(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa como una persona que estuvo postrada en cama por mucho tiempo y al borde de la muerte. Solo tres semanas después, en abril de 1997, recuperé mi salud. Mi familia estaba muy emocionada. Mi esposo les decía a todos los que se encontraba: "Falun Dafa es una práctica mágica, salvó a mi esposa moribunda".
Al oir mi historia, mis vecinos y otros aldeanos vinieron a mi casa para aprender Dafa. Por lo tanto, me convertí en una asistente, y mi casa en un sitio de práctica. Al principio, varias personas se unieron al grupo de estudio del Fa y a la práctica de los ejercicios. Más adelante, había de 20 a 30 personas en nuestro grupo y luego el número creció a 30 o 40 personas. En su apogeo, venían a mi casa de 50 a 60 personas.
Cuando fuimos demasiados para caber en una habitación, salimos al patio. Después de eso, otro practicante inició un sitio de práctica en su casa y 20 personas se fueron allí.
El efecto milagroso de Falun Dafa de curar enfermedades y mantener a la gente en forma se había extendido a nuestra pequeña aldea de menos de 100 hogares. Personas de otros pueblos y municipios también vinieron a mi casa para aprender la práctica. Algunos pacientes en estado crítico incluso vinieron y se quedaron en mi casa.
Cuando los asistentes de los sitios de práctica reproducían los videos del Seminario de Nueve Días de Shifu Li en mi casa, más de 30 personas venían a verlos. Una vez, más de 20 personas de otra aldea vinieron a buscar el Fa, llenando las habitaciones y los espacios exteriores de mi casa.
El benevolente Shifu arrojó la resplandeciente luz del Dafa universal en todo el mundo. Todos los seres conscientes recibieron la gracia salvadora y compasiva de Shifu. En solo dos años, Falun Dafa se arraigó profundamente en los corazones de nuestros ciudadanos locales. En ese entonces, estaba ocupada todos los días en la promoción de Dafa, y me sentía entusiasmada, ya que mi vida estaba llena de alegría.
Al principio de mi cultivación, siempre que no era la temporada de cosecha, Shifu me ayudaba a limpiar mi cuerpo. Debido al gran yeli (karma) que había acumulado, me acostaba en la cama y no podía levantarme durante el proceso. Mi esposo tenía que cocinar para mí y me ayudaba a levantarme para comer. Mientras aguantaba un dolor insoportable, mi esposo, que no practicaba, no podía mantener la calma y me vigilaba día y noche. También convenció a nuestros dos hijos que me vigilaran también. Mi hija, que también es practicante, le dijo a su padre: "Mamá está bien, Shifu la está ayudando a eliminar el yeli (karma)".
Cada vez que pasaba por la eliminación del yeli (karma) de enfermedad, no importaba lo doloroso que fuera, o lo mucho que tenía que sufrir, tenía una fe firme en Shifu y Dafa. Luego, después de un corto tiempo, me recuperaba. Sabía que Shifu me estaba ayudando a limpiar mi cuerpo.
Después de haberme cultivado durante un mes, Shifu abrió mi tianmu (tercer ojo) y pude ver escenas en otras dimensiones. Cuando pasaba por la eliminación del yeli (karma) de enfermedad, durante tiempos muy difíciles, sin importar si mis ojos estaban abiertos o cerrados, podía ver hermosas montañas, pájaros y flores en otra dimensión, así como muchas otras escenas mágicas y extraordinarias que están más allá de la descripción. Al ver escenas que no existían en el mundo humano, aumentó mi fe en Dafa, y me dio la fuerza de atravesar una tribulación tras otra.
Después del 20 de julio de 1999, todavía pasaba por la eliminación del yeli (karma) de enfermedad de dos a cinco veces al año. Cada vez, no podía levantarme de la cama y necesitaba que mi familia me cuidara.
En el invierno de 2002, tuve que hacer un viaje. Mientras estaba con la Sra. Jin, estalló mi yeli (karma) de enfermedad. No podía levantarme y tenía que depender de ella para cuidarme. Ella estaba muy ocupada haciendo cosas para validar el Fa todos los días. A veces, volvía a casa muy tarde. Mientras tanto, me acostaba en la cama y dormía todo el día. Cada vez que despertaba, veía innumerables Falun girando frente a mí y cayendo como copos de nieve. Viendo muchos Falun mi fe se fortaleció y pronto pude levantarme lentamente para encargarme de la cocina.
