(Minghui.org) El reciente brote del virus del Partido Comunista Chino (Covid-19) en Taiwán ha puesto a muchos en pánico, y los informes negativos de los medios de comunicación solo han empeorado las cosas. La gente que esperaba vacunarse tiene ahora miedo de los efectos secundarios, y todo el mundo espera que se pueda encontrar un remedio para no contraer el virus. Comprendí que esta era una oportunidad que el Maestro había creado para aclarar la verdad.
Los practicantes de Falun Dafa de Taiwán distribuyen información especial que aclara la verdad en el centro de vacunación y le dicen a la gente que recite"Falun Dafa es bueno, la Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" para no contraer el virus.
Quiero animar a todo el mundo a compartir sus experiencias compartiendo brevemente mis experiencias con los compañeros practicantes cuando aclaramos la verdad en el centro de vacunación.
Las personas mayores se vacunan
El último día para que los mayores de 85 años se vacunaran, estuve en el centro de vacunación a las 8 a. m. Vi que algunos de los mayores ya se habían vacunado y estaban descansando en la sala de observación. Como eran mayores de 85 años, todos estaban acompañados por familiares más jóvenes.
Esto nos permitió aclarar la verdad a más de una generación. En primer lugar, pregunté a los jóvenes si les preocupaba que sus padres sufrieran los efectos secundarios de la vacunación. Casi todos dijeron que estaban un poco preocupados. Les dije: "Les voy a contar de un remedio milagroso". A continuación, abrí el informe de la edición especial y les dije que recitaran con su familia "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". No solo beneficiarían a su familia, sino también a ellos mismos. También les pedí amablemente que leyeran el informe de la edición especial en detalle cuando llegaran a casa y que lo compartieran con sus amigos cuando terminaran de leerlo. Casi todos aceptaron el informe y un recuerdo de flor de loto de origami.
Una señora llegó en un taxi con sus padres, que tenían más de 90 años. Les ayudé a salir del taxi y la señora me dio las gracias. Después de ser vacunados, les di el informe de la edición especial y un recuerdo de flor de loto. Cuando abrió el informe y empezó a leerlo, la señora me preguntó si practicaba Falun Dafa. Le contesté que sí, y ella me dijo: "Realmente apoyo a Falun Dafa. Hace dos años, cuando pasé por el edificio 101, vi a esos "patriotas" chinos acosando a los practicantes de Falun Dafa. Les dije: 'Los practicantes de Falun Dafa solo están allí de pie y no les han provocado. ¿Por qué los acosan?". Me dijo que estaba muy contenta de poder volver a encontrarse con un practicante. En ese momento llegó el taxi y ayudé a sus padres a subir.
La mayoría de los ancianos no tenían mucha movilidad, por lo que necesitaban ayuda para entrar y salir de los vehículos. Los que tenían entre 82 y 84 años podían salir solos, pero muchos de ellos utilizaban bastones. Después de vacunarles, tenían que salir por la puerta trasera, así que los practicantes nos quedamos en la puerta trasera y aclaramos la verdad.
Al poco tiempo, habíamos repartido todos los recuerdos de la flor de loto. Algunas de las personas que acompañaban a los ancianos estaban preocupadas por los efectos secundarios de la vacunación, así que les dije que recitar "Falun Dafa es bueno, la Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" podía ayudar. Incluso abrí el informe de la edición especial y señalé casos de personas que mejoraron recitando las frases. Asintieron y nos dieron las gracias.
Un remedio sin inyecciones
Las personas que acababan de vacunarse tenían que esperar entre 15 y 30 minutos en la sala de observación antes de poder salir. Le dije a un hombre que esperaba a su familia que la razón por la que estábamos allí era para decirle a la gente cómo evitar contraer el virus. No se necesitaban inyecciones ni medicamentos, y no había efectos secundarios. Solo tenía que repetir dos frases. Abrí el informe y mostré algunas de las historias sobre la repetición de las dos frases. El hombre seguía asintiendo con la cabeza. Le dije que si cada uno de nosotros podía protegerse bien a sí mismo, ¿no protegería eso también a la gente que nos rodea? Estuvo de acuerdo.
