(Minghui.org) Antes de empezar a practicar Falun Dafa en 1998, tuve una grave enfermedad estomacal. Para poder pagar el tratamiento, mi esposo trabajaba de sol a sol para llegar a fin de mes. Sin embargo, seguíamos teniendo muchas deudas. Mi familia estaba envuelta en una nube de miseria. Por si fuera poco, yo estaba agotada por un antiguo pleito con mi suegro.

Quería pedirle dinero prestado, pero no me atrevía a pedirlo. Era testarudo y tenía mal carácter. Y yo era competitiva. Mi suegro nunca me ayudó a cuidar de nuestro hijo. Aunque me sentía agraviada, me esforzaba por ser respetuosa. A menudo le ayudaba en las tareas del campo, a lavar y a cocinar. A pesar de ello, a menudo me criticaba, diciendo que no era buena en nada.

En 1996, fui al hospital para que me hicieran un legrado uterino y me recuperé en casa. Cuando llevé a nuestro hijo pequeño a jugar a las cartas con los vecinos, mi suegro llegó a casa y empezó a criticarme delante de ellos. Me preguntó con severidad por qué no estaba trabajando en el campo. Mi esposo también se acercó para provocar problemas, como si echara más leña al fuego. Le expliqué pacientemente que me estaba recuperando y que no podía hacer trabajos manuales.

Me sentí triste y derramé lágrimas de queja. Mis padres vivían lejos, así que no había nadie que escuchara mis quejas.

Mi suegro también tenía mal carácter y una vez nos pegó a mi esposo y a mí. Después de todos estos incidentes, mis quejas contra él se habían agravado.

La alegría después de encontrar Dafa

En el invierno de 1998, tuve la suerte de conocer Falun Dafa. Recuerdo que cuando estaba leyendo Zhuan Falun, sostuve el libro atesorado en mis manos, miré la foto del Shifu Li Hongzhi (fundador de Dafa) y dije sinceramente: "Shifu, quiero ser su verdadera discípula".

Cuando llegué a casa, continué estudiando el Fa durante media hora. Luego sentí sueño y me acosté. Cuando me desperté al día siguiente, me sentí renovada, enérgica y extremadamente cómoda. Nunca había experimentado este tipo de sensación. Desde entonces, el insomnio que me había atormentado durante muchos años desapareció por completo.

A partir de entonces, iba a casa de una practicante para participar en el estudio del Fa grupal y hacer los ejercicios. A la hora de comer, la practicante cocinaba arroz y repollo salteado. Como tenía problemas de estómago y no podía comer alimentos secos, le expresé mi preocupación. Ella me animó y me dijo: "No pasa nada. Shifu dijo: 'Decimos que lo bueno o lo malo surgen de un pensamiento de la persona'. (Cuarta Lección, Zhuan Falun) Puedes comerlo. Confía en Shifu".

Después de escuchar esto, comí la comida con confianza, y realmente no pasó nada. Estaba completamente convencida de las palabras de Shifu. Al volver a casa, saqué todas mis medicinas y las tiré.

Seguí estrictamente los estándares de Dafa de Verdad-Benevolencia-Tolerancia en todo lo que hacía. Estudié el Fa todos los días y practiqué los cinco ejercicios. Fue Shifu quien purificó mi cuerpo, y tengo una nueva perspectiva de la vida. Dafa infundió mi vida con nueva vitalidad y alegría. Desde entonces, juré seguir a Shifu en el camino dorado de volver a mi "verdadero ser".

Resolviendo los conflictos y los agravios

Bajo la guía de Dafa, todo en mi familia fue bien. Con trabajo duro, pagamos rápidamente nuestras deudas.

Mi suegro y mi cuñada mayor me respetaban porque habían sido testigos de la naturaleza milagrosa y extraordinaria de Falun Dafa. Mi suegro me elogió por mis habilidades, y él y mi cuñada mayor entraron en la cultivación de Dafa.

