Chef pastelero en Taiwán: De la miseria a la felicidad

(Minghui.org) Chu Bo-yong comenzó su propio negocio de pan al vapor en Taiwán en 2017. Debido a su cuidadosa selección de materiales, ingredientes frescos y calidad artística, su tienda se ha vuelto tan popular en su vecindario que los clientes necesitan enviar sus pedidos con una semana de antelación.

Vida miserable: De aprendiz a chef pastelero

Hablando de su familia, el chef Chu recuerda mucha miseria. Siguió a sus padres a Taipéi para montar un puesto para vender fruta cuando era joven. Su familia vivía en la calle y era hostigada por la policía.

A una edad temprana, Chu tuvo que cuidar de su familia, y siempre tenía tribulaciones acechándolo. Su hermano mayor perdió la vida al ser arrollado por un tren cuando estaba en el instituto. Su hermano menor fue asesinado en una isla exterior donde servía como soldado. Su padre falleció debido a un ataque al corazón.

Como resultado, a Chu no le fue bien en sus estudios. Después de graduarse de la escuela secundaria, ayudó en la fábrica de su tío y aprendió algunas habilidades. La fábrica de su tío se especializa en la venta al por mayor de todo tipo de dim sum al estilo chino.

Chu aprendió a hacer una variedad de pasteles enrollándolos y rellenándolos, observando el grado de fermentación y controlando el calor. Poco a poco, Chu se convirtió en un pastelero independiente.

Obteniendo respuestas a una vida difícil

"Enfrentando tantas tribulaciones, me sentía triste", dijo Chu. "Siempre estaba buscando una respuesta a mi sufrimiento en esta vida. ¿Cuál es el significado de la vida en este mundo?".

"Solía creer en el budismo, el cristianismo, el tantrismo, el qigong, etc. Gasté mucho dinero y pagué muchas matrículas. Pero no pude encontrar ninguna respuesta a mis preguntas".

En 2005, Chu vio las noticias sobre el incidente de autoinmolación de Tiananmen, que el partido comunista organizó para incitar al odio hacia Falun Dafa. Él no sabía por qué el partido quería usar los recursos de todo un país para perseguir a una escuela de cultivación que enseñaba los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Habló con un pariente que practicaba Falun Dafa y le pidió prestada una copia de su libro principal, Zhuan Falun.

"Me conmoví al leer Zhuan Falun", recordó. "Mi visión del mundo y de la vida cambió completamente después de leer este libro. Es un libro tan grandioso".

"Finalmente entendí por qué experimenté tantos problemas. No habría buscado el sentido de la vida si fuera el hijo de una familia rica, sin dificultades ni preocupaciones".

Ahora entendía que nada ocurre por casualidad en este mundo y que las tribulaciones se deben al yeli de vidas pasadas.

"Ahora cuando miro hacia atrás, siento que los agravios y las dificultades que experimenté en el pasado se han convertido en buenos nutrientes en la vida y el trabajo. Y estos nutrientes finalmente han regresado a mí".

Chu se unió a un taller de instrucción de nueve días y comenzó a practicar Falun Dafa.

El Chef Chu realiza el quinto ejercicio de Falun Dafa, la meditación sentada

Viviendo en base a Verdad-Benevolencia-Tolerancia

Como dueño de la pastelería, también tenía conflictos al hacer negocios.

"Cuando abrí la tienda con un socio, no cooperamos bien", recordó Chu.

"Por ejemplo, mi socio solía comer y vivir en la tienda. Mi esposa me preguntó una vez si debía pedirle que pagara una parte del alquiler, del cargo de Internet y del uso del baño.

"Dije: 'No importa, porque podemos permitírnoslo. Después de todo, él vive solo. En realidad, si no practicara Falun Dafa, no lo habría dejado pasar. Pero, afortunadamente, practico Dafa y vivo según los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia".

En los tres años desde que abrió la tienda, Chu ha recibido elogios de muchos clientes. Pero algunos clientes no iban a recoger sus pedidos sin ni siquiera avisarle.

"Por ejemplo, un cliente hizo un pedido y yo me comprometí a cumplir mi parte", dijo Chu. "Entonces, el cliente canceló cuando ya era de noche y estaba a punto de cerrar".

"Aunque algunas personas tienen una mala actitud, trato el tema de manera positiva. Tal vez solo se encontraron con un problema y no pudieron recoger el pedido".

En la preparación de los pasteles, Chu dijo que no añade antioxidantes o conservantes como suelen hacer otras tiendas. Utiliza agua filtrada en su cocina, y prepara el relleno con los ingredientes originales. Por ejemplo, al hacer el relleno de frijoles rojos, algunos fabricantes añaden almidón modificado y luego lo mezclan con colorante de alimentos para reducir los costos. Pero Chu elige usar puros frijoles rojos para hacer el relleno.

Leyendo los libros de Dafa, comprende que la riqueza de uno está predestinada y que uno debe tomar el dinero a la ligera. Dijo que sus alimentos cubren las necesidades básicas de un cliente, y no se plantea aumentar el precio.

"Sé que algunas tiendas prestan más atención a los envoltorios y necesitan un gran presupuesto en publicidad. Pero, no creo que sea necesario hacer más dinero del que necesitamos. Lo más importante es asegurar la calidad y tratar a nuestros clientes lo mejor posible".

Muy afortunado de practicar Falun Dafa

Chu ha trabajado con masas durante más de 30 años.

"Cuando trabajo, pongo música compuesta por practicantes de Falun Dafa", dijo Chu. "Me sumerjo en un sereno estado mental. Debido a mi apretada agenda, enfoco mi mente solo en el producto y rechazo otros pensamientos. Espero que todos los que lo coman puedan beneficiarse tanto física como mentalmente".

El Chef Chu preparando la masa

"Desde que empecé a practicar Falun Dafa, no he estado enfermo ni una sola vez, ni he sido tan pesimista como antes", dijo Chu. "Mis colegas y mi familia saben que es gracias a Falun Dafa.

"A veces es realmente una lástima ver que algunos de mis amigos no practican Dafa, porque esta es una oportunidad para todos. No hay nada más feliz y más importante que la cultivación".