Creer en Falun Dafa y experimentar su poder

(Minghui.org) Encontré muchas tribulaciones después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) lanzó la persecución contra Falun Dafa en julio de 1999. Fui detenido dos veces durante un periodo de 14 años. Fui sometido a muchos tipos de torturas y casi pierdo la vida varias veces. Además, me despidieron de mi trabajo y mis padres fallecieron. Sin embargo, independientemente de las tribulaciones por las que pasé, mi creencia en Dafa nunca vaciló, porque el Maestro Li Hongzhi (el fundador de Falun Dafa) siempre está a mi lado, mostrándome el poder de Dafa dondequiera que vaya y animándome. Mi gratitud hacia Shifu va más allá de las palabras.

Un ser divino le dijo: "Apresúrate y ve a decirle..."

Tenía dos muy buenos amigos antes de practicar Dafa y sus nombres eran Zheng y Wang. Wang era un par de años más joven que yo, y su tianmu estaba abierto desde que era joven, por lo que podía ver seres divinos y cosas en otras dimensiones. Los tres creíamos en los seres divinos y en los Fo, y a menudo hablábamos de ellos.

Zheng practicó primero el budismo y recitaba a menudo las escrituras budistas. Sin embargo, poco a poco dejó de creer en él debido a las desgracias que encontró en su vida cotidiana. Pensó que su creencia en el budismo era la causa de esas desgracias. Entonces, su situación empeoró. Su lugar de trabajo quebró, así que se dedicó a los negocios, pero acabó perdiendo mucho dinero. Se peleaba a menudo con su mujer y lo pasaba mal en casa. Al final, se volvió muy odioso hacia los seres divinos y los Fo. Incluso fue a la montaña Wutai, que estaba muy lejos, y calumnió a los Fo delante de los monjes. Fue expulsado del templo. Wang y yo estábamos muy decepcionados con él y dejamos de hablarle.

Tres o cuatro años después, el 16 de julio de 1999 al mediodía, alguien llamó a mi puerta y era él. Estaba extremadamente delgado y tenía un aspecto muy poco saludable. Me dijo: "Solo necesito hablar contigo un segundo y luego me iré. No viviré mucho más". Me contó que la noche anterior estaba sentado en su sofá después de cenar y vio a un ser divino muy grande. El ser divino tenía una luz que le iluminaba y le dijo: "Ve a decirle a Zhang (a mí) que la gran tribulación está a punto de llegar". Él aceptó y entonces el ser divino desapareció. Luego vio la foto del Maestro en mi sala y se emocionó mucho: "¡Ese era el ser divino que vi!". Se bajó y se inclinó tres veces frente al Maestro, y le dijo: "Entregué el mensaje como lo prometí". Luego se levantó y se fue. Falleció unos meses después.

Mi región estaba muy tranquila y silenciosa el 16 de julio, y no tenía ni idea de lo que iba a ocurrir. Cuatro días después, comenzó la brutal persecución. Lo que ocurrió me conmovió mucho. Alguien que estaba a punto de morir validó la existencia de seres divinos. Desde entonces, mi fe en la cultivación de Dafa se hizo aún más fuerte.

Beneficiarse de recitar "Falun Dafa es bueno"

Con frecuencia me llevaban ilegalmente a centros de detención por practicar Dafa. Me negué a recitar las reglas de la prisión y a cantar las canciones del PCCh, e insistí en hacer los ejercicios de Dafa. Por ello, me torturaron muchas veces.

Una vez, me metieron en un coche de policía y me llevaron a un centro de detención. Los agentes de policía apretaron intencionadamente las esposas y las tobilleras y me cortaron la piel. Me dijeron que querían que sufriera. El color de mi piel se oscureció poco después y les pedí a los policías en el auto que los aflojaran un poco, pero me ignoraron. Luego recité en silencio “Falun Dafa es bueno; Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno” hacia las esposas y las tobilleras y les pedí que no cometieran crímenes contra los practicantes de Dafa. Después de unos cinco minutos, el poder de Dafa abrió las esposas y las tobilleras y yo estaba libre para moverme. Los oficiales de policía estaban tan conmocionados que pude ver el miedo en sus ojos.

