Lo que vi en otra dimensión después de romper el apego a la fama

(Minghui.org) Soy la única practicante en mi región de Australia Occidental. Ayudo a corregir el Epoch Times. Un día, poco antes de una fecha límite, estaba esperando una asignación, pero no había tenido noticias de nadie, así que entré en la aplicación de mensajería que utilizamos y descubrí que me había desconectado y no me había dado cuenta. Volví a entrar rápidamente y vi que las dos últimas páginas estaban listas para ser revisadas y que la gente había enviado mensajes preguntando dónde había ido. Me disculpé por mi ausencia y rápidamente terminé todo con la ayuda de otro practicante que tuvo que corregir una de las páginas por mí porque ahora no tenía tiempo.

Después me sentí muy, muy mal porque siempre había tenido un deseo muy fuerte de ser una persona de confianza, y sentí como un duro golpe a mi autoestima cuando fallé en este aspecto.

Esa misma noche, cuando terminé de estudiar por Internet con otra practicante, le conté lo que había sucedido. Ella reconoció el tipo de apego y lo llamó "fama". Inmediatamente supe que tenía razón, aunque no lo había reconocido como fama hasta que ella lo dijo. Querer ser de confianza es algo bueno, pero la motivación más profunda en mi caso era mala. Se trataba de la reputación y la fama.

Un poco más tarde esa noche, estaba acostada en la cama y me sentía agitada, así que dirigí mi atención en mirar hacia dentro y comencé a buscar mi apego a la fama tan profundamente como pude. De inmediato sentí que me adentraba tanto que me sentía como si estuviera en una mazmorra de piedra en el nivel más bajo de un castillo. Era el "fondo del barril".

Cuando estaba allí abajo, pude ver mis nociones más profundas relacionadas con la fama. Aparecían como afirmaciones; podía ver las palabras. Se materializaban frente a mí en cámara lenta. Vi aparecer unas cinco afirmaciones y pude ver claramente que cada una de ellas era falsa. Así que me quedé allí, mirándolas y pensando: "Eso no es cierto. Eso es mentira. Eso tampoco es verdad. No, eso también es mentira". Todas estas nociones eran parte de mi falso yo, y ninguna de ellas era cierta.

De repente, las palabras desaparecieron y fui consciente de la presencia del Maestro, aunque no podía verlo. Primero pensé que debía postrarme, pero luego comprendí que no era necesario inclinarse físicamente; bastaba con que mi mente estuviera llena de respeto y gratitud. Después de esto me quede dormida.

Más tarde, esa misma noche, soñé que había un lugar en mi mente en el que había una pequeña pared con forma ondulada que era de color de la piedra caliza. Una serpiente se había escondido contra la pared haciendo coincidir la forma de su cuerpo con las curvas en forma de S y haciendo coincidir su piel con el color de la pared. Cuando ese lugar estaba en la sombra, nadie podía ver a la serpiente. Pero en mi sueño, la luz inundó de repente ese lugar, y la serpiente se vio obligada a salir porque estaba expuesta y ya no podía esconderse allí.

Cuando me desperté, podía recordar el sueño, pero no podía recordar las palabras en cámara lenta. Entiendo que este "olvido" se produce cuando una parte de mí se ha cultivado completamente y se separa.

Un apego fundamental

Creo que la fama fue un apego fundamental para mí. Al crecer en un pueblo comarcal con poca población, una puede sentirse un poco famosa con bastante facilidad. Mi padre era abogado, mi apellido era único y tenía tres hermanos, así que me reconocían a menudo. La gente decía: "Oh, tu padre es ese abogado" o "Oh, eres la hermana de fulano".

Así que había algunas nociones de fama adquiridas postnatalmente. Pero también creo que probablemente llegué a esta vida con un apego preexistente a la fama. En uno de mis primeros recuerdos de niña, me subí a la cómoda de mi madre para poder mirarme en su espejo de tres hojas. Era divertido porque podía conseguir que mi cara se repitiera muchas veces hasta donde yo podía ver. Pero también recuerdo que pensaba que mi cara era simétrica y que me serviría para mis propósitos. ¡Qué cosa tan extraña para una niña pequeña!

Recuerdo que, en uno de mis boletines de notas, un profesor de primaria escribió algo así como: "Fulana [yo] cree que es especial y que debe ser tratada de forma diferente a los demás niños". Es cierto: siempre he tenido esa idea oculta de que soy de alguna manera especial y he anhelado esa sensación que tengo cuando me tratan como alguien especial. Pero también he sentido preocupación y escepticismo cuando alguien me trata como si fuera especial. Creo que tanto mi falso yo como mi verdadero yo han reaccionado a esa experiencia, con mi falso yo abrazándola y anhelándola, y mi verdadero yo tratando de advertirme de su peligro.

Además, tengo un hábito crónico de soñar despierta desde la primera infancia. La mayoría de las ensoñaciones consisten en que me entrevisten en la televisión porque soy famosa.

El Maestro dijo que cada uno de nosotros podríamos haber sido los multimillonarios y la élite de este mundo. En el fondo, cada vez que leía este fragmento del Fa, sentía que se refería a mí y que estaba destinada a ser famosa. Pero me alegro enormemente de que no haya sucedido, porque sé sin duda alguna que no lo habría manejado bien y habría perdido de (virtud) e incurrido en grandes cantidades de karma.

Entiendo que el sueño de la serpiente que se va significa, con suerte, que ahora he roto en gran medida el apego a la fama y el Maestro ha eliminado la criatura que estaba alineada con ese apego. No he notado ningún cambio significativo en mi ser superficial en la dimensión humana, pero entiendo que ha habido grandes cambios en los reinos microscópicos.

Este es mi entendimiento en mi limitado nivel.

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