(Minghui.org) "El Maestro bajó del escenario y caminó hacia la primera fila. Nos pidió que cerráramos los ojos, gritáramos uno, dos, tres y pisáramos con el pie derecho. Noté que una masa negra desaparecía delante de mí. Desde ese día, me sentí muy ligera, como si mi cuerpo ya no existiera". La señora Li Fan, practicante de Falun Dafa en Australia, recuerda con afecto haber asistido a una serie de conferencias impartidas por el fundador de Falun Dafa, el señor Li Hongzhi, a las que asistió hace 27 años.

Practicantes de Falun Dafa realizaron un desfile con automóviles y una manifestación en el centro de la ciudad de Bendigo el 10 de abril de 2021. Esta foto fue tomada en la manifestación, donde la Sra. Li Fan (primera desde la derecha en la primera fila) participó en la demostración de ejercicios con otros practicantes.

Del 5 al 12 de agosto de 1994, el Sr. Li Hongzhi (fundador de Falun Dafa) dio una conferencia de ocho días y enseñó los ejercicios en el Salón de Hockey sobre Hielo que se encuentra en el Centro Deportivo de los Ocho Distritos de Harbin.

La Sra. Li Fan dijo: "Me siento tan afortunada de haber asistido a las conferencias y de que el Maestro me haya enseñado los ejercicios en persona. Me siento muy honrada. El Maestro no solo purificó nuestras almas, sino también nuestros cuerpos. Ha sido la experiencia más feliz y preciosa de mi vida".

Ella dijo que el tiempo no puede borrar ese recuerdo: "Este precioso recuerdo me anima a mantenerme firme y persistente en mi fe cuando me enfrento a la brutal persecución: ya sea yendo a la Plaza de Tiananmen para pedir justicia para Dafa y el Maestro en la etapa inicial de la persecución, o produciendo grandes cantidades de materiales aclaratorios de la verdad en mi casa, o enfrentando tribulaciones".

La señora Li dijo que en realidad empezó a practicar antes de asistir a la clase. Comentó: "Terminé de leer Zhuan Falun de corrido, y supe que Falun Dafa era lo que siempre había estado buscando. El Maestro es grandioso y esta práctica es realmente sagrada".

Después de asistir a la serie de conferencias en Harbin, iba en bicicleta a un parque para hacer los ejercicios cada mañana. No había servicio de autobús desde su casa, así que a primera hora de la mañana solo podía ir en bicicleta. Aunque el viaje duraba aproximadamente una hora, dijo: "No me sentía cansada en absoluto. Sentía como si alguien me empujara mientras andaba en bicicleta".

Cuando se enteró de que el Maestro impartiría el seminario en la ciudad de Harbin, se anotó inmediatamente.

"¡Fue realmente un sueño hecho realidad! Llegué temprano, me senté y esperé a que llegara el Maestro. De repente, un estruendoso aplauso sonó en el pabellón deportivo y todo el mundo se levantó respetuosamente para dar la bienvenida al Maestro. Vi al Maestro caminar hacia el escenario y los aplausos duraron varios minutos".

"Me senté en la octava fila, así que estaba relativamente cerca del Maestro. El clima de Harbin es bastante caluroso en agosto. Recuerdo que el Maestro llevaba una camisa blanca y noté que era bastante alto. La mirada bondadosa y compasiva del Maestro nos llenó a todos de asombro. Mi corazón estaba muy emocionado y me sentía muy afortunada. Cuando el Maestro empezó su conferencia, mis lágrimas también comenzaron a brotar incontroladamente".

La señora Li dijo que en ese momento no entendía por qué lloraba: "No lloro fácilmente. Más tarde, supe que se trataba de una reacción producida por la práctica".

El Maestro Li no leía apuntes para sus enseñanzas. Se limitaba a utilizar el lenguaje más sencillo para enseñar el Fa de alto nivel. Esto sorprendía profundamente y atraía a la gente a la práctica.

Ella dijo: "Aunque lloré, escuché en silencio. Mientras el Maestro hablaba del vasto y profundo Falun Dafa, cada frase parecía nutrir mi alma".

"El Maestro Li dijo que iba a purificar nuestros cuerpos. Nos pidió que relajáramos todo nuestro cuerpo y que pensáramos en nuestras enfermedades. Si alguien no tenía ninguna enfermedad, entonces podía pensar en una enfermedad de su familiar. El Maestro Li dijo que ayudaría a eliminar las enfermedades.

"Como había unas 5000 personas en la sala, el Maestro Li nos pidió que nos pusiéramos de pie en grupos. Luego, bajó del podio y caminó hacia el frente. Nos pidió que cerráramos los ojos, que gritáramos un, dos, tres y que pisáramos con el pie derecho, seguido del izquierdo. Pisamos con fuerza y noté que una masa negra desaparecía de repente ante mis ojos. Desde ese día, me siento muy ligera al caminar".

Ella también vio escenas extraordinarias. Dijo: "Cuando el Maestro Li estaba girando el Falun, lazos de siete colores en otra dimensión elevaron a los estudiantes allí presentes al medio del aire. Cuando habló del ojo celestial, una televisión apareció ante mis ojos y toda la sala estaba llena de pequeñas pantallas de televisión".

Dijo que justo después de asistir a la clase, experimentó personalmente algunos de los extraordinarios fenómenos que el Maestro mencionó en sus conferencias. Dijo: "Vi a Guanyin, la Diosa de la Misericordia, detrás de mí cuando iba en bicicleta al parque para practicar los ejercicios. Después de eso, empecé a tener algunas capacidades sobrenaturales que duraron un corto período de tiempo, como prever lo que iba a suceder".

Después de que el Maestro terminó su conferencia del día, los practicantes que el Maestro trajo consigo nos enseñaron los ejercicios. Mientras los asistentes aprendían los ejercicios, el Maestro Li se paseó por la sala para ver cómo lo estábamos haciendo. Dijo: "El Maestro es una persona tan amable y accesible. Su porte alto y erguido y su sonrisa compasiva se me grabaron en la mente". Los asistentes venían de toda China. Bajo el campo de energía compasivo y pacífico, pero fuerte, del Maestro Li, todos eran educados. El ambiente era muy puro y bueno".

Por último, dijo: "¡Asistir a la clase en persona fue realmente la experiencia más increíble de mi vida! El maestro Li nos dijo que no es fácil obtener el Fa, por lo que debemos cultivarnos templando nuestras mentes y cuerpos. Nos animó a avanzar con diligencia como un león en nuestro camino de cultivación.

"Todavía recuerdo estas palabras del Maestro Li y se convirtieron en la gran fuerza impulsora en mi camino de cultivación. Esto fue especialmente así cuando protesté contra la persecución. Dafa nos viene guiando a mí y a los demás practicantes en nuestro camino de cultivación, superando todo tipo de tribulaciones hasta el día de hoy. Debemos esforzarnos por hacer bien lo que tenemos que hacer".

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