Estudiar el Fa dentro de las celdas de la prisión fue muy difícil. Los practicantes afuera intentaron pasar a la prisión materiales de Dafa y libros electrónicos, por lo que eran muy raros y preciosos. Los practicantes dentro de la prisión se turnaron para leerlos y tuvimos que encontrar formas de esconderlos. Los guardias a menudo programaban inspecciones y registros sorpresa para tratar de encontrarlos. Hubo varias veces que los libros electrónicos desaparecieron después de las búsquedas. Luego cada vez que recité “Falun Dafa es bueno; Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno” pudimos encontrarlos.

Enviando pensamientos rectos como un solo cuerpo para desintegrar la persecución

Los guardias lanzaron los llamados "100 días para enfrentar a los más fuertes" en 2004 para tratar de "transformar" a los practicantes de Dafa. Tenían un plan para llevar a cabo esta malvada operación. Cuando comenzó, primero obligaron a los practicantes de Dafa a ir a las salas de conferencias y ver videos que difamaban a Dafa. Varios de nosotros enviamos fuertes pensamientos rectos para desintegrar la persecución. Al principio era un día muy soleado, pero de repente apareció una nube en el cielo. Luego, escuchamos muchos truenos justo encima de la prisión y todo el edificio temblaba. Todas las salas de la prisión estaban reproduciendo estos videos malvados al mismo tiempo, y todos los televisores se rompieron. Al día siguiente, estos televisores fueron reemplazados pero volvieron a romperse. Al final, nadie vio estos videos difamatorios.

Un guardia que entendió los hechos de la persecución me dijo en voz baja en 2017: “Acabo de tener una reunión y han organizado una operación contra los practicantes de Dafa. Hoy es viernes y comenzará el próximo lunes". Rápidamente difundí esta noticia a todos los practicantes de Dafa, así como a los presos que entendían los hechos de la persecución. Esperaba que todos los practicantes de una docena de salas pudieran enviar pensamientos rectos juntos para desintegrar este nuevo acoso.

El lunes por la mañana volvió a ocurrir un milagro. El poste de acero de la bandera del PCCh, situado justo fuera del edificio de la policía de la prisión, se desprendió de la base y el poste, de unos tres pisos de altura, cayó sobre el césped. Al mediodía los guardias de la prisión tuvieron otra reunión de emergencia y la operación se suspendió.

Retribución a las personas que participaron en la persecución

Nueve guardias decidieron "transformarme" y torturarme en diciembre de 2003. Su líder era Lu, el subdirector de la Sección de Educación de la prisión. Tenía unos 30 años. Me llevó a su oficina y dijo con crueldad: "Hoy tienes dos opciones: Una es escribir las tres declaraciones. La segunda es morir. Puedes saltar desde el cuarto piso o te mataremos a golpes. Hemos preparado una habitación para ti". Le dije con firmeza: "No escribiré las tres declaraciones y no saltaré del edificio". También le advertí con rectitud que aquellos que persiguen a los practicantes de Dafa recibirían retribuciones por sus acciones. Él se burló: "No creo en seres divinos ni en retribuciones. Déjame hacer una apuesta contigo. Te golpearé con fuerza. Dentro de tres años, si no muero, te volveré a golpear". No tenemos miedo de golpear a los practicantes hasta la muerte".

Durante esa brutal sesión de tortura, me fracturaron las costillas de ambos lados. La autoridad penitenciaria no hizo nada al respecto y no quiso darme ningún tratamiento. Le pedí ayuda a Shifu y volvieron a crecer por sí solas.

Después de un tiempo, un día durante la cena, Lu se acercó de repente y me dijo: "¿Te sientes mejor ahora?". Le contesté: "Estoy muy bien". No dijo nada más y se dio la vuelta y se fue. Después de la cena, volví a la celda y me senté, y oí el sonido de la ambulancia fuera. Más tarde, me enteré de que Lu había muerto en ese momento mientras estaba sentado en la silla de su despacho. Pasó aproximadamente una hora desde que hablamos de su muerte. Solo entonces recordé que tenía la apuesta de los tres años conmigo. Habían pasado 2 años y 10 meses desde la apuesta.

