(Minghui.org) Antes de quedar embarazada, alguien me dijo que había soñado que mi hijo no estaba sano. Me preocupé mucho y eso, me inquietó aun más después de quedar embarazada.

Durante mi embarazo, solo hice las pruebas que eran necesarias. Cuando me dieron la medicación para la progesterona baja, solo la tomé dos veces. Le dije a mi marido que soy una practicante de Falun Dafa, y que el niño estaría bien sin que yo tomara la medicina. Entonces, otro examen mostró que tenía alta la tiroxina. También ignoré la recomendación del médico. El ultrasonido mostró que el bebé era normal. Sabía que esto era una bendición de Falun Dafa.

Cuando estaba en Beijing para la práctica, sentí algo de humedad y pensé que era una fuga de orina debido al embarazo. No pensé mucho. Completé mi práctica y me fui a casa. Cinco días después, cuando fui a hacerme un chequeo, el doctor mencionó que el corazón del bebé tenía sonidos de soplo. Después del ultrasonido, el doctor comentó que mi líquido amniótico estaba bajo y que podría tener un parto prematuro. Sugirió que fuéramos a un hospital.

De camino a casa, empecé a sentir dolor en el abdomen, pero no tenía ni idea de que eran contracciones. Después de comer, intenté hacer la meditación sentada y esperaba que el dolor desapareciera. Pero no fue así. Tenía tanto dolor que no podía acostarme. Le pedí al Maestro Li (el fundador de Falun Dafa) en mi corazón que me ayudara a mí y al bebé. Cuando fui al baño, vi que el cordón umbilical se había caído. ¡Solo entonces me di cuenta de lo serio que era! Llamé a mi marido y le pedí que me llevara al hospital inmediatamente.

Eran las 6 p. m. y el tráfico estaba atascado por todas partes. Tardamos más de una hora en llegar al hospital. Tan pronto como el médico oyó que el cordón umbilical se había caído, me empujaron a una sala de partos. Entonces, el doctor me comunicó que el latido del corazón del feto era solo de unos 30, cuando un bebé normal debería tener unos 150. Me dijeron que había pasado demasiado tiempo desde que se había desprendido el cordón umbilical, normalmente un bebé muere en pocos minutos sin el oxígeno que proporciona el cordón umbilical. El doctor nos explicó que el bebé no viviría después de nacer. Afligidos, mi marido y yo firmamos el documento en el que acordamos renunciar al niño.

Finalmente, el doctor decidió inducir el parto y me trasladaron a una sala de partos. Mi madre también es médica. La llamé desde la sala de partos y le dije que había perdido al bebé entre lágrimas. Mi madre respondió: "No llores, mantén la calma". Me animó a tener fe en Dafa. Seguí recitando "Falun Dafa es bueno" sin parar.

No sabía cuánto tiempo había pasado. De repente sentí un movimiento en el lado izquierdo de mi abdomen. Le pregunté a una enfermera y me contestó que no era posible. Después de un rato, noté otro movimiento. ¡El bebé me había pateado! Le dije a la enfermera: "Ven a ver, mi hijo no está muerto. ¡Está dando patadas!". La enfermera midió el latido del corazón del bebé de nuevo y encontró que estaba alrededor de 160~170. El doctor vino y me dijo que como el bebé no había tenido oxígeno durante tanto tiempo, incluso si vive, podría tener serios problemas de salud de por vida.

Confiaba en que el niño estaría bien si el Maestro lo protegía. Le dije al doctor, "¡Quiero quedarme con el bebé mientras pueda ser salvado!". Me hicieron un ultrasonido. Parecía que todo era normal excepto que no había fluido umbilical ya que el cordón umbilical se había desprendido.

El doctor todavía sugirió que abortáramos al niño. Explicó que solo hay una oportunidad de tres o cuatro minutos para salvar al bebé, si el cordón umbilical se desprendía. Habían pasado más de dos horas para nuestro bebé. Pero, yo estaba decidida. El doctor entonces habló con mi marido. Le contó que el bebé podría nacer con graves problemas de salud y que yo podría contraer infecciones difíciles de curar.

Mi esposo, que no es practicante de Falun Dafa, estaba muy asustado. Me pidió mi opinión. Le dije: "Nos dimos por vencidos con el bebé porque pensamos que no podía ser salvado. Ahora que el bebé tiene un latido, quiero quedarme sin importar qué".

Mi marido vio que estaba decidida y dijo: "¡De acuerdo, haremos esto juntos!". Me empujaron a la sala de partos. En 10 minutos, el bebé nació y escuché el llanto. "Es una niña", dijo el doctor, "¡Esto es un milagro!".

En cinco minutos, todas las pruebas mostraron que la bebé era normal y saludable. Ella no mostraba ningún signo de falta de oxígeno.

Una bebé prematura que fue declarada muerta en mi vientre nació viva y saludable. Creo que el Maestro le había dado a la niña una segunda oportunidad. Cuando me sacaron de la sala de partos, los miembros de mi familia que esperaban afuera me dijeron que habían estado recitando "Falun Dafa es bueno, Verdad, Benevolencia y Tolerancia son buenas" para mí.

Dejé el hospital después de siete días. Pero, el hospital quería mantener a la bebé por otros 40 días para su observación. Le dije a la bebé en mi mente, "Bebé, deberías volver a casa con mamá lo más pronto posible. No te quedes en el hospital tanto tiempo".

Para sorpresa de los médicos, mi hija estaba muy sana y pudo volver a casa después de 19 días. Las personas que la vieron comentaron que no parecía una bebé prematura en absoluto, porque fue capaz de sostener la cabeza durante mucho tiempo en el primer mes.