso de asistir al Maestro en la rectificación del Fa en los últimos años.

Rompiendo el bloqueo de Internet

Debido a la persecución a Falun Dafa que comenzó en julio de 1999, y al completo bloqueo de Internet en China, los practicantes de nuestra zona ya no tenían una forma fiable de acceder a las nuevas enseñanzas del Fa. Esto fue en la segunda mitad del año 2000. También fue cuando las enseñanzas falsas del Fa fueron creadas y difundidas por todas partes. Observando la situación y viendo a los practicantes que se dejaban llevar por las falsas enseñanzas del Fa, me sentí realmente triste. Estaba decidido a encontrar una manera de romper el bloqueo de Internet, para que pudiéramos conectar con los sitios web de Dafa en el extranjero y obtener las verdaderas enseñanzas de Dafa de las fuentes adecuadas.

En aquel momento, no sabía nada de redes informáticas. Así que fui y compré un ordenador y un módem, y los conecté según las instrucciones. El ordenador mostraba que todo estaba bien conectado, pero yo no sabía cómo conectarme. Así que fui a un cibercafé y le pedí a la persona que me enseñara. Pronto pude utilizar el navegador IE (Internet Explorer) para navegar por Internet en casa. Sin embargo, seguía sin poder entrar en Minghui.org. Intenté entrar en un enlace al sitio web que me habían proporcionado previamente otros practicantes. Pero después de introducir el enlace, me llevó a un sitio web falso con artículos que atacaban a Dafa. Pensé que debía encontrar una manera de romper el bloqueo de Internet y entrar en el verdadero sitio web de Minghui.

Al principio, probé todas las cosas que se me ocurrieron. Solo tenía un pensamiento: "¡Debo entrar en Minghui!". Más tarde, vi algunos sitios web que hablaban de servidores proxy. No sabía si sería útil, pero me descargué un archivo de texto con una serie de URL de servidores proxy. Una de las URL estaba etiquetada al final: "Copie esta URL en la barra de direcciones para entrar en Minghui.org". Lo probé y efectivamente entré en Minghui. Lloré enseguida. Sabía que el Maestro me había ayudado. Este resultado iba más allá de mi imaginación. Consulté mi reloj y vi que todo el proceso había durado menos de dos horas. Este asunto que nos había estado preocupando durante tanto tiempo se había resuelto así de fácil.

Lo que aprendí de esto fue que la gente común debe aprender algunas habilidades para saber cómo hacer esto, pero los practicantes de Dafa no siguen necesariamente el mismo proceso. El Maestro solo mira nuestros corazones y mientras sean rectos, las cosas se pueden lograr. Esta es la mayor diferencia entre cómo los cultivadores y la gente común hacen las cosas.

Desde entonces, me convertí naturalmente en el recurso técnico local para los practicantes. Más tarde, mientras desarrollábamos varios proyectos de aclaración de la verdad, tratamos de no pensar demasiado en nuestras edades, grados de educación o antecedentes. Siempre que sintiéramos que sería beneficioso para validar el Fa y salvar a los seres consientes, lo haríamos. A menudo se producían milagros en el proceso.

Creando un sistema operativo propio

En 2014, el sistema operativo Windows XP que usamos durante muchos años estaba a punto de caducar, pero no teníamos un nuevo sistema seguro listo para usar. En el pasado, los sistemas operativos que utilizábamos se descargaban de Tiandixing Forum. Sin embargo, en ese momento, Tiandixing aún no había lanzado nada. Solo faltaba un mes para que el sistema XP caducara, y esta vez pensamos que Tiandixing podría no lanzar un nuevo sistema para nosotros. Así que tuvimos que crear un sistema nosotros mismos. Esta área de la tecnología nos resultaba completamente desconocida, así que pedimos a nuestro coordinador que averiguara dónde podíamos aprender a programar sistemas.

Pronto el coordinador me envió una dirección, y rápidamente me puse en contacto con un compañero practicante de otra zona que acordó reunirse en tres días. El compañero me envió un mensaje en el que decía que íbamos a trabajar todos juntos y me sugería que me encargara de hacer el menú del sistema.

No tenía ni idea de cómo se hacía. Ni siquiera había oído hablar de un menú de sistema, y mucho menos de cómo crear uno. Además, no tenía las herramientas ni el software para hacerlo. Pero lo pensé mejor: "Ya que ese compañero practicante me pidió que lo hiciera, debe tener sus razones. El tiempo es muy escaso. No deberíamos depender de otros practicantes para todo, sin aportar nada". Así que me dije que tenía que intentarlo. Busqué en Internet cómo hacerlo, y pronto encontré el software correspondiente y sencillos tutoriales. Apenas aprendí a utilizar el software antes de ir a la reunión.

La reunión duraba solo dos días y el tiempo era muy escaso. Cooperamos y nos repartimos el trabajo: algunos se encargaron del empaquetado del sistema, otros de escribir el tutorial de uso del disco del sistema y yo me encargué de escribir el menú de arranque del disco del sistema. Cuando volví a casa, el tiempo también era muy escaso. Había cientos de ordenadores locales que requerían la sustitución del sistema. Hacerlos todos yo solo no permitiría cumplir el plazo. Así que pasé otros dos días formando a varios compañeros en la instalación del sistema. Para los que querían ayudar, no era necesario tener conocimientos previos. El resultado fue que aquellos practicantes sin conocimientos de informática no solo completaron el trabajo de forma excelente, sino que maduraron en el proceso y pasaron a formar parte del equipo técnico local. Desde entonces, se encargan de gran parte de los trabajos de mantenimiento y reparación de ordenadores en sus regiones.

No tuve tiempo de pensar realmente en esta experiencia hasta que todo terminó. Sentí que este logro era realmente increíble. Todo el proceso solo podía describirse con la palabra "milagroso". Fue como dijo el Maestro en "Bondades entre el Shifu y los dizi". (Hong Yin II):

"…Con los dizi repletos de pensamientos rectos,
el Shifu posee el poder de llevarlos al Cielo".

A través de estas dos experiencias milagrosas, me di cuenta de que los mayores obstáculos que encontramos en nuestra cultivación son los diversos conceptos y nociones que hemos formado en la sociedad ordinaria a lo largo de los años. Son estas nociones humanas las que obstaculizan nuestra cultivación y nuestro mejor logro en hacer las cosas. También impiden que se produzcan los milagros. Son nuestras mentalidades humanas las que nos dificultan el avance en la cultivación. Solo eliminando estas nociones humanas obstinadas, pueden manifestarse los milagros de Dafa en el mundo.

Estos entendimientos se basan a mi nivel limitado. Si hay algo inapropiado, por favor, señálenme benevolentemente.

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