(Minghui.org) Este año cumplo 92 años, y estoy sana. Vivo en un sexto piso, pero no me siento cansada al subir y bajar las escaleras todos los días. Cuando subo las escaleras del 1.º al 6.º piso, no jadeo, a pesar de que no me detengo a descansar entre los pisos. Tampoco me duelen los brazos ni las piernas y me siento ligera como una pluma. Cada vez que alguien me pregunta por mi edad, dejo que la otra parte adivine. Normalmente dicen que parezco de 60 o 70 años. Yo les digo que ya tengo más de 90 años. La otra parte suele sorprenderse mucho y dice: "¡No pareces tener más de 90 años!".

Entonces digo: "Soy una cultivadora de Falun Dafa. Después de empezar a practicar Falun Dafa, me volví sana y alegre, amable con la gente y dispuesta a ayudar a los demás. ¡Ya estoy viviendo con tres generaciones después de la mía! Mi bisnieto tiene 16 años. Cuando mis hijos, nietos y bisnietos ven que me he vuelto tan fuerte y saludable después de cultivarme, me apoyan en mi cultivación, y todos recitan "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" con un corazón lleno de respeto. Han sido bendecidos con buenos resultados. Todos ellos tienen una carrera exitosa y ganan bien. Deberías recitar 'Falun Dafa es bueno' para que seas bendecido y tengas buenos rendimientos también". La gente sonríe y asiente con la cabeza.

Nunca he ido a la escuela, pero desde que empecé a practicar Falun Dafa, el Maestro me dio sabiduría y conocimiento, así que puedo leer. ¡Incluso puedo memorizar el precioso libro de Falun Dafa Zhuan Falun! También puedo entender lo que el libro Zhuan Falun nos dice. Cada día, persisto en estudiar el Fa y hacer los ejercicios. Así, ¡me sumerjo en la luz de Buda todos los días! Nunca he tenido un trabajo, y mi esposo falleció cuando era bastante joven, así que vivo con mi hijo menor. Mi hijo menor también es un cultivador de Falun Dafa. Como es funcionario nacional, su salario es bastante alto, por lo que ambos llevamos una vida de buena calidad.

Después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) comenzara a perseguir a Falun Dafa, mi hijo menor fue a Beijing para validar la inocencia de Dafa, y fue arrestado, detenido y llevado a Campos de Trabajo Forzado. Su empresa también dejó de pagarle el sueldo. En ese momento, yo tenía más de 70 años. Como no tenía ingresos y no quería convertirme en una carga para el resto de mis hijos, busqué un trabajo. También necesitaba enviar dinero a mi hijo menor, ya que estaba haciendo una huelga de hambre para protestar por su persecución. Como era bastante mayor, solo podía recoger tapones de botellas. Este trabajo era bastante agotador y mis dedos tenían que hacer mucha fuerza para realizarlo. Por lo tanto, solo las personas mayores realizan este tipo de trabajos, mientras que los más jóvenes no están dispuestos a realizarlo. Todos los días trabajaba desde el amanecer hasta bien entrada la noche, pero después de siete días solo había ganado 35 yuanes.

Después dejé de trabajar y me puse a hacer ropa de bebé con dibujos de dragones, fénix, flores, melocotones, etc., utilizando hilos de diferentes colores. Como está totalmente bordada a mano con dibujos y palabras, la ropa de bebé ganó muchos clientes. También hice "zapatitos de tigre", que también se vendieron muy bien. No soy avariciosa. Me conformo con que el dinero ganado sea suficiente para mi hijo y mis gastos básicos. Utilizo el tiempo que me queda para estudiar el Fa, hacer los ejercicios e ir al Departamento de Policía o a la Estación de Policía que detuvo a mi hijo para aclarar la verdad sobre Dafa y pedir su liberación.

