​Mi experiencia sobre el campo de energía de Falun Dafa

(Minghui.org) Fue una noche alrededor de las 8 o 9 hace dos años, cuando caminaba a casa y pasé por un pequeño restaurante donde salía un ruido muy fuerte. Varias personas estaban reunidas en la puerta. Me acerqué para comprobar lo que estaba pasando.

Un joven de unos 30 años estaba pateando todo dentro del restaurante. Estaba borracho, delirante e irritado. Había platos y tazones esparcidos por todo el suelo. Cada vez que el dueño trataba de decirle que parara, pateaba más y peor. Había dos mujeres de la familia con este joven. Intentaron detenerlo, pero él se negó a escuchar. Las dos mujeres no pudieron hacer nada, pero siguieron pidiendo disculpas al dueño.

La gente que se había reunido alrededor sugirió que llamaran a la policía o a una ambulancia, pero nadie actuó ya que las dos mujeres no pidieron ayuda. Las dos mujeres estaban llorando y el dueño estaba muy enojado e intentaba contenerse.

Entré y tomé el brazo del joven con suavidad, le sonreí y le dije: "Ya está oscuro, vámonos a casa". Inmediatamente, su ira desapareció y se volvió más claro de mente. Me devolvió la sonrisa: "Estoy bien". Parecía ser una persona totalmente diferente.

Sus dos familiares se acercaron y lo sacaron del restaurante. Pronto se fueron.

Me sorprendió su cambio instantáneo. ¿Qué sucedió? ¿Cómo es que cambió tan rápido y de repente se comportó tan bien? Entonces me di cuenta que la razón debe ser que soy un practicante de Falun Dafa, y que debe ser mi campo de energía el que lo cambió.

En ese momento, recordé lo que Shifu dijo en la Tercera Lección, Zhuan Falun:

"Hablamos de la salvación propia y la de los demás, así como la de todos los seres conscientes, por eso el Falun puede salvarlo a uno mismo al girar hacia el interior y salvar a los demás al girar hacia el exterior. Al girar hacia fuera, el Falun emite energía, lo cual beneficia a otros, así toda la gente que está dentro de la cobertura de tu campo de energía resulta beneficiada y puede sentir mucho bienestar".

Cuando pensé más en lo que pasó, creo que mi campo de energía fue solo una parte de la razón, y que fue Shifu quien lo hizo realidad. Todo lo que hice fue hablar con el joven, y fue la poderosa virtud de Shifu la que cambió su comportamiento en ese momento.