Tras 17,5 años de encarcelamiento, una enferma de doble cáncer muere un año después de salir de prisión

(Minghui.org) Cuando la Sra. Zhong Junfang fue liberada el 14 de febrero de 2020, después de cumplir una condena de 8 años y medio por su fe en Falun Dafa, había perdido la mitad de su peso corporal y desarrolló cáncer de hígado y de mama. Después de batallar con su mala salud durante un año, falleció el 13 de abril de 2021. Tenía 68 años.

La muerte de Zhong se suma a la creciente lista de practicantes de Falun Dafa, una antigua disciplina espiritual de ejercicios y meditación, que han perdido la vida a causa de la persecución perpetrada por el régimen totalitario comunista chino en contra la fe de estas pacíficas personas.

Por defender su fe, la Sra. Zhong, del condado de Qianwei, provincia de Sichuan, fue condenada a una pena de trabajos forzados y a tres penas de prisión, por un total de 17,5 años.

Dos años de prisión en el campo de trabajos forzados de Nanmusi

La Sra. Zhong fue detenida por primera vez en 2000 y condenada a dos años de trabajos forzados. Durante la detención, fue sometida a torturas físicas y humillaciones, y privada de sueño durante largos periodos de tiempo.

Los practicantes de Falun Dafa en el campo de trabajo debían pedir permiso para hacer cualquier cosa. En una ocasión, la Sra. Zhong se acercó a un guardia para pedirle permiso para ir al baño, y su petición fue rechazada. Se levantó y trató de ir de todos modos. Los guardias Dai y Meng Yaling la acusaron falsamente de intentar escapar. Entonces la arrastraron a una zona abierta y la obligaron a correr, lo que provocó que se orinara en los pantalones y se burlaran de ella.

Luego la pusieron en régimen de aislamiento durante más de diez días. Mientras estuvo en aislamiento, no le permitieron salir al exterior, y cada comida era de un solo plato compuesto por 50 g de carbohidratos.

Dos condenas de 3,5 años de prisión

La Sra. Zhong fue detenida de nuevo en febrero de 2003, y posteriormente condenada a 3,5 años de prisión. Estuvo recluida en la prisión de mujeres de Chengdu hasta agosto de 2006.

Después de liberarla, le intervinieron el teléfono. La detuvieron de nuevo y la acusaron de planear ir a Beijing para reclamar el derecho a practicar Falun Dafa. La condenaron de nuevo a 3,5 años de prisión y la recluyeron en el pabellón Nro. 2 de la cárcel de mujeres de Chengdu.

Como se negó a renunciar a su creencia en Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, los guardias y las reclusas a menudo la acosaban. Por ejemplo, los guardias le prohibieron comprar comida con su propia tarjeta monetaria en la prisión, haciendo que sufriera de hambre. También tenía menos libertad de movimiento que las demás reclusas.

Después del terremoto de Wenchuan —el gran sismo que se produjo en la provincia de Sichun el 12 de mayo de 2008— hubo un simulacro de terremoto en la prisión. La Sra. Zhong se negó a portar el uniforme de la prisión en protesta por su detención ilegal. Los guardias le quitaron toda la ropa, excepto el sujetador y la ropa interior. La Sra. Zhong siguió negándose a llevar el uniforme de la prisión. Para participar en el simulacro, se cubrió con una sábana, y siguió haciéndolo hasta noviembre de 2008. Durante ese tiempo, los guardias instigaron a las reclusas a insultarla para presionarla a que usara el uniforme de la prisión.

La Sra. Zhong fue atormentada por las reclusas cuando realizaba los ejercicios de Falun Dafa (generalmente las reclusas recibían recompensas o incentivos para vigilar y torturar a los practicantes). La reclusa Zhang Zhongyi la golpeó fuertemente al sorprenderla haciendo los ejercicios en la celda. La Sra. Zhong tenía todo el cuerpo magullado por los golpes.

En una ocasión, un guardia la descubrió haciendo los ejercicios después de medianoche. La Sra. Zhong fue arrastrada hasta la oficina de los guardias, esposada y colgada de los barrotes de la ventana, donde quedó expuesta a las gélidas temperaturas de la noche de invierno. Al día siguiente la trasladaron al pasillo y la esposaron a las barandillas del segundo piso.

Ilustración de la tortura: Colgado

La Sra. Zhong inició una huelga de hambre para protestar por la inhumana persecución. La trasladaron a la clínica de la prisión y la sometieron a una alimentación forzada. Su estado llegó a ser tan grave que tuvieron que internarla en el hospital de la prisión hasta que le dieron el alta.

Aun así, escribió cartas a los guardias y funcionarios de la prisión para aclarar la verdad sobre Falun Dafa y denunciar la persecución. Más tarde, los guardias le ordenaron a las reclusas y a otras personas que no le dieran bolígrafos ni papel.

Condenada a 8,5 años de prisión

Su última detención fue el 10 de agosto de 2011. Hacía poco tiempo que había vendido su apartamento, y la policía confiscó los más de 100,000 yuanes de la venta, que nunca le devolvieron.

Fue condenada a 8,5 años el 22 de abril de 2012. Las reclusas de la prisión de mujeres de Chengdu fueron inducidas por los guardias a golpearla, a ponerle drogas desconocidas en la comida y a quitarle el edredón en invierno para congelarla. También la alimentaron a la fuerza cuando hizo una huelga de hambre para protestar por la persecución.

Como resultado de la tortura, desarrolló hipertensión y tuvo una hemorragia nasal crónica. Sin embargo, las autoridades penitenciarias se negaron a darle la libertad condicional por motivos médicos, diciendo: "Todavía respira, así que no podemos liberarla sin más".

Cuando se cumplió la última condena, pesaba menos de 18 kilos. La policía la llevó a un centro de ancianos abandonado en la zona suburbana sin avisarle a su familia. Cuando su familia fue a la comisaría a buscarla, la policía negó tener conocimiento de su ubicación. Solo con las insistentes preguntas de su familia, la policía reveló finalmente que estaba en un centro de ancianos.

Su familia se dirigió al lugar para recuperarla. Como había vendido su apartamento antes de su última detención, la señora Zhong se quedó con su sobrina. Poco después, la oficina 610 obligó a su hermano a vender la casa en la que vivían su hija y la señora Zhong.

Después que la Sra. Zhong alquiló un lugar para vivir sola, la policía local siguió vigilándola y le ordenó que no saliera de la región.

Para empeorar las cosas, su pensión mensual de 3.000 yuanes se redujo a 600 yuanes. Cuando trató de buscar justicia en varios organismos gubernamentales, estos la denunciaban a la policía, y la mantenían esposada durante horas cada vez, siendo la más larga de 33 horas.

La policía saqueó su casa el 25 de diciembre de 2020 y confiscó sus libros de Falun Dafa y otras pertenencias. Tanto la Sra. Zhong como su sobrina, la Sra. Huang Fangqing, fueron detenidas durante unas horas.

La redada en el domicilio afectó aún más a la Sra. Zhong y agravó su estado. Falleció cuatro meses después, el 13 de abril de 2021.

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