Después de que mi hijo fue liberado de la prisión, aclaró la verdad a su jefe, y este le permitió volver a trabajar. Durante los más de 20 años de persecución a Falun Dafa por el malvado PCCh, mi hijo siguió aclarando la verdad a la gente y los persuadió de que renunciaran a las organizaciones del PCCh. Quería que todos estuvieran a salvo de la calamidad inminente. Durante los últimos 20 años, fue arrestado por el malvado PCCh y detenido ilegalmente nueve veces. Cada vez que fue detenido, hizo una huelga de hambre para protestar contra la persecución y logró salir de la cárcel, siendo la última vez en 2011. Mi hijo fue detenido y condenado ilegalmente en secreto y perdió su trabajo.

A lo largo de todos estos años, me convertí en una visitante frecuente del Departamento de Policía. Cada vez que mi hijo era perseguido, iba al Departamento de Policía a buscar al subdirector respectivo para pedir la liberación de mi hijo, aclarar la verdad y convencerlo de que liberara a mi hijo incondicionalmente.

Una vez fui al Departamento de Policía y el agente que me ayudó a registrarme me preguntó para qué estaba allí. Le dije que buscaba al subdirector. Me dijo: "¿Ha pedido cita?". Le dije: "No". Por lo tanto, no me dejó subir. Me escondí a un lado y esperé. Al cabo de un rato, llegaron muchas personas y le dijeron al policía que tenían una cita con el subdirector. El agente les dejó subir amablemente. Así que rápidamente les seguí también por las escaleras. Cuando este grupo de personas entró en el despacho del subdirector, yo esperé fuera del despacho.

Cuando el grupo de personas terminó sus asuntos y salió, llamé a la puerta, entré y declaré mi propósito de venir a ver al subdirector. Él dijo: "¿Qué sentido tiene aprender Falun Dafa?". Le contesté: "Practicar Falun Dafa puede ayudar a la gente a eliminar enfermedades y a conseguir cuerpos sanos. Dafa enseña a la gente a ser buenas personas y ayuda a mejorar su integridad moral. Incluso los extranjeros lo practican". El subdirector dijo: "Eso está bien, pero no puedes distribuir folletos, y repartir pequeños volantes. Aquí se da a una persona, allí a otra e incluso se pide a la gente que renuncie a las organizaciones del PCCh". Le dije: "No he visto a mi hijo distribuir. Aunque lo haya hecho, ¡es por el bien de los demás! Está ayudando a la gente a entender la verdad y a aprender a distinguir el bien del mal". Este subdirector fue muy cortés. Llamó a sus hombres para que me llevaran a casa en un coche.

Más tarde fui a buscar al subdirector muchas veces, pero los funcionarios de menor rango me lo impedían. Algunos me decían: "Anciana, ¿qué tienes que decir? Puedes decírmelo y te ayudaré a transmitir el mensaje". Les dije: "No, ¿cómo puedes ayudarme a relatar mi asunto? ¿Cómo puedes explicarlo claramente?". Algunos funcionarios se mostraron bastante arrogantes y dijeron: "No vuelvas a venir aquí. El director no tiene tiempo para ocuparse de asuntos tan bajos". Yo dije: "Si el director no se preocupa por los asuntos, ¿por qué sigue siendo el director? Quienquiera que haya arrestado a mi hijo, buscaré al responsable. El magistrado del condado no se ocupa de estos asuntos. Si lo hacen, iré a buscar al magistrado del condado en su lugar".

No importa si consigo ver al director, pediré la liberación de mi hijo. Ya sea con un tiempo tormentoso o con un frío glacial, eso no detendrá mi determinación de pedir la liberación de mi hijo. Creo firmemente que mi hijo está haciendo algo que es lo más grande y sagrado, así que no importa si sufro esta pequeña dificultad. Mientras los seres conscientes puedan comprender la verdad y salvarse, me sentiré feliz por ello.

Aunque mi hijo perdió su trabajo, ¡tenemos al Maestro protegiéndonos a ambos! Aunque ya tengo una edad tan avanzada, todavía puedo cocinar. No solo alivié la carga de mis hijos cuando tenía más de 80 años, sino que incluso cuidé de mi bisnieto. Otras personas me felicitaron y dijeron que soy una vieja estrella de la longevidad.

Mi longevidad y mi salud provienen de Falun Dafa. ¡Gracias, gran y benévolo Maestro!

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