(Minghui.org) El clima en el norte de China es muy frio y no hay calefacción en las casas de campo. Una noche, a pesar de que la estufa de panal estaba encendida y que las ventanas estaban cerradas, hacía mucho frío en nuestra casa. A las 3 de la madrugada me pareció escuchar a alguien que me llamaba: “¡Levántate, a haz los ejercicios! ¡Haz los ejercicios de Falun Dafa!”. Me levanté inmediatamente, me sentía un poco mareada y como si el mundo estuviera girando.
Caminé hacia la cocina para lavarme la cara, me apoyé en la pared. Después de esto, tomé el lavabo, me detuve en la puerta y vacié el agua en el patio. De repente, caí boca abajo en el suelo. Me golpeé el labio inferior con la esquina de un escalón de hormigón y me hice una profunda herida de 2,54 cm (1 pulgada) de longitud. Después de la caída me quedé inconsciente.
Mi esposo es la persona de mi vida que mejor me conoce. Sabe que desde que practico Falun Dafa todas mis enfermedades se han curado. No he tomado ninguna medicina durante los últimos 20 años. Siempre que tengo molestias físicas, me recupero a los pocos días estudiando el Fa y haciendo los ejercicios. Sabe que el Maestro Li Hongzhi (fundador de Falun Dafa) me cuida.
Mi esposo se asustó al ver mi herida e inmediatamente gritó fuertemente: “¡Maestro, por favor ayuda a tu discípula!”. Unos veinte minutos más tarde recuperé la conciencia. Mi esposo estaba muy preocupado y dijo: “¡Si no fueras una practicante de Falun Dafa, hubiera llamado a una ambulancia!”. Estoy bien, no te preocupes, solo descansa”. Consolé a mi esposo.
Vi mucha sangre pegada en el cuello de mi chaqueta de plumas y en mi pelo, pero no sentí ningún dolor. Descansé durante un instante y comencé a hacer los ejercicios después de limpiarme la sangre de la cara.
Después de practicar la primera serie de ejercicios, me senté a descansar y comencé a mirar adentro en silencio: “Soy una practicante de Falun Dafa veterana que comenzó a practicar en 1995. A lo largo de los años, he sido fiel al Maestro Li y al estudio del Fa en el camino de la cultivación y he pasado muchas tribulaciones. He sido sólida como una roca sin vacilar y hago las tres cosas todos los días. Hoy en día, ¿por qué me ha sucedido este accidente? ¿He omitido algo en mi cultivación?
Me sentí avergonzada después de reflexionar sobre mí profundamente y de pensar sobre mi estado de cultivación actual. Me di cuenta que desarrollé el hábito de mirar programas de televisión con mi familia cada noche después de cenar. Pensé que como cada día hacía las tres cosas, podía descansar un poco por la noche y mirar la televisión. Cuando es la hora de enviar pensamientos rectos a las 6 de la tarde, no puedo calmar mi mente en absoluto y mi mente está llena de imágenes de los dramas de la televisión. Entonces me arrepiento y me digo: “Solo esta vez y no volveré a verla de nuevo”. No obstante, mi corazón se siente atraído por la trama. Después de un rato, no puedo evitar involucrarme emocionalmente de nuevo en la trama. Pasan varias horas en un instante y acabo desperdiciando un tiempo precioso.
El Maestro dijo:
“Un ser humano es como un recipiente; es justamente lo que él contiene. Todo lo que una persona ve con sus ojos y escucha con sus oídos es: violencia, pornografía, intrigas contra cada uno en obras literarias y artísticas, peleas por intereses personales, veneración del dinero, así como otras manifestaciones de la naturaleza demoníaca, etcétera, del mundo práctico. Con su mente llena con todas estas cosas, tal persona es realmente mala sin importar cómo se comporte. El comportamiento de la gente es dictado por sus pensamientos. Con una mente llena de tales cosas, ¿qué tipo de cosas es uno capaz de hacer?“ (Fundiéndose en el Fa, Escrituras esenciales para mayor avance).