Los mayores de 75 años que vinieron a vacunarse eran en su mayoría parejas o iban acompañados de sus nietos. Para este grupo, nos pusimos a la salida para distribuir las flores de loto y los informes y desearles paz y seguridad. Una señora aceptó una flor de loto, la puso en sus palmas y murmuró mientras se alejaba: "Qué bonito, qué bonito". Lo hizo durante todo el camino hasta el estacionamiento. Después de ver las palabras Verdad-Benevolencia-Tolerancia, algunos dijeron: "Oh, esto es Falun Gong". Respondí: "Sí, estamos aquí para desear a todos paz y seguridad".
En ese momento, una señora se detuvo frente a mí. Jadeando, me dijo que se había acercado, que tenía la pierna derecha lesionada y débil, y que le preocupaban los efectos secundarios. La animé a ver el lado bueno, que la energía positiva puede mejorar el sistema inmunitario. Le di un recuerdo de la flor de loto y un informe de la edición especial y le recordé que siguiera recitando las dos frases mientras la ayudaba a colgar la flor de loto en su bolso. La vi leer el reportaje después de sentarse.
Cuando una pareja salía del centro después de las vacunas, el marido se detuvo junto a la escalera diciendo que tenía dificultades para respirar. Su rostro empezó a ponerse pálido. Vi que aún podía mantenerse en pie, así que me acerqué a él y le dije: "Señor, no se asuste. Puedo contarle un remedio muy eficaz. Solo tiene que recitar conmigo". El hombre cerró los ojos y aceptó. Entonces, palabra por palabra, le ayudé a repetir las dos frases. No podía decir la palabra "Fa", así que seguí recitando "¡Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!". El hombre consiguió recuperar el aliento y bajó las escaleras. Entonces le pedí amablemente que recitara las dos frases él solo. En apenas dos minutos, el color volvió a su rostro. Entonces le mostré los efectos milagrosos de las dos frases en los artículos del informe de la edición especial, y lo creyó.
En realidad, el plan inicial era aclarar la verdad cerca de la oficina de declaración de impuestos del Centro de Administración de Xindian. Pero entonces vimos una multitud reunida en el Centro de Salud del Distrito de Xindian. "Hoy no hay horario de vacunación en el centro", pensé. Pero había largas colas de gente y nos enteramos de que el responsable del barrio había programado estas vacunaciones, por lo que no estaba anunciado en la página web. Agradecí a todos los responsables del barrio su dedicación al servicio del mismo, les di un recuerdo en forma de flor de loto y un ejemplar del informe de la edición especial sobre la necesidad del mundo de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y les deseé paz y seguridad. Algunos de ellos exclamaron: "¡Qué bueno es esto!". Sé que la parte de ellos que entiende la verdad estaba agradecida por el poder del Maestro y las flores de loto que fueron hechas a mano por los practicantes de Dafa.
Mi entendimiento es que aclarar la verdad en el centro de vacunación es un privilegio que el Maestro nos dio. No necesitamos ir a todas partes para buscar personas a las que aclarar la verdad. Todos van allí a vacunarse, así que solo tenemos que estar allí, mover un poco las manos y la boca para decirles la verdad, y entregarles el informe de la edición especial y una flor de loto de papel.
Todos tienen prisa por encontrar un remedio para protegerse del virus. Ahora que hay escasez de vacunas, todos están muy ansiosos por conocer los hechos. Si no aprovechamos esta oportunidad para salvarlos, cuando se levante el bloqueo debido al brote pandémico, la gente no será tan receptiva. Por lo tanto, debemos aprovechar esta oportunidad para salvar a la gente de la mejor manera posible.
Lo anterior es mi limitada comprensión a mi nivel. Si hay algo que pueda mejorar, por favor, comparta su opinión.
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Categoría: Aclarando la verdad