Mis experiencias de eliminar anuncios difamatorios mediante la aclaración de la verdad

(Minghui.org) Al leer el artículo “Eliminación de anuncios difamatorios después de la aclaración de la verdad”, recordé dos incidentes que había encontrado en el pasado similares a los que describió el autor. El autor escribió cartas al personal de su comunidad local y les instó a eliminar los contenidos difamatorios de los tablones de anuncios, que fueron retirados poco después.

Estoy de acuerdo con el autor en que cuando las personas publican información que difama a Falun Dafa, es porque han sido engañadas por la propaganda de odio del partido comunista chino (PCCh). Una vez que los ayudemos a entender la ilegalidad de la persecución de Falun Dafa por parte del PCCh, la gente dejará de difamar a Falun Dafa.

Tableros de anuncios de la comunidad

El primer incidente ocurrió en una gran ciudad. Debido a la supresión de Falun Dafa, perdí mi trabajo y me mudé a la gran ciudad. Un día, vi carteles que difamaban a Falun Dafa en tablones de anuncios comunitarios cerrados. Aún con el temor de una mayor persecución, los miembros de mi familia y yo inicialmente solo enviamos información sobre los carteles a Minghui.org. Los carteles estaban en los tablones de anuncios cerrados con llave y había cámaras de vigilancia cercanas, así que no sabía qué hacer. Compré algunos carteles más grandes y los usé para cubrir los tablones de anuncios, pero mis carteles pronto se quitaron.

Al leer más lecciones de Falun Dafa, me di cuenta de que me había mudado a la gran ciudad probablemente debido a mi relación predestinada con la gente de allí. Así que mi misión es decirle a la gente qué es Falun Dafa y por qué la persecución no debió haber ocurrido en primer lugar. Me di cuenta de que una vez que la gente tuviera claro lo que había sucedido, sabría qué hacer. Como resultado, cuando volvieran a aparecer esos carteles difamatorios, le proporcionaría información detallada e información de contacto a Minghui, para que los practicantes fuera de China pudieran ayudar a llamar a los represores que colocaron los carteles. Mientras tanto, también enviaría cartas al personal responsable contándoles los hechos.

Envié cartas a algunos miembros del personal de la comunidad varias veces. Cada vez, eliminaban los carteles difamatorios en poco tiempo, y cada vez había menos carteles de ese tipo. Además, también trabajé con mi familia para distribuir materiales en mi región. Continuamos con esto durante mucho tiempo hasta que nos fuimos de allí hace unos años. En ese momento, ya casi no veíamos carteles difamatorios. Esto es importante porque esta ciudad es un destino turístico. Cada verano, hay turistas de toda China y casi todos los hoteles familiares de mi comunidad están llenos.

Póster en una escuela

Otro incidente ocurrió a principios de septiembre del año pasado. Al pasar por una escuela primaria, vi un cartel en el tablero de anuncios que difamaba a Falun Dafa. También tenía la imagen del Maestro Li, el fundador de Falun Dafa. Me sentí muy mal porque la escuela acababa de comenzar, y muchos estudiantes y padres podrían envenenarse de esta manera.

Después de regresar a casa, encontré la dirección de correo electrónico del director de la escuela y el número de teléfono de la escuela, así como la información de contacto de algunos funcionarios clave. Aunque no estaba completo, se lo envié a Minghui de todos modos. Luego escribí una carta tanto al director como al subdirector, explicando lo mucho que un cartel así podría engañar a los estudiantes y sus padres.

Al caminar por allí de nuevo varios días después, encontré que el cartel difamatorio había sido reemplazado por otra cosa, mientras que otros carteles seguían igual. Estaba muy agradecido por la compasión de Shifu.

También hubo otras experiencias de este tipo y no las enumeraré todas aquí. Por supuesto, algunos practicantes fueron muy valientes y hablaron con personas que pusieron ese contenido difamatorio cara a cara. También hubo practicantes que solo lograron eliminar los contenidos difamatorios, pero sin ayudar a los represores a comprender por qué tales contenidos nunca debieron haberse publicado en primer lugar. Siento que tenemos que aclarar la verdad en nuestros esfuerzos por eliminar el contenido difamatorio. Solo ayudando a las personas a comprender la verdad, realmente estamos salvando a los seres conscientes.

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