Taiwán: generando conciencia sobre la persecución en China

(Minghui.org) El 9 de agosto de 2020, alrededor de 1.000 practicantes de Falun Gong participaron en la Conferencia de Intercambio de Experiencias de Taiwán. El tema principal del evento fue encontrar formas más efectivas de aclarar la verdad a la gente en China

En un esfuerzo de alentar a más practicantes a ayudar a crear conciencia en China, algunos practicantes proporcionaron asistencia técnica detallada. También se recordaron unos a otros que obtendrán mejores resultados siempre y cuando aborden todos los asuntos con un corazón compasivo y puro.

Conferencia de Intercambio de Experiencias sobre aclarar la verdad en China continental

Atesorar la oportunidad de salvar a los seres conscientes

"Usar los teléfonos móviles para aclarar la verdad tiene muchos beneficios", dijo Gan Hui-min, una practicante de la ciudad de Hualien, Taiwán. "No solo no está restringido por el tiempo y el lugar, sino que tampoco cuesta dinero adicional llamar a China. ¡Realmente puedes llegar a mucha gente en poco tiempo!".

Ella continuó: "Muchas personas renuncian a su membrecía al partido comunista chino (PCCh) y a sus organizaciones afiliadas, después de conocer la naturaleza maligna del partido. Algunos incluso hacen preguntas sobre cómo practicar Falun Gong. ¡Un teléfono celular es una gran herramienta para el trabajo de aclaración de la verdad!".

Dijo que se sintió profundamente conmovida cuando la gente aceptó renunciar a su membrecía en el partido, y le dijeron que "Falun Gong es bueno" o expresaron su deseo de aprender más sobre Falun Gong.

Siempre que se enfrenta a problemas, ella hace todo lo posible para resolverlos por su cuenta. Con una mente pura y un corazón decidido, aclara la verdad siempre que tiene tiempo.

"¡Los practicantes de Dafa deben sentirse bendecidos por tener la gran fortuna de aclarar la verdad y salvar a los seres consientes en este punto crítico de la historia!", añadió Gan.

Mejorando como un solo cuerpo

Un practicante compartió que no sabía cómo usar un teléfono celular o una computadora. Además, solo hablaba taiwanés y un poco de mandarín. Alentado por sus compañeros practicantes, practicó leyendo en voz alta los guiones del teléfono en mandarín, una y otra vez, mientras se enfrentaba a una pared. Prestó mucha atención al tono y a la entonación de su voz, hasta conseguir ser muy competente y seguro de sí mismo.

Otro practicante compartió cómo pudo aconsejar a un oficial de policía a renunciar el partido con su nombre real, después de asistir a una sola sesión de entrenamiento telefónico. Se sintió alentado por esta experiencia y continuó haciendo llamadas a China continental.

Otro practicante dijo: "Cuando empecé a hacer llamadas a China, rápidamente me quedaba sin palabras o que decir. ¡Ahora puedo charlar durante más de 20 minutos!".

Si una persona no renunciaba al partido, pensaba: "Esta persona ha sido profundamente engañada por la propaganda del PCCh". Ahora ese practicante mira en su interior para ver si su tono de voz o su falta de amabilidad pueden haber jugado un papel para que la persona no renunciara el PCCh, o tal vez no respondió completamente a sus preguntas o no abordó sus preocupaciones.

Otro practicante compartió cómo se sentía incómodo cuando una persona lo maldijo y abusó verbalmente de él. Sin embargo, después de escuchar algunas grabaciones de entrenamiento, llegó a entender mejor las cosas desde la perspectiva de la otra persona.

Ayudar a los demás compañeros a cumplir su misión de salvar a la gente común

"Cuando la pandemia de coronavirus comenzó, decidí ayudar a otros practicantes a cumplir su misión de salvar a la gente común", dijo Tang Mei-lin de la ciudad de Taoyuan. "¡Para mí no es suficiente solo hacer muchas llamadas a China sino ayudar a los demás a ser más competentes!".

Cuando vio que muchos practicantes tenían miedo al llamar a China, los entrenó amablemente con llamadas en directo, lo que les ayudó a superar su miedo.

Ella compartió cómo reclutó practicantes para el grupo telefónico de Taiwán y convirtió un sitio de estudio de Fa en una base de llamadas. Algunos practicantes ancianos aprendieron a hacer llamadas telefónicas en la base y ahora pueden hacer llamadas desde su casa.

Tang también se volvió competente en la preparación de guiones telefónicos y en el manejo de situaciones urgentes con las que otros practicantes se encontraban al hacer las llamadas telefónicas.

Al ayudar a otros, su propia naturaleza de corazón mejoró. "Solía tener prisa cada vez que hacía llamadas a China", comentó. "Hablaba rápido y mi voz era muy fuerte. Ahora, puedo hablar lentamente, con un tono de voz tranquilo".

Notó que tener una mente tranquila facilita la cooperación con otros practicantes en hacer las llamadas.

Un día, Tang visitó a una practicante de 80 años prostrada en cama, para animarla. Ahora, esta practicante puede caminar después de estudiar Fa y ha mejorado mucho su naturaleza de corazón (xinxing).

Tang fue a su casa cuatro o cinco veces para instalar un programa de llamadas telefónicas y enseñarle a usarlo. La anciana practicante se unió más tarde al grupo de llamadas telefónicas. Ahora puede aconsejar a tres o cuatro personas, por día, a renunciar el partido.

Impactar a los perseguidores a través de llamadas telefónicas

Chou Chin-lian, de la ciudad de Nueva Taipéi, compartió su experiencia de rescate de practicantes en China. Él comentó que las llamadas telefónicas eran la manera más eficiente y fácil de persuadir a los involucrados en la persecución. "¡Una llamada telefónica puede impactar al mal!" exclamó.

Luego dio el siguiente ejemplo. "Un día, el director de una subestación de policía llevó a un practicante, que acababa de terminar su condena completa, a una sesión de lavado de cerebro.

"Lo llamé y le dije: 'Por favor, libere al practicante que acaba de recoger de la prisión'. El director contestó: '¡No es asunto tuyo!' y luego colgó".

Chou llamó a varios practicantes y les pidió también que llamaran al director. Aunque la mayoría de las llamadas no se hicieron o fueron colgadas, el practicante fue liberado más tarde ese día.

Chou también intentó llamar a Ma Pingan, el jefe de la brigada de seguridad del estado, pero nunca pudo comunicarse. Varios días más tarde, alguien contestó apresuradamente el teléfono diciendo: "Mi nombre no es Ma Pingan", y luego colgó.

"Dejar que el teléfono suene repetidamente puede ayudar a disuadir a los perseguidores de cometer malas acciones y ayudar a rescatar a los practicantes", dijo Chou". Creo que la clave es tener una mente llena de pensamientos rectos y tomar acciones rápidas".

Dijo que algunos practicantes pensaban que solo se podría lograr un resultado positivo si la persona en China realmente toma el teléfono y nos escucha. Chou explicó: "En realidad, el efecto general será mejor si más practicantes hacen más llamadas telefónicas con pensamientos rectos".

Algunas llamadas nunca se realizan o se cuelgan de inmediato, porque una persona en China conoce el propósito de las llamadas que provienen del extranjero. Esto en sí mismo muestra que las llamadas están desempeñando un papel positivo de restringir a los perseguidores.