Los chinos que renunciaron al PCCh están agradecidos con los practicantes de Falun Dafa

(Minghui.org) La pandemia de coronavirus que estalló a finales de 2019 se ha extendido a casi todos los rincones del mundo debido al encubrimiento y al mal manejo de la enfermedad por parte del partido comunista chino (PCCh). El descubrimiento de nuevas mutaciones más infecciosas ha planteado aún más incertidumbres y ha hecho que la gente se preocupe cada vez más por su salud y seguridad.

Los practicantes de Falun Dafa (también conocido como Falun Gong), una práctica de cultivación de cuerpo y mente basada en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, han estado trabajando duro para informar al público de cómo el PCCh ha estado utilizando las mismas tácticas en el manejo de la pandemia que en la persecución de su fe. También aconsejan a la gente que renuncie al PCCh y a sus organizaciones juveniles para evitar que se les responsabilice cuando llegue el momento en que el PCCh sea llevado ante la justicia por los crímenes que ha cometido y que afectan a personas inocentes.

Muchas personas han seguido el consejo y han renunciado al PCCh. También han agradecido a los practicantes de Falun Dafa sus esfuerzos por exponer el engaño y la brutalidad del PCCh y han aconsejado a la gente que se mantenga a salvo en medio de la pandemia diciendo "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

Exabogado de derechos humanos: Una sociedad sin ley bajo el PCCh

El exabogado de derechos humanos Huang (un seudónimo) se alegró de recibir una llamada telefónica de un practicante de Falun Dafa que vive fuera de China. Había hablado con varios practicantes de Falun Dafa en el pasado. Todos eran educados y dignos de confianza, y Huang había renunciado a las organizaciones del PCCh con su ayuda.

Hablando de los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, un libro publicado en 2004 que detalla los crímenes del PCCh, Huang dijo que no podía estar más de acuerdo con él, ya que había experimentado mucho de ello personalmente. "Como abogado, primero quería proteger mis propios derechos y luego ayudar a grupos minoritarios", explicó. "Cuando me di cuenta de que vivimos en una sociedad sin ley -por culpa del PCCh- dejé mi carrera de abogado. Vivir en China es muy frustrante".

En 1987, debido a que su padre había sido perseguido injustamente por ser de derecha, Huang apeló por su padre cuando tenía 23 años. En lugar de abordar el asunto, el PCCh lo detuvo durante 70 días.

Tras recibirse de licenciado en administración, Huang estudió derecho por su cuenta y obtuvo una licencia legal. Pensaba aplicar sus conocimientos y habilidades para ayudar a los grupos minoritarios en materia de derechos humanos, pero el PCCh fue demasiado implacable. Como se describe en los Nueve Comentarios, el PCCh explota económicamente a su pueblo y elimina a los que tienen opiniones diferentes.

"Dado que esta no es una sociedad de derecho, la protección de los derechos humanos basada en las leyes no tiene sentido", añadió. "Pero creo que el PCCh se acabará cuando más gente reconozca lo malo que es".

Artista: Amo a China pero no al PCCh

Después de que un practicante hablara con un artista de China a través de una red social y le explicara que más de 370 millones de personas habían renunciado las organizaciones del PCCh, incluidas la liga de la juventud y los jóvenes pioneros, el artista, que es pintor, dijo que estaría encantado de hacer lo mismo.

Además, aclaró que ama a China, pero no al PCCh, porque en lugar de servir al pueblo como dice, el régimen ha engañado a la gente durante décadas y es responsable de que 1.400 millones de personas vivan ahora en la miseria. "Todo lo que dice el partido es mentira: no se puede confiar en él", añadió.

Hermano mayor ayuda a su hermano menor a renunciar al PCCh

Un hombre del sur de China que habló con un practicante se alegró de oír hablar acerca de renunciar al PCCh para tener un futuro mejor. "Estoy totalmente de acuerdo", dijo, "pero realmente no me he unido a ninguna organización del PCCh".

El practicante se alegró por él y le recordó que debía tener presente que "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". El hombre estuvo de acuerdo. Luego dijo que su hermano menor se había unido a los jóvenes pioneros y preguntó si el practicante podía ayudarle a renunciar.

"Tenemos que asegurarnos de que esté de acuerdo o no funcionará", explicó el practicante. "No hay problema", respondió el hombre: "Mi hermano y yo hemos discutido cosas como esta antes, además siempre me escucha. Puedo garantizarlo".

Después de que el practicante ayudara al hermano del hombre a renunciar a su membresía en los jóvenes pioneros, el hombre accedió a contarle a su hermano la importancia de recordar que "Falun Dafa es bueno" y "Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Agradeció repetidamente al practicante por la ayuda.

Cristiano: "Renuncié hace diez años"

Un cristiano que contestó al teléfono dijo que sabía sobre renunciar al PCCh. "Renuncie hace diez años", dijo. "He conocido a practicantes y todos son buenas personas. Todos tenemos claro que el PCCh es perverso".

El hombre dijo que su madre también era cristiana, y que ambos eran víctimas de la persecución religiosa del PCCh. En los últimos diez años, han trabajado duro para defender sus derechos, y han sido detenidos muchas veces. "Mucha gente sabe ahora que el PCCh es malo", continuó. "No durará mucho porque la justicia prevalecerá. Eso es seguro".

Petición: "¡Falun Dafa es bueno!"

Un hombre del noreste de China se alegró de hablar con un practicante. "Por defender mis derechos humanos, el partido me metió en la cárcel durante ocho años. Allí conocí a algunos practicantes de Falun Dafa", dijo. "Son buenas personas y me ayudaron a renunciar al PCCh. Muchas gracias".

El hombre dijo que su fábrica fue demolida por el PCCh. Sin embargo, después de que fuera a apelar y defender sus derechos, le confiscaron incluso su casa. Así fue como acabó en la cárcel. Dijo que los practicantes de Falun Dafa eran geniales por levantarse contra el régimen totalitario.

Todo el mundo tiene derecho a conocer la verdad

Debido a la censura del PCCh y al cortafuegos de Internet, la comunicación a través de las redes sociales se ha convertido en una forma popular para que los practicantes de fuera de China interactúen con la gente de dentro.

Una persona que renunció al PCCh dijo que pudo eludir el bloqueo de Internet y leer la versión en inglés del Epoch Times y ver NTD todos los días. "Los admiro porque lo que hacen es muy importante para China y para el pueblo chino", explicó. "En el pasado, no creía que fueran a durar porque el PCCh es muy poderoso. Ahora puedo ver el poder de la fe".

Estuvo de acuerdo en que la gente debe seguir su conciencia en todo lo que haga, y que los practicantes de Falun Dafa han sacrificado mucho, no solo por ellos mismos, sino por toda China. "No soy practicante, pero creo que son realmente notables", añadió.

A partir de esto, pudo ver el lado bueno de la humanidad. "Todo el mundo tiene derecho a conocer la verdad. Debemos agradecer a los practicantes de Falun Dafa que muestran a la sociedad un camino que vale la pena", dijo.