(Minghui.org) Compré dos libros, Zhuan Falun y Zhuan Falun Volumen II en un puesto de libros en Beijing en junio de 1996. En aquella época, casi todas las librerías y puestos de libros de Beijing vendían libros de Falun Dafa. Después de que empecé a practicar Falun Dafa, comprendí el significado de la vida.

Durante los últimos 25 años, he conocido a muchas personas amables que han ayudado silenciosamente a los practicantes después de que el PCCh (partido comunista chino) lanzó la persecución. Sus amables acciones les trajeron bendiciones. Me gustaría compartir con ustedes algunas historias.

El negocio de la florería mejora

Fui arrestado cinco veces y detenido en campos de trabajo forzado dos veces porque me negué a renunciar a Falun Dafa. Mi empresa me despidió. Recibía 255 yuanes de subsidio de desempleo cada mes y mi mujer 146 yuanes de subsidio de enfermedad cada mes. ¿Cómo podíamos llegar a fin de mes?

Pedí a mi empresa que me devolviera el empleo y al mismo tiempo busqué trabajo. Un practicante me ayudó a encontrar trabajo en una florería. Le aclaré la verdad al dueño y a los clientes. Dos semanas después el jefe me despidió sin dar ninguna razón. Supongo que temía que su negocio se viera afectado porque le aclaraba la verdad a los clientes.

Un practicante me dijo que me había encontrado un trabajo en otra florería. Esta tienda estaba al lado de la otra florería. El jefe Ben (alias) tenía 46 años y parecía muy amable.

Cuando le aclaré la verdad a Ben, me escuchó en silencio. Le dije: "Practico Falun Dafa para ser una buena persona. Cumplo con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. No es un crimen tener una creencia". Ben sabía que el PCCh era malvado. Me dio un salario más alto y más tarde me pagó el billete de autobús mensual.

Aclaraba la verdad a los clientes todos los días. Cuanto más aclaraba la verdad, más clientes teníamos. Entre nuestros clientes había policías, jueces, procuradores, funcionarios, militares, oficiales de seguridad, profesores y estudiantes. Procedían de todos los ámbitos de la vida. Muchos conocieron la verdad sobre Falun Dafa y trataron a los practicantes con amabilidad.

Un día aclaré la verdad a dos ancianas. Una preguntó: "Si Falun Dafa es bueno, ¿por qué los practicantes se prendieron fuego en la plaza de Tiananmen?". La otra señora dijo: "Hay muchos practicantes de Falun Dafa en nuestra zona. Todos son buenas personas. No harían esas cosas". La primera dama cambió de actitud y dijo: "Sí, todos son buenas personas. No harían esa locura".

Les dije: "El PCCh escenificó el incidente de la autoinmolación de Tiananmen para inculpar a Falun Dafa, para engañar a la gente e incitar al odio contra los practicantes. Los practicantes se cultivan y cumplen con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. El PCCh hace todo lo contrario: Engaña a la gente e incita a la lucha. El PCCh lo montó para inculpar a Falun Dafa". Después de conocer la verdad, compraron las flores y se fueron.

Un día, un policía con el logotipo de la policía judicial vino a comprar flores. Después de charlar le dije: "Usted es un policía. Por favor, no participe en ninguna actividad para perseguir a los practicantes de Falun Dafa. Nuestros antepasados creían que las buenas acciones se recompensan y las malas se castigan". Escuchó mientras seleccionaba flores. Gastó 100 yuanes.

"Pensé que definitivamente le aclararías la verdad", dijo Ben. Estaba un poco nervioso. Pero el policía compró cuatro macetas con flores, gastó 100 yuanes y se fue feliz. Ben también se sintió feliz.

Un hombre de mediana edad vino a comprar macetas. Cuando le aclaré la verdad, me preguntó si sabía cuál era su trabajo. Le dije: "Usted es policía". "Sí, lo soy", dijo. "Muchos de mis compañeros practican Falun Dafa. Todos son buenas personas. Por favor, tenga cuidado porque el 16.º congreso nacional está a punto de comenzar". Le di las gracias.

Cuando entregué las flores, Ben dijo: "Este hombre es rico. Por favor, aclárale la verdad".

Aclaré la verdad a los amigos de Ben, muchos eran funcionarios del gobierno o propietarios de empresas. Le preguntaron a Ben si se preocupaba por su negocio porque yo le aclaraba la verdad a la gente. Ben dijo: "Los practicantes de Falun Dafa tienen que ganarse la vida. Lo que ha dicho es la verdad".