Pero los buenos tiempos no duraron mucho. A los pocos meses, el Partido Comunista Chino (PCCh) inició la cruel persecución a Falun Dafa. Tanto mi suegro como mi cuñada mayor se asustaron y abandonaron la cultivación.

A través del estudio del Fa, aprendí el verdadero significado de la vida y me di cuenta de que mi suegro me trató como lo hizo debido a mis deudas de ye. Los conflictos estaban destinados a que yo los pagara.

Shifu dijo:

"Durante el xiulian, cuando estás lidiando específicamente con conflictos o cuando otros te tratan mal, pueden existir dos clases de situaciones: una es que posiblemente tú hayas maltratado a esa persona en tu vida anterior; sin embargo, tu corazón está muy desequilibrado: «¿Cómo me trata así?». Pues, ¿cómo trataste tú a esa persona antes? Dices que en aquel entonces no sabías y que en esta vida no importan los asuntos de ese otro periodo de vida; eso no va de ninguna manera" (Cuarta Lección, Zhuan Falun)

A lo largo de los años, mi suegro vivía con mi cuñado, pero a medida que envejecía, su salud se deterioraba. Su hábito de fumar era muy perjudicial para su salud.

A finales de mayo de 2020, tuvo que ser hospitalizado. Mi esposo y yo estábamos ocupados dirigiendo un pequeño restaurante, pero él tenía que encontrar tiempo para visitar a su padre en el hospital. Sintiendo compasión por mi esposo, preparé comidas y las llevé al hospital para mi suegro.

Otros pacientes y sus familiares en el hospital pensaban que yo era su propia hija. Cuando se enteraron de que era su nuera, envidiaron que tuviera una nuera como yo. Aunque mi suegro estaba enfermo, cada vez que venía a verlo, su estado de ánimo mejoraba enseguida.

Aunque le dieron el alta una semana después, seguí cumpliendo con mis obligaciones filiales y le llevaba la comida que le gustaba cada dos días. También le lavaba la ropa y le limpiaba el orinal. Antes no soportaba ese olor. Ahora no me importaba y realmente no olía nada. Tal vez sea porque Shifu bloqueó mi sentido del olfato.

Después de terminar mi trabajo, estudié Zhuan Falun con mi suegro. Él sabía que Dafa es bueno y que Shifu es bueno. Sin embargo, ya no quería practicar la cultivación. Al final, su salud se derrumbó. En menos de un mes, falleció en paz.

Dejar de lado las pérdidas y las ganancias

Mi suegro dijo que había ahorrado más de 5600 dólares para sus gastos funerarios. Pero tras su fallecimiento, mi cuñado lo negó. Así que mi esposo y yo tomamos la iniciativa de pagar los gastos.

Sin embargo, mi esposo seguía resentido. Encontró unas tarjetas bancarias mientras ordenaba las pertenencias de su padre y se las enseñamos a mi cuñada. Mi esposo y mi cuñado discutieron al respecto. Intenté calmar a mi esposo. Al final, la cuñada mayor dio un paso al frente para decir la verdad. Mis suegros comprendieron que era amable con los ancianos. Aunque todos se sentaron juntos a comer, seguía habiendo tensión entre los hermanos.

En el primer aniversario del fallecimiento de mi suegro, quise aprovechar ese día especial para eliminar la brecha entre los hermanos. Utilicé los principios que aprendí en Dafa para persuadir a mi esposo de que dejara de lado sus rencores. Durante la reunión, todos estaban de buen humor. Se respetaron mutuamente y se reconciliaron.

Si no hubiera practicado Falun Dafa, no habría podido mantener un corazón amable y tranquilo en este mundo, donde el dinero es supremo y los deseos materiales son desbordantes. Nunca habría sido tan amable con la gente ni habría aceptado tanto las cosas con las que me encuentro. Fueron Shifu y Dafa quienes resolvieron los muchos años de quejas de nuestra familia.

Agradezco sinceramente a Shifu y a Dafa por haber salvado a nuestra familia.

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