(Minghui.org) Mi nieto nació a las 24 semanas de embarazo y pesaba solamente 750 gramos (1.65 libras). Según los médicos, era muy raro para un bebe prematuro sobrevivir.

Mi nieto no solamente sobrevivió, sino que prosperó. Ahora con un año, está alcanzando todos los hitos del desarrollo al igual que los bebés a término de su edad.

Mi familia entera atribuyó la supervivencia de mi nieto a Falun Dafa.

Soy maestra. Comencé a practicar Falun Dafa antes de que comenzara la persecución en 1999. Además mi hijo practica conmigo, pero, cuando fui perseguida por rehusarme a renunciar a mi creencia, mi hijo perdió su ambiente de cultivación, y dejó de practicar cuando terminó el colegio.

Una noche en el otoño de 2018, la esposa embarazada de mi hijo repentinamente tuvo calambres, así que se fue temprano a la cama. El dolor se intensifico en medio de la noche. Fue al baño y ¡su bebé salió! Gritó a mi hijo para que llamara a la ambulancia.

Luego de llamar, él vio al bebe y pensó que estaba muerto. Pero cuando miraron de cerca, hizo algunos sonidos y ¡su cuerpo se estaba moviendo!

Mi hijo se calmó e inmediatamente dijo las frases: “¡Falun Dafa es Bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es Bueno! Maestro ¡Por favor salve a mi hijo!”. Su esposa se unió a él y dijo las frases.

Luego de que su bebé fuera admitido por el hospital, los pediatras les dijeron que estaba en condiciones críticas.

Esa mañana mi hijo me llamó alrededor de las 3 a. m. Como vivimos en diferentes ciudades, me fue difícil ir al hospital inmediatamente. Le recordé que continuara diciendo las frases y le pidiera ayuda al Maestro Li (el fundador).

Al día siguiente llegué al hospital alrededor de las 10 a. m. Mi hijo estaba ansiosamente esperando por mi llegada. Estaba tan preocupado. Me dijo que no le estaba permitido ver a su hijo y esposa, y le pidieron que vaya a casa para esperar.

Comenzó a llorar mientras hablaba. Lo consolé, diciendo que su esposa y su hijo estarían bien, aún tenía la protección del Maestro. Estaba sollozando y dijo que el bebé era tan pequeño, tan lamentable, y que su esposa aún no estaba a salvo.

Le dije que su esposa y su hijo estarían bien. Le di coraje a que tuviera fe en el Maestro. Entendió y se calmó.

Dos semanas después, fuimos notificados para visitar a la madre y al bebé ¡Ambos estaban sanos y salvos! Fueron dados de alta del hospital 18 días después. ¡Estábamos locos de alegría!

Mi nieto es un bebé saludable. ¡Fue creciendo día a día y sin ningún problema en la alimentación y dormir! Cuando pasó un mes, le hicimos un chequeo. ¡Todo era normal y no tuvo ningún retraso en el desarrollo!