Ben me dijo: "Que esta tienda sea tu lugar de aclaración de la verdad". Me sentí muy feliz por él. En realidad, su negocio no se vio afectado. Más bien creció. Fue bendecido por Dafa. Ben, su esposa y los otros dos empleados estaban muy ocupados cada día. Ganaban cientos e incluso miles de yuanes al día.

Trataba a cada cliente con sinceridad esperando que todos ellos conocieran la verdad. Muchos de ellos volvían repetidamente. Algunos gritaban "Falun Dafa es bueno" cuando me veían.

Ben se dio cuenta de que los practicantes de Falun Dafa son dignos de confianza, y cuando dejé mi trabajo un año después, me pidió que encontrara un practicante de Falun Dafa para sustituirme.

Amable mujer policía

Un día me encontré con Wen, una mujer policía en mi zona residencial. Me dijo: "¿Sabías que se ha publicado el nuevo artículo del Maestro?". Le dije que no lo sabía. Ella me recordó que tuviera cuidado. Ese día recibí el nuevo artículo del Maestro.

Vivíamos en la misma zona residencial. Mi vecina era pariente suya. No sabía que era policía porque nunca llevaba el uniforme en casa. La conocí en el centro de rehabilitación de drogas de la ciudad.

Me arrestaron el 2 de octubre de 2000. La policía tenía miedo de que yo fuera a la oficina de peticiones de Beijing para pedir justicia para Falun Dafa y de que los despidieran de sus puestos. Me arrestaron para no tener que preocuparse. El comité de asuntos políticos y legales local y el departamento de policía crearon el "centro de transformación forzada de la ciudad" dentro del centro de rehabilitación de drogas. Cientos de practicantes que fueron a Beijing para peticionar a favor de Falun Dafa fueron detenidos en el edificio. La policía utilizó medios blandos y duros para transformarlos por la fuerza e intentó obligarlos a renunciar a su creencia.

A mí me detuvieron en el tercer piso. Wen y otro jefe de equipo dirigían esa planta. Como castigo, teníamos que sentarnos en pequeños taburetes durante más de diez horas cada día. Nos lavaron el cerebro haciéndonos ver vídeos que calumniaban a Falun Dafa. Wen y el otro policía parecían serios todos los días, pero no eran maliciosos. Mi suegra y mi esposa vinieron a verme y trajeron una bolsa de comida. Les di la comida a los otros practicantes y dos racimos de uvas a las dos policías.

Cuando Wen y la otra agente de policía estaban de servicio, les dijo a los practicantes que se relajaran. Cuando sonó la campana y llegaron los otros policías, ella gritó: "¡Siéntense derechos!". Los policías que sabían la verdad se esforzaban por ayudar a los practicantes.

Wen me dijo que vivía en mi zona residencial y que uno de sus familiares vivía en mi edificio. Le dije: "Por favor, asegúrate de tratar a los practicantes con amabilidad. Son buenas personas. Es un crimen perseguir a la gente buena".

Un día, Wen pidió a varios practicantes que fueran a la cocina a preparar conservas de verduras. Les dijo: "Les pedí que vinieran a relajarse. ¿Transformación para qué? ¿Verdad?". Me reí y le aclaré la verdad. Dijo: "Mis padres me enseñaron a ser una buena persona cuando era niña. Aunque no practico Falun Dafa, trato de ser una buena persona de acuerdo con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Cuando el PCCh comenzó a perseguir a Falun Dafa, pensamos que era lo correcto. Después de conocerte, nos dimos cuenta de que los practicantes son todos buenas personas y que el PCCh estaba equivocado".

El jefe del equipo principal hablaba todos los días con los practicantes para persuadirlos de que abandonaran su creencia. Cuando hablaba conmigo le decía: "Los vídeos calumnian a Falun Dafa y distorsionan las enseñanzas del Maestro. Traigan aquí todos los libros del Maestro, las conferencias de audio y otros materiales de audio. Nosotros los practicantes revisaremos cada video, cada grabación de audio y cada palabra con usted para ver si nuestro Maestro dijo eso. Nuestro Maestro no dijo esas cosas. El PCCh engaña a la gente con mentiras. Este es el método que utiliza el PCCh para perseguir a la gente y lanzar campañas políticas". El líder no dijo nada y se limitó a escucharme en silencio.

