(Minghui.org) Con motivo de la conmemoración de los 22 años de la campaña de persecución contra los practicantes de Falun Gong, Markus Grübel, Comisionado alemán para la Libertad Religiosa y miembro del Parlamento, pidió al partido comunista chino (PCCh) que detenga de inmediato la persecución perpetrada contra Falun Gong y la discriminación y persecución de otros grupos minoritarios étnicos, religiosos y culturales.

Markus Grübel, MdB, comisionado alemán para la libertad religiosa y miembro del parlamento

Declaración de Markus Grübel exigiendo el fin inmediato de la persecución a Falun Gong.

Grübel dijo en su Declaración: “Hago un llamado al régimen chino para que detenga de inmediato la discriminación y persecución de las minorías étnicas, religiosas y culturales. Toda persona tiene derecho a practicar libremente sus creencias. Los derechos humanos son derechos individuales universales y no deben ser violados ni abusados en nombre del colectivo.

Hasta 1999, la comunidad [de Falun Gong] fue ampliamente aceptada por el régimen chino, pero luego la percibió como una amenaza y la declaró un 'enemigo del Estado'. Los practicantes y las personas que los apoyan también son víctimas de campañas de propaganda generalizadas, reeducación, encarcelamiento, trabajo forzado y tortura. Los expertos en derechos humanos de la ONU se mostraron muy alarmados por la sustracción forzada de órganos, que se realiza a las minorías religiosas y étnicas encarceladas, en particular a los practicantes de Falun Gong.

Durante décadas, las minorías étnicas y religiosas, especialmente en su mayoría uigures y kazajos musulmanes, practicantes de Falun Gong, budistas tibetanos y cristianos han sido discriminados y perseguidos. Los informes sobre violaciones de derechos humanos son alarmantes. La vigilancia sistemática, el arresto y las largas penas de prisión amenazan la existencia de minorías.

La negativa del régimen chino y la suspensión unilateral del diálogo sobre derechos humanos entre Alemania y China, que se celebraba anualmente en marzo de 2021, no está ayudando a generar confianza. Los derechos humanos tienen validez universal, independientemente de la nacionalidad y afiliación étnica o religiosa. La 'sinización' de religiones y culturas, es decir, la adaptación forzada a la ideología socialista, es una grave violación de la libertad de religión y creencias.

La Ley Religiosa [aprobada por el partido comunista chino] en enero de 2018 legalizó aún más la estricta vigilancia y persecución de las minorías. Además de los musulmanes, Falun Gong y los budistas tibetanos, esto también se aplica a las iglesias domésticas cristianas no registradas y otras comunidades. La 'Ley de Seguridad Nacional', que entró en vigor en Hong Kong en junio de 2020, ahora también amenaza los derechos humanos en Hong Kong. Según organizaciones de derechos humanos, esta ley se utiliza para atacar a los disidentes, aplastar las críticas y legitimar detenciones arbitrarias”.

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