Joven practicante de Dafa: Afortunado de ser un practicante

(Minghui.org) Soy un joven practicante de Falun Dafa. Cuando era pequeño, creía en la cultura divina y en que el bien será recompensado y el mal recibirá su castigo. Empecé a practicar Falun Dafa después de que otro practicante me aclarara la verdad sobre Dafa. No importaba dónde estuviera, me exigía ser una buena persona y vivir según los principios de Verdad-Benevolencia Tolerancia. Me he beneficiado realmente de Dafa.

Sin cicatrices

Salí a comprar unos tomates durante mis vacaciones de verano en la universidad. Me encontré con mi hermana y cargué los tomates en mi bicicleta. Me dirigí a casa llevando a mi hermana en la parte trasera de la bicicleta.

Íbamos cuesta abajo cuando la bicicleta resbaló en la arena. Frené de golpe, la rueda se bloqueó y nos caímos.

Mi cabeza golpeó fuertemente el suelo y mi cara sufrió un corte. Inmediatamente recité: "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno, ¡no pasará nada malo!".

Me lavé la cara en cuanto llegamos a casa. Mi hermana me miró y llamó a mi madre. Me llevaron al hospital.

Tenía un gran corte en la frente y el médico quería coserlo, pero no había anestesia. Le dije: "Está bien, puede hacerlo. Puedo soportar el dolor".

Sin embargo, cuando la aguja entró y salió a través de mi piel, ¡no me dolió! El médico me dijo que también tenía un hematoma debajo del ojo derecho. Afortunadamente, no había nada malo en mi ojo. Tuve mucha suerte.

Sabía que el compasivo Maestro Li me había protegido. Lo sorprendente fue que mis heridas se curaron en poco tiempo y sin medicamentos. Mi familia se sorprendió de que me recuperara tan rápidamente y de que no quedaran cicatrices.

En realidad, no sabían que mi pecho también estaba herido. Las primeras noches después del accidente, mi pecho me dolía en cuanto me acostaba, pero recité en silencio "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Después de eso, me dormí. El dolor de pecho desapareció más tarde.

Cumplir bien mis obligaciones

Después de graduarme en la universidad, encontré un trabajo que me gustaba. Hice bien mi trabajo de acuerdo con Verdad-Benevolencia-Tolerancia y ayudé a los demás siempre que lo necesitaron.

Varias veces el dinero no estaba completo, así que usé mi propio dinero para saldar las cuentas, aunque no era mi culpa. Poco después de empezar a trabajar allí, la gente reconoció mi ética en el trabajo, personalidad, y la dirección me subió el sueldo y me dio una bonificación.

Manejando la gestión del trabajo en equipo

Más tarde me trasladé a otra empresa y pronto me ofrecieron un puesto directivo. Había mucho trabajo y mucha presión. Cuando me encontraba con conflictos, lo primero que hacía era mirar dentro de mí: ¿Era mi tono amable? ¿Presioné a alguien?

Si me equivocaba, me disculpaba. Si la dirección me elogiaba o premiaba, compartía el honor con mis compañeros. Mi equipo lo hacía cada vez mejor porque todos colaboraban para hacer bien su trabajo.

Me preocupaba por la gente que me rodeaba, y todos decían que se sentían bien cuando veían mi cara sonriente.

Todo esto se debe a que practico Falun Dafa y sigo las enseñanzas de Shifu y soy una buena persona que vive de acuerdo a Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Si no hubiera practicado Dafa y no hubiera cambiado mi temperamento, no sé cuántas cosas malas habría hecho y dónde estaría ahora.

Eliminando los apegos

Solía estar obsesionado con la comida y me gustaba probar la cocina local cada vez que viajaba. Pero en muchos casos, solía desperdiciar comida. Después de escuchar a otros practicantes contar cómo el Maestro enseñaba el Fa en China en los primeros años con respecto a no desperdiciar la comida, rompí a llorar. Ahora, cuando compro comida, me recuerdo que no debo desperdiciarla.

Las relaciones entre hombres y mujeres pueden ser bastante complejas en el mundo actual, pero sé cómo tratar adecuadamente al sexo opuesto. Presto atención a mi aspecto y me visto adecuadamente. Sabiendo cómo me comporto, mis amigos no sacan temas inapropiados delante de mí.

En el mundo materialista de hoy, es realmente difícil resistir las tentaciones que se presentan sin las enseñanzas del Maestro para mantenerse en el camino recto.

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