Al día siguiente me dijo que estaría detenido durante 15 días. Los practicantes que no se "transformaban" eran detenidos ilegalmente, enviados a campos de trabajos forzados o condenados a prisión. A mí no me pudieron "transformar". Me llevaron al centro de detención después de estar 16 días en el centro de rehabilitación de drogas.

Durante mi detención aclaré la verdad a los reclusos. Mi suegro fue a recogerme al cuarto día. Fue al centro de detención en el coche del subdirector del destacamento de supervisión del departamento de policía de la ciudad. Yo estaba trabajando en la granja en ese momento. El jefe del destacamento me pidió que fuera a la oficina. El jefe adjunto dijo: "No puedo persuadirte de que abandones Falun Dafa. Recoge tus cosas". Me llevó a casa. Le dije que tratara a los practicantes con amabilidad porque son buenas personas.

Poco después de llegar a casa, vi a Wen en mi zona residencial. Me preguntó: "¿Parecía seria? Tengo que hacerlo en ese entorno. Cuando los practicantes son enviados, están en condiciones miserables. Algunos ni siquiera llevan zapatos. No tienen toallas, papel higiénico, pasta de dientes o cepillos de dientes. Les he comprado zapatos, camisas, toallas y papel higiénico y los ayudo".

"Nuestro director fue a Hong Kong", continuó. "Dijo que Falun Dafa es legal en Hong Kong y que nadie molesta a los practicantes. Se paran en lugares públicos, reparten abiertamente materiales y hablan a la gente sobre Dafa. Jiang Zemin [un exlíder del PCCh] es realmente malo y ordenó a la policía china que persiga a Falun Dafa y cometa crímenes". Me sentí muy feliz por su despertar.

Cuando detuvieron a un practicante local, los practicantes le pidieron que ayudara a rescatarlo. Ella fue a ver al director de la comisaría y el practicante fue liberado ese mismo día. En una ocasión prestó 2.000 yuanes a una pareja de practicantes que se vio obligada a abandonar su casa para evitar la persecución. Con su ayuda, la pareja evitó ser arrestada.

Los practicantes locales confiaban en ella. Le dejaron sus libros de Falun Dafa y sus documentos de identidad antes de ser enviados a campos de trabajo forzado. Cuando fueron liberados, ella les devolvió sus objetos.

Durante esa época brutal, más de 800 practicantes de nuestra ciudad fueron enviados a campos de trabajos forzados y casi 400 practicantes fueron condenados a prisión. Más de 100 practicantes murieron a causa de la persecución. Miles de practicantes fueron detenidos en el centro de rehabilitación de drogas, el centro de detención y el centro de lavado de cerebro.

Flores de Udumbara florecen en un instituto de investigación

Las flores de Udumbara han comenzado a florecer recientemente en muchos lugares del mundo. El Buda Shakya Muni dijo una vez que cuando la flor de Udumbara florece, significa que el Rey Sagrado de Falun está difundiendo el Fa y salvando a los seres conscientes del mundo.

Un practicante me pidió que fuera a ver las flores de Udumbara floreciendo en el instituto de investigación en el que trabajaba. Cuando llegué, escuché la música solemne de Dafa, Pu Du, dentro del edificio. Vi una fila de diez flores blancas de Udumbara floreciendo en la puerta de hierro. El practicante puso la imagen de las flores de Udumbara floreciendo en la cara de una estatua de Buda en la puerta de la sala de recepción con una explicación debajo.

En la pared de la sala de recepción había una fila de materiales y folletos de Falun Dafa. Parecía que la persecución no tenía lugar en el instituto. En realidad, el practicante fue detenido hace un año. Fue puesto en libertad sin cargos debido a sus pensamientos rectos y a su firme creencia en Dafa.

Era un alto ingeniero. Su jefe lo puso en la sala de recepción y le redujo el sueldo debido a la presión. Hizo bien su trabajo sin ninguna queja ni resentimiento y siguió aclarando la verdad a sus colegas.

Las flores de Udumbara despertaron la divinidad de la gente. Sus colegas son muy inteligentes y pueden ver a través de las mentiras del PCCh.

Este practicante cuenta a los equipos de dirección lo maravilloso que es Falun Dafa y cómo el PCCh engaña a la gente con mentiras. La esposa del director del instituto es la oficial de policía del centro de detención de la ciudad. Todos ellos se enteraron de los hechos sobre Falun Dafa. Todos sus colegas conocieron la verdad y dejaron de escuchar las mentiras del PCCh. Dejaron de cumplir las órdenes del PCCh de perseguir a los practicantes. Muchos de ellos renunciaron al PCCh.

