(Minghui.org) Soy una maestra cuya familia entera practica Falun Dafa. En este artículo me gustaría centrarme en el camino de cultivación de mi hija.

El desastre muestra la fuerza de un practicante

Cuando mi hija llevaba seis meses casada y tenía tres meses de embarazo, su marido murió repentinamente. Fue una noticia devastadora. Sin embargo, presencié cómo mi hija se enfrentaba al dolor y a la tribulación más agonizante, y quedé profundamente impresionada por su fuerza.

Sus palabras y sus actos me conmovieron profundamente. Estoy muy agradecida con el Maestro, y con Falun Dafa, que transformó a mi hija en una persona tranquila, fuerte, considerada y de buen corazón. Después del funeral, mi hija llamó a sus suegros. Pensó que tenía que ser más duro para ellos, ya que habían perdido a su único hijo. Sintió que necesitaban más ánimo y consuelo. Preguntó a sus suegros: "¿Cómo están? Aunque hayan perdido a su hijo, aún me tienen a mí. Nada puede romper nuestra familia, seguiremos adelante".

Con lágrimas corriendo por mi rostro, me dolía el corazón por mi hija. Era tan joven y ya tenía que soportar tanto dolor en la vida. Me sentí segura de que la compasión que había cultivado a través de Dafa la ayudaba a superar su dolor y su pérdida.

Respetar los principios de Dafa

Muchos familiares y amigos que quieren a mi hija la visitaron, la llamaron y también le dieron muchos consejos. Algunos sugirieron: "Aún eres joven, necesitas un compañero que te apoye y cuide. Tu bebé nonato será una carga para ti en el futuro. Tienes que tomar una decisión, si estás dispuesta a abortar al bebé".

Quienes leen los libros de Falun Dafa saben que el suicidio, el asesinato y el aborto son formas de matar vidas. Es algo que un practicante de Dafa no puede hacer en absoluto. Mi hija respondió: "El bebé es mío. Le pedí a Shifu que me ayudara a quedarme con él cuando tuve síntomas de aborto. Me quedaré con mi bebé". Estaba tranquila, firme y decidida. Dijo: "No importa lo difícil que sea, no permitiré que mis suegros pierdan a nadie más. Me quedaré con el bebé".

Un día, mi hija volvió de casa de sus suegros. Me dijo que estaban escasos de dinero debido a los gastos del funeral, así que les dio los ahorros que ella y su marido recién juntaron. Tenían 90.000 yuanes (unos 14.000 dólares US). Me miró y dijo: "Soy afortunada. Tengo al Maestro, a Dafa y a mi bebé".

Me impresionó profundamente su acción. Para alguien que gana un salario mínimo por hora, le llevaría mucho tiempo ahorrar esa cantidad. Su preocupación por los demás era más importante que la complacencia por ella misma. Estoy muy orgullosa de mi hija. Solo un practicante de Falun Dafa puede hacer eso. Estoy llena de esperanza por el futuro de mi hija. Sus suegros fueron igual de atentos y cariñosos. Poco a poco le devolvieron todo el dinero a su cuenta.

La fuerza viene del Fa

Mi hija volvió al trabajo unos días después del funeral y la vida siguió su curso. Le recordamos que debía ver las cosas con pensamientos rectos y ser consciente de sus emociones. Trató a sus compañeros de trabajo como de costumbre, contuvo las lágrimas y realizó un buen trabajo con normalidad. Los demás quedaron impresionados por su fortaleza y madurez. Se enfrentó con calma a la realidad, retomó su vida con responsabilidad y lo dio todo.

Le pidió a su amiga un estimado del costo de criar a un hijo, ya que quería reunir el dinero por sí misma para cuidar de su bebé, aunque todos nos comprometimos a ayudarla. Empezó a presupuestar sus gastos, dejó de tomar taxi para ir al trabajo a pesar del mal tiempo, y ya no come en restaurantes. Se esforzaba por no llorar delante de nosotros, porque no quería que nos preocupáramos por ella. A menudo la veía sentarse frente a la foto del Maestro para liberar su dolor y buscar consuelo.

Seguía yendo y viniendo al trabajo en motocicleta. Yo estaba un poco preocupada. Pues, embarazada ya le costaba atarse los zapatos. Siguió trabajando hasta muy cerca de la fecha del parto. A menudo leíamos el Fa juntas, pero ella quería estudiar sola. Más tarde me di cuenta de que leía el Fa en voz alta y quería que su bebé se familiarizara con su voz.

Mi hija dio a luz al bebé en noviembre de 2017. Había otra mujer dando a luz en la misma zona al mismo tiempo. Tenía a su marido y a su hermana a ambos lados. Lloraba por el dolor. Mi hija caminaba alrededor de la cama, respirando profundamente, ya que era obvio que el dolor se intensificaba, y empezó a sudar. Estaba muy tranquila y fuerte. La otra mujer se preguntaba cómo es que ella tenía menos dolor. Sabía que mi hija había obtenido su fuerza y resistencia gracias a Dafa.

Todo transcurrió con normalidad y rapidez, y llegó el momento del parto. Cuando el médico le preguntó si quería anestesia para aliviar el dolor, mi hija se negó. Solo tardó una hora en dar a luz a una niña sana.

Ahora la bebé tiene cinco meses, está muy sana y es encantadora. (Por supuesto, ¡soy su abuela! Y mi comentario no es imparcial). Todos estamos muy agradecidos con Shifu por enviárnosla. [Nota del editor: Este artículo fue escrito en abril de 2018].

No podía imaginar lo que habría pasado si no nos cultiváramos en Dafa. Ante tal pérdida, con tanto dolor, ¿cómo estaríamos de deprimidos? Gracias a Shifu, gracias a Dafa, entendemos las relaciones predestinadas, las vidas humanas, las encarnaciones, etc. Fue Dafa lo que ayudó a mi hija a madurar y a ser fuerte.

Espero que más personas aprendan la verdad de Falun Dafa y vean las mentiras y la propaganda difundidas por el régimen comunista. Por las palabras y los hechos de nuestra hija, llegarán a comprender que Falun Dafa es precioso.

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