Durante esos tiempos, me quedaba atrás en el estudio del Fa. Aunque veía Falun todos los días, no me sentía muy segura en mi interior. Pensamientos como: "Voy a morir" o "No sobreviviré", interferían conmigo. Carecía de pensamientos rectos, y mi cualidad innata era pobre. Shifu no me abandonó, sino que me protegió. Un mes más tarde, me recuperé completamente, otra vez. Shifu me estaba dando una nueva vida.
Debido a asuntos familiares, mis apegos estallaron en el invierno de 2012, y me comporté como una persona común. Las viejas fuerzas se aprovecharon de eso, y volví a enfermarme. Me faltaba el aliento y terminaba durmiendo todo el día. A menudo, veía a un ser malvado flotando frente a mis ojos. Envié pensamientos rectos para eliminarlo. Huyó, pero regresó poco después. Seguí enviando pensamientos rectos.
Finalmente, la criatura desapareció, pero todavía tenía dificultad para respirar, principalmente por la noche. Hubo momentos en los que casi me quedé sin aliento. En ese momento, le pedí ayuda a Shifu: "Shifu, por favor ayuda a tu discípula, por favor ayuda a tu discípula”. Inmediatamente, pude respirar de nuevo.
Después de que pasaron 12 días, todavía estaba al borde de la muerte. Mi marido estaba muy asustado. Trató de llevarme al hospital, pero me negué. Mi hijo hizo lo mismo, pero yo insistí en que estaría bien. Cuando mi esposo me presionó de nuevo, le dije: "Estoy poniendo mi vida en las manos de Shifu". Cuando vio que estaba tan firme, dejó de presionarme. Aun así, mi esposo y mi hijo se preocupaban de que yo muriera. Un mes después, milagrosamente recuperé mi salud. Una vez más, Shifu me dio una nueva vida.
Mi hijo se divorció en la primavera de 2018. Su exesposa se llevó a nuestro nieto con ella. Esto fue un golpe duro para mi esposo, tan fuerte que a menudo desahogaba su ira contra mí. Como resultado, yo estaba sufriendo mentalmente.
Al final del año, mi esposo se enfermó y me preocupé por él. Con mi apego estallando, las viejas fuerzas se aprovecharon y desarrollé síntomas de yeli (karma) de enfermedad.
Diez días después, mi esposo estaba bien, pero yo estaba mucho peor, y siempre me faltaba el aliento. No podía acostarme y tenía que apoyarme contra la pared. Estaba de muy bajo ánimo, solo podía recitar un poco del Fa, pero seguía enviando pensamientos rectos en los cuatro horarios establecidos, y continué haciendo la meditación sentada. Perdí el apetito durante ese tiempo. El agua potable sabía tan amarga como la medicina.
Estaba muy débil. Cuando cerraba los ojos, veía a dioses de otra dimensión viniendo a comunicarse conmigo. Tan pronto como abría los ojos, me daba cuenta de que eran ilusiones arregladas por las viejas fuerzas. Un día, advertí a un dios de aspecto masculino, diciéndole: "Soy una practicante de Falun Dafa". A partir de entonces, ya no vi a esos supuestos dioses.
Dos semanas más tarde, todavía no podía acostarme. Después de suplicarle a Shifu que me ayudara, pude acostarme y descansar por cortos períodos de tiempo. Un día, después de irme a la cama, comencé a recitar sinceramente las frases "Falun Dafa es bueno. Verdad, Benevolencia, Tolerancia es bueno". Mientras lo hacía, me quedé dormida. Realmente sentí la magia de recitar sinceramente estas frases.
A partir de entonces, empecé a recitar las frases todos los días. El resultado fue particularmente bueno, ya que podía dormir y podía comer. El agua ya no sabía amarga. Para cuando me recuperé, la eliminación del yeli (karma) de enfermedad había durado seis semanas. Ninguno de los miembros de mi familia esperaba que yo sobreviviera. Los compañeros practicantes cercanos también se preocuparon por mí. Tampoco me sentí bien al respecto. Sin embargo, Shifu me salvó una vez más.
