(Minghui.org) Una mañana de octubre de 2021, alguien llamó a mi puerta. No le abrí. Pregunté quién llamaba. La persona dijo que era el director de un Comité del Pueblo y que él y unos cuantos agentes de policía habían acudido varias veces a mi casa, pero que no me habían encontrado. Dijo que venía a entregarme un mensaje: dentro de unos días vendrán unas personas a exigirme que firme un documento. Si no lo firmo, me llevarán con ellos.

Le dije: "Por favor, dile a los que quieren que firme que soy, legalmente, un ciudadano y que deben tener la aprobación legal correspondiente para obligarme a firmar algo". Insistió en que solo había venido a entregar el mensaje. Me pidió mi número de teléfono para demostrar que había venido a hablar conmigo.

Cuando se fue, me sentí un poco perturbado. Me vinieron a la mente mis experiencias pasadas de acoso, detención y persecución. Inmediatamente me di cuenta de que estaba mal pensar en esas cosas del pasado. Me corregí rápidamente. Recordé lo que los compañeros practicantes compartieron durante el estudio del Fa, que somos discípulos de Dafa, que tenemos una gran responsabilidad y una misión de salvar a los seres conscientes. El Maestro nos concedió habilidades especiales, y no debemos sufrir ciegamente la persecución del mal. Debemos luchar contra la persecución y desintegrar el mal tanto por mi bien, como por el de los compañeros practicantes y todas las personas.

Shifu dijo:

"Al enfrentarse con los daños infundados, al enfrentarse a la persecución de Dafa y al enfrentarse a la injusticia forzada contra nosotros, no podemos tratar las cosas o aceptarlas categóricamente de la manera que fue hecha anteriormente en la cultivación personal, porque los discípulos de Dafa están ahora en el período de la rectificación del Fa" (La rectificación del Fa y la cultivación (Escrituras esenciales para mayor avance (II)).

La persecución irracional que el mal lanza contra nosotros es también una persecución a Dafa. Como discípulos de Dafa, debemos salvaguardar y validar el Fa. Somos gente buena, pero ser gente buena no significa que nos dejemos, fácilmente, intimidar por el mal. El Maestro nos concedió la capacidad de desintegrar el mal en otras dimensiones.

Me sentí aliviado. Después de discutir este asunto con un compañero, decidimos hablar primero con el director del Comité del Pueblo. Fuimos a su casa, pero no estaba. Su mujer le llamó y me pasó el teléfono. Le dije quién era y que tanto mi familia como yo queríamos saber quién pensaba llevarme si me negaba a firmar el documento; si era él o se trataba de otros. También le dije que había documentado la situación de su venida a hablar conmigo ayer, y que cuando volviera, podría dejarme algo firmado. Eso demostraría que había hablado conmigo. Así que, si me pasara algo, él sería el primero al que acudiría mi familia.

Inmediatamente se negó a firmar nada y recalcó que solo era el mensajero. El otro practicante tomó el teléfono y le dijo: "En el ámbito del derecho, tu acción se llama citación verbal, algo que no tienes derecho a hacer. Has violado la ley. Solo los agentes de policía están facultados para hacerlo si están tramitando un caso y tienen motivos legales. De lo contrario, ellos también pueden estar violando la ley".

Entonces le dije al director: "Como has ignorado la ley, si dejas de participar en este asunto, tu nombre no figurará en mi denuncia. Sin embargo, demandaré a quien participe en esto".

También le sugerí que evitara hacer esas cosas en el futuro y que no cooperara con la policía para perseguir a la gente buena. De lo contrario, se atraería problemas. Sintió mi amabilidad y me dio los nombres de las personas que habían ido a mi casa con él. Incluso me dijo lo que esas personas pretendían hacer conmigo.

Cuando la esposa del director se enteró de que habíamos venido a hablar con su marido sobre Falun Dafa, la expresión de su rostro cambió y adoptó una mirada de desprecio. Sin embargo, cuando supo que íbamos a demandar a los implicados, cambió su actitud. Sonreía y se excusaba por su marido. Incluso tomó la iniciativa de saber más cosas sobre Falun Dafa; nos dijo que nunca había creído en ningún dios o buda.

Con mi compañero practicante le contamos algunos casos judiciales. Uno de los casos la impactó bastante. Un cuadro del pueblo le dijo a un practicante de Falun Dafa que fuera a hablar con la policía. Sin embargo, el practicante fue arrestado y poco después lo golpearon hasta matarlo. La familia del practicante presentó una denuncia. La familia también demandó al oficial de la aldea que lo había engañado. Este no solo estaba molesto por su propia conciencia ya que el practicante había sido asesinado, sino que también se enfrentaba a la rendición de cuentas legal. La familia del oficial del pueblo dejó de sentirse en paz.

Mencionamos otro caso que implicaba a un cuadro de la aldea. La policía pidió al cuadro del pueblo que les ayudara a localizar a una practicante anciana y le dijo que solo querían hablar con ella. Sin embargo, cuando el cuadro los llevó al campo donde trabajaba la practicante, la policía llegó y se la llevó. La practicante regresó con vida después de estar detenida durante más de 10 días. Sin embargo, sus hijos querían hacer justicia, ya que sabían que su madre no había cometido ningún delito. El primer objetivo fue el cuadro del pueblo que engañó. Quien persigue a un practicante de Falun Dafa, no solo viola la ley en el mundo humano, sino que también está sujeto al principio del Cielo: "El bien es recompensado con el bien, y el mal se encuentra con el castigo".

Sentí que mis pensamientos rectos se hacían cada vez más fuertes mientras hablaba. Es evidente que la gente está realmente deseosa de ser salvada. La esposa del director incluso nos invitó amablemente a quedarnos a cenar antes de irnos.

Decidimos ir a hablar con los agentes que habían ido previamente a mi casa. Así que fuimos a la comisaría, pero no pudimos reunirnos con nadie porque todos estaban en una larga reunión. Conseguí el número de teléfono de un agente y le llamé más tarde. En cuanto le mencioné que había estado en mi casa, inmediatamente argumentó que no tenía nada que ver con el asunto y dijo que no volvería a ir a mi casa. Colgó el teléfono apresuradamente.

A partir de esta experiencia, me di cuenta de que debemos disolver activamente la persecución, en lugar de soportarla pasivamente. A menudo hemos oído a los agentes de policía que detienen a los practicantes decir cosas como: "Sabemos que sois buenas personas, pero por favor, cooperad con nosotros ya que estamos bajo la presión de las autoridades superiores y no tenemos otras opciones". La implicación es que debemos soportarlo pasivamente.

Debemos despertar rápidamente. Asumir nuestras responsabilidades como reyes o señores. Utilizar nuestras habilidades especiales que el Maestro nos ha otorgado para eliminar a los matones cósmicos que intentan destruir a todos los seres vivientes.

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