Después de mirar la televisión me sentía arrepentida y deprimida cuando pensaba en las palabras del Maestro. También le dije al Maestro en mi corazón: “Estoy equivocada y dejaré de mirar la televisión”. No obstante, no me controlé y al día siguiente volví a mirar la televisión de nuevo.
Desperté este otoño. Eran las viejas fuerzas tomando ventaja de mi relajación en la cultivación, buscando consuelo y no teniendo una conciencia principal fuerte. Ellos han arreglado esta tribulación. Ahora que he descubierto mi apego, debo recuperar el tiempo perdido. Le pedí al Maestro que me ayudara y envié pensamientos rectos para rechazar completamente todos los arreglos de las viejas fuerzas.
Tiempo después sentí como si la herida de mi labio estuviera siendo suturada. Aunque mis labios estaban hinchados, no sentí dolor pero me sentí muy confortable. Sabía que el Maestro estaba cosiendo mi herida y me conmovió profundamente. Junté mis manos y me confesé al Maestro: “Sé lo que he hecho mal y no volveré a mirar la televisión de nuevo”.
Cada vez que recuerdo este momento, mis ojos se llenan de lágrimas y en mi corazón le expreso infinita gratitud al Maestro. Recuerdo que no podía abrir la boca para comer, al tercer día después de la lesión, la herida estaba completamente curada y podía comer con normalidad. Esa noche, un practicante vino a pedirme que saliéramos a aclarar la verdad. Mi esposo dijo: “No puede salir porque aún no tiene la boca curada”.
Rápidamente me puse una mascarilla y una bufanda y le dije a mi esposo: “Mira, puedo arreglármelas. Por favor, no te preocupes por mí”. Esa noche, brillaba la luna en el cielo y no soplaba un viento frío. Junto con mi compañera practicante, caminé por las calles cubiertas de nieve, repartiendo materiales informativos sobre Falun Dafa cómo DVDs, calendarios y folletos a los habitantes del pueblo. Con la bendición del Maestro, esa noche todo salió bien.
En el camino de vuelta, me encontré con la cuñada de mi vecino. Tan pronto como me vio, se sorprendió gratamente: “¿Tú herida se ha recuperado tan rápido que has podido salir a dar un paseo? Una mujer de nuestro pueblo se cayó y se lastimó la boca como tú. Tenía varios puntos de sutura y estuvo en el hospital durante siete u ocho días y aún no se ha recuperado. ¡Mira! No gastas dinero, ya no tienes dolor y te has recuperado rápidamente simplemente practicando Falun Dafa”. En el pasado le hablé a esa mujer sobre Falun Dafa y ella había leído los folletos de aclaración de la verdad. Dijo: “¡Ahora sí creo en Falun Dafa!”.
El Maestro nos dijo:
“El xiulian en sí mismo es atravesar el camino de un dios. El corazón humano en todos lados es siempre un impedimento. Pero vuestro camino es muy estrecho, con un pequeño descuido, el camino se desvía, y una vez que se desvía, surgirán problemas, incluso problemas grandes, y si no puede retornar, será un lamento para siempre” (Otra vez un palo de advertencia).
Sé que aún hay algunos practicantes como yo que insisten en ver la televisión o están obsesionados con sus teléfonos móviles y ordenadores. Dicen que niegan a las viejas fuerzas y se llaman a sí mismos discípulos del Maestro. Afirman que rechazan otros arreglos y que solo siguen el arreglo del Maestro Li. De hecho, su comportamiento muestra que han seguido los arreglos de las viejas fuerzas. Cuando sucede esto, ¿cómo puede nuestro Maestro ayudarnos? Compañeros practicantes, por favor, ¡aprendan de mi lección! Tengamos en cuenta las enseñanzas del Maestro, despertemos a más gente y caminemos bien nuestro sendero de cultivación.
Todo el contenido publicado en este sitio web tiene derecho de autor y pertenece a Minghui.org. Minghui realizará compilaciones de su contenido online de forma regular y/o en ocasiones especiales.
Categoría: Mejorándose uno mismo