Han pasado dos años y no he tenido ningún síntoma de enfermedad. ¿Cómo caminé tan bien en mi camino de cultivación esta vez? ¿Qué clase de fuerza me liberó de la eliminación del yeli (karma) de enfermedad arreglada por las viejas fuerzas? No hace falta decir que fueron Shifu y Dafa.
Durante estos dos años, estudié el Fa cada vez que tuve tiempo. Estuve escuchando los podcasts de Minghui mientras trabajé en el campo o hice las tareas domésticas, lo que me motivó a estudiar el Fa. Mis pensamientos rectos se hicieron más fuertes y he estado totalmente absorta en el estudio del Fa. Debido a eso, el Fa de Shifu fluyó en mi vida. Cuando no pude iluminarme, el Fa me dio una pista.
Me paré frente al retrato de Shifu y respetuosamente quemé tres varillas de incienso, y me incliné tres veces para mostrar mi gratitud por la gracia salvadora de Shifu. Sabía que incluso si me inclinaba 300 veces, o incluso 30,000 veces, no podía pagar la inmensa compasión de Shifu hacia sus discípulos. También sabía que Shifu no quería nada de nosotros, solo nuestra fe en Él y Dafa.
Entonces: ¿qué es "creer verdaderamente en Shifu y Dafa?". Mi entendimiento personal es: hacer las cosas que Shifu requiere que hagamos.
En los últimos años, durante la cultivación del período de la rectificación del Fa, las cosas no siempre salieron bien. Las viejas fuerzas interfirieron conmigo cuando surgieron mis apegos. Por ejemplo, cuando tenía la intención de salir a salvar a la gente, dirigieron una escena malvada que ocurrió en un sueño. Vi escenas peligrosas, donde fui perseguida o arrestada por el mal, que tenía la intención de asustarme. Incluso después de que me desperté, todavía tenía reviviscencias. Por lo tanto, cada vez que salía a hablar con la gente acerca de Dafa, siempre pedía la ayuda de Shifu, para fortalecer mis pensamientos rectos. Debido a que Shifu estaba a mi lado para protegerme en todo momento, el día transcurría sin problemas cada vez.
A veces, cuando estaba lista para ir y repartir materiales de aclaración de la verdad, de repente sentía falta de aliento y comenzaba a toser. Simplemente ignoraba los síntomas y salía de todos modos. Cuando montaba mi bicicleta eléctrica en la carretera, el cielo se llenaba de Falun y un dragón divino me acompañaba todo el camino. Entonces, toda la ilusión del yeli (karma) de enfermedad desaparecía por completo.
Durante toda mi cultivación, el demonio de la tos no cedía y a menudo me atacaba. A través del estudio intensivo del Fa, pude ver el arreglo de las viejas fuerzas. No me tomaba en serio lo que estaba experimentando, ya que creía que los practicantes no teníamos enfermedades. Por lo tanto, todavía hacía las cosas que se suponía que debía hacer.
Por ejemplo, cada vez que tenía fiebre, tosía muy fuerte o me faltaba el aliento, estudiaba el Fa, enviaba pensamientos rectos y hacía los ejercicios, como de costumbre. Cuando otros practicantes me pidieron materiales de aclaración de la verdad, hice los folletos, como de costumbre. También trabajé en otras cosas como editar artículos.
Recordaba las palabras de Shifu, quien dijo:
“…pensamientos rectos y acciones rectas” (Exponiendo el Fa en el Festival de la Linterna, 2003).
“«Difícil de soportar, se puede soportar; difícil de hacer, se puede hacer» (Novena Lección, Zhuan Falun).
Por lo tanto, todos los síntomas del yeli (karma) de enfermedad desaparecieron y finalmente pude salir de esta larga tribulación.
Me di cuenta de las lecciones que aprendí: cuando traté de atravesar las pruebas arregladas por las viejas fuerzas, no me consideraba una practicante. Cuando no podía soportar, comenzaba a rogarle a Shifu que lo hiciera por mí. Otra causa raíz del problema fue el hecho de que carecía de verdadera fe en Shifu y Dafa. Pensando en esto, sentí arrepentimiento.
Estoy agradecida por la compasión de Shifu al guiarme hasta que finalmente lo pude atravesar debido a mi fe en Shifu y Dafa.
Debido a mi nivel limitado, por favor, señalen cualquier cosa inapropiada.
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Categoría: Mejorándose uno mismo