(Minghui.org) Mi propósito al escribir este artículo es despertar a algunos practicantes, que pueden tener el mismo apego que yo tenía a la situación política en Hong Kong. El incidente de Hong Kong es un intento de las viejas fuerzas de destruirnos. Debemos deshacernos de ese apego inmediatamente y concentrarnos en hacer bien las tres cosas.

Mi corazón se movió cuando, recientemente, la situación política en Hong Kong cambió. Seguía las noticias diariamente en Internet. Aplaudí la película que exponía la sustracción forzada de órganos aprobada por el Estado chino, las políticas en cuestión de Derechos Humanos del Senado de Estados Unidos y las protestas en Hong Kong. Olvidé completamente que soy un practicante de Dafa y, un cultivador que transita el camino hacia la divinidad. Aunque sabía que estaba mal tener esos apegos, no lograba eliminarlos.

El Maestro Li nos lo ha dicho explícitamente:

“Si un cultivador no puede contenerse, es difícil salvarlo y entonces es fácil que se arruine a sí mismo” (Del propio corazón nacen demonios | Sexta Lección, Zhuan Falun).

Debido a mi apego, las viejas fuerzas usaban cosas podridas de otras dimensiones para empañar mis ojos; parecía un líquido pegajoso y espeso en esta dimensión. Incluso me los limpiaba mientras leía las noticias en la computadora. Después de terminar las noticias, empecé a estudiar el Fa. 

Entonces, las palabras del Maestro me sorprendieron:

"... una vez que surge el corazón humano, hablarán sin sentido, cuando el apego es fuerte, su espíritu y su alma están fuera de sí, revueltos, y ellos mismos no saben qué son" (Enseñando el Fa en el Fahui de Nueva York 2010).

Cuando leí el Fa, me iluminé a que mi corazón se apegaba a las noticias y mis pensamientos eran caóticos. No podía seguir leyendo el Fa, así que me fui a la cama. Tan pronto como me acosté, mis vecinos comenzaron a hacer mucho ruido. Esto significaba que mi campo de energía estaba hecho un embrollo. Posteriormente, me quedé dormido y soñé que iba a Hong Kong, y me unía a la protesta. De repente, un grupo de hombres de negro se presentó en la protesta y abrió fuego con ametralladoras. Me dispararon y desperté.

Entonces me di cuenta de que las viejas fuerzas habían encontrado mis defectos. Mis apegos a la situación de Hong Kong fueron arreglados por las viejas fuerzas hace mucho tiempo. Trataron de usar mis apegos como excusa para perseguirme, lo que me llevó a que me dispararan en el sueño. Si muchos practicantes también están apegados a esta situación, las viejas fuerzas interferirán en Hong Kong y arruinarán a muchos seres conscientes, usando la excusa de ayudarnos a deshacernos de nuestros apegos.

Como cultivador que transita el camino hacia la divinidad, ¿cómo puedo involucrarme en los movimientos políticos de la gente común? Si un grupo grande de practicantes se siente movido por las noticias, entonces nuestros propios cuerpos celestiales se alejarán del camino correcto. ¿Cuántos problemas nos causará esto a nosotros, a la sociedad y a la rectificación del Fa del Maestro? ¿Cuántos seres conscientes se arruinarán por esto?

Pensando en esto, me sentí profundamente conmovido. Vi cómo mis apegos a las noticias interferían en la misión de validar el Fa, salvar a la gente e incluso en mi propia cultivación. Me levanté y empecé a arrepentirme hablando con el Maestro en mi mente, y luego empecé a escribir este artículo, esperando poder compensar el daño que mis apegos han causado.

La tendencia hacia lo positivo en el mundo de hoy, es el resultado de la inmensa resistencia que posee el Maestro. También es el resultado de los esfuerzos de clarificación de la verdad de los practicantes de todo el mundo, que enfrentan todo tipo de dificultades. Y es el resultado inevitable de la resistencia pacífica de la sociedad, debido al despertar de los seres conscientes.

Como discípulos de Dafa, debemos mantener la compostura, ya que se acerca el final de este período. No deberíamos sentirnos conmovidos por ningún cambio en la sociedad: "Sin confundirte ni estar tentado" (En el Dao, Hong Yin). Solo entonces podremos hacer bien lo que debemos hacer como practicantes.