Muchas personas ayudaron a los practicantes de Falun Dafa

Fui liberado en julio de 2005 después de dos años de detención en un campo de trabajo forzado. Un día recibí una llamada telefónica. Esa persona dijo que era el director de la oficina de traslados militares y me preguntó si quería trabajar. Me dijo que podía hablar con él si necesitaba ayuda. Me pidió que fuera al hall del edificio de la administración del distrito con mi libro de registro familiar y mi tarjeta de identificación.

Cuando llegué allí, me dijeron que cobrara mi sueldo por el periodo de mi detención ilegal. Le conté a la cajera y a las personas que estaban a su alrededor la persecución que sufrí. Me pidieron que me sentara y les contara con detalle. Se mostraron comprensivos y escucharon en silencio. La cajera me dio una tarjeta bancaria y me devolvieron mi sueldo, más de 10.000 yuanes. La cajera se enteró de la verdad y accedió a renunciar a su afiliación al PCCh y a sus organizaciones afiliadas.

Luego fui a la oficina de traslados militares y le pedí al director que me consiguiera un trabajo. Le aclaré la verdad. Cerró la puerta de su oficina y empezó a hablarme del trabajo. Le dije abierta y honestamente: "La Constitución china da a los ciudadanos libertad de creencia. Yo creo en Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Falun Dafa es legal y debe ser protegido. El régimen del PCCh manipuló a la policía para que saqueara mi casa, me arreste, me meta en un campo de trabajo forzado, me despidiera del trabajo y dejara de recibir el sueldo. Solo quiero recuperar mi trabajo. Tengo derecho a defender mi derecho a vivir". Fue muy amable y me escuchó con atención.

Le dije: "Hay dos libros muy populares entre los oficiales y soldados del ejército. Uno es los “Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista” y el otro es “El verdadero Jiang Zemin”. Cada vez más, los generales y los soldados conocieron la verdad y renunciaron al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. Por favor, lean el libro “El verdadero Jiang Zemin” y sabrán cómo causó el caos en el ejército. El libro “Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista” habla sobre cómo el PCCh persigue tanto a Falun Dafa como a los que no son practicantes".

Le dije el principio de "el bien será recompensado y el mal será castigado" y le pedí que no se convirtiera en cómplice del PCCh para perseguir a los practicantes. También le dije que sería bendecido si protegía a los practicantes y que acumularía una gran virtud. Cuando se enteró de la verdad, me dijo que viera al jefe de la sección de organización vial.

Aclaré la verdad a los empleados de la sección de organización vial. El jefe de la sección me pidió que hablara con el secretario del partido del comité de residencia local. Le aclaré la verdad a él y a los otros dos funcionarios encargados de perseguir a los practicantes. El secretario del partido dijo: "Puedes irte a casa y esperar que lleguen las noticias".

El director de la oficina de traslados militares, el jefe de la sección de organización vial, el director de la comunidad y cinco oficiales más vinieron a verme a finales de julio de 2005. Me transmitieron sus saludos y me dieron 500 yuanes. El director dijo: "En nombre del partido y del gobierno, vengo a transmitir nuestros saludos".

Yo sonreí y dije: "Director, no voy a dar las gracias ni al partido ni al gobierno. El malvado PCCh pisotea la libertad de creencia y me priva de mi derecho a vivir. No les daré las gracias. Pero les doy las gracias a todos los que me han ayudado amablemente". Estaban un poco sorprendidos.

El centro comunitario se puso en contacto conmigo para que asistiera a las clases gratuitas de informática en la primavera de 2006. Participé en la formación y me tomaron las medidas para el uniforme. Empecé a trabajar el 6 de junio. Recibí una paga de más de 4.000 yuanes en mi primera paga en julio. Me compré un ordenador y una impresora. Así se creó mi centro de producción de materiales caseros.

Mientras me perseguían por practicar Falun Dafa, hice varios trabajos, como servicio doméstico, entrega de periódicos, venta de flores, atendí un puesto callejero e hice trabajos de fuerza. Aclaraba la verdad dondequiera que estuviera. Atesoro lo que he pasado y cada momento en que otras personas me ayudaron.

Me gustaría agradecer a esas buenas personas que ayudan a los practicantes de Falun Dafa con amabilidad. Sus actos amables de hoy se convertirán en su gran virtud y bendición en el futuro.

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