El beneficio de tratar bondadosamente a los practicantes de Dafa

Durante la operación denominada “100 días para enfrentar a los más fuertes” en 2004, la prisión envió a cuatro presos para intentar “transformarme”. Su líder era un tipo alto y parecía que todos los presos seguían sus órdenes. Me dijo: "Los guardias tuvieron una reunión con nosotros y nos asignaron a cuatro de nosotros para "transformarte". Deberías saber lo que eso significa. Quiero que me cuentes qué es Falun Dafa y ver si puedes convencerme".

No le tenía miedo en absoluto. Le dije: “Falun Dafa es una práctica de la escuela de Buda con una gran virtud. Los practicantes de Dafa tratan de convertirse en buenas personas siguiendo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Cuando era joven, tuve graves enfermedades y todas se curaron después de practicar Dafa. Mi temperamento solía ser muy malo y ahora trato a los demás con amabilidad". De repente me detuvo y dijo: "¿Crees en divinidades y fantasmas?". Le contesté: “Sí, al cien por ciento. Falun Dafa no es una práctica normal de qigong. Es una práctica que lleva a los cultivadores hacia la iluminación". Dijo que era el director de una aldea antes de ser arrestado y que todos los aldeanos locales creían en seres divinos. Incluso tenía un Buda tatuado en la espalda. Tuvimos una muy buena charla y, al final, dijo: "Hermano, haré todo lo posible para ayudarte".

Desde entonces, le hablé a menudo sobre Dafa y abiertamente les dijo a los demás que no golpearan a los practicantes de Dafa. Siempre que los guardias no estaban allí, nos dejaba movernos y vigilaba que no hubiera interferencias cuando hacíamos los ejercicios de Dafa. Nos daba comida y evitaba que otros presos golpearan a los practicantes de Dafa. Le gritaba a cualquiera que tratara mal a los practicantes de Dafa. A menudo me decía: “Falun Dafa es bueno. Todos ustedes son buenas personas. Debo hacer estas cosas por ustedes".

Sus padres fallecieron y la casa en la que vivía se derrumbó. No tenía otros parientes cercanos. Lo iban a liberar y le pregunté qué deseaba hacer después de salir. Me dijo: "Tengo más de 50 años y seré feliz solo con un lugar donde vivir y comer". Después de seis meses desde que fue liberado, me escribió y me dijo: "Al principio me hice guardia de seguridad en un hotel. La jefa era viuda y nos casamos. Ella tiene un patrimonio de miles de millones de dólares y es propietaria de una mina de carbón. Ahora dirijo la mina de carbón". Sabía que había gestionado minas de carbón en su pueblo. Ahora vive muy bien.

Había otro preso que realmente creía en Dafa y a veces ayudaba a los practicantes de Dafa con cosas como guardar libros de Dafa y pasar cosas entre los practicantes. Lo ayudé a renunciar a las organizaciones del PCCh y le dije que recitara “Falun Dafa es bueno; Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Se lo creyó de verdad y lo recitó durante cinco horas al día. Llamó a su casa y su familia renunció al PCCh. También les dijo que recitaran a menudo “Falun Dafa es bueno; Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno".

Su familia tuvo un negocio inmobiliario durante decenas de años. Cuando lo conocí por primera vez, tenían más de 300.000 yuanes de deuda. Le dijo a su familia que mientras todos creyeran en Dafa y en el Maestro de Dafa, y recitaran las dos frases de buen augurio, todo estaría bien. Los miembros de su familia lo escucharon. Entonces tuvieron una oportunidad inesperada. Había una fábrica que cerró y vendió la tierra. Pidieron prestado más dinero, lo compraron y construyeron una propiedad comercial. Un año después, su hermano menor vino a visitarlo y le dijo que habían ganado 100 millones de yuanes. Le dijo a mucha gente que había recibido una fortuna después de creer en Dafa.

Espero que toda la gente crea que “Falun Dafa es bueno; Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno ”y elijan un futuro brillante para ellos en este momento crítico. 

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