Estar en calma incluso frente a las tormentas

(Minghui.org) Asistí a la escuela primaria durante la revolución cultural, y fui asignada como guardia de prisiones. Al ser adoctrinada por el ateísmo del régimen comunista, no sabía de qué se trataba la cultivación, ni entendía lo que representaba un Buda, un Tao o un Dios.

Sin embargo, siempre me pregunté: "¿Por qué vivimos en la Tierra como seres humanos?". Cuando le pregunté a mi profesor de secundaria, este me respondió que no era una pregunta en la que debería estar pensando a mi edad. Los profesores se sorprendieron mucho cuando dije: "¿Cuál es el propósito de tener buenos o malos resultados?".

Después de comenzar a trabajar, llevé una vida despreocupada e incluso rechacé la oferta de ser ascendida a oficial. Sentía que la vida solo duraba unas décadas y que no habría mucha diferencia si tuviera toda la fama y riqueza del mundo o si fuera una persona humilde y pobre. Me sentí como si fuera un alma perdida esperando a que pasara el tiempo. En mi corazón, seguía reflexionando sobre el propósito de estar viva.

Obteniendo el Fa y comenzando el camino para volver a mi verdadera naturaleza

Cuando tenía 37 años, me diagnosticaron reumatismo agudo. Una tarde me desperté y no podía moverme. Después de recibir tratamiento de acupuntura, solo podía caminar un poco, pero con mucho esfuerzo. Desde entonces, esto me pasaba a menudo y mi condición se deterioró. Me dolían todas las articulaciones del cuerpo, tenía la presión arterial baja, opresión en el pecho y falta de aliento. Vivía en una gran agonía.

Ni los médicos occidentales ni los chinos pudieron ayudarme, ya que mi condición fue causada por el reumatismo. Incluso dijeron que eventualmente terminaría con insuficiencia cardíaca. Sin otra opción, fui escéptica a ver si el qigong podía curarme. Sin embargo, después de probar dos tipos de qigong, me di por vencida.

El sentimiento original de desesperanza sobre la vida y la agonía en mi cuerpo me hizo caer en la apatía. Entonces, mi colega me dio el libro introductorio Falun Gong. Eché un vistazo y pensé que se trataba de otro qigong, así que se lo devolví inmediatamente, y le expliqué que no esperaba que funcionara.

Cuando un pariente me dio Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa, en el verano de 1997 leí el libro. Después de leerlo, me emocioné mucho cuando el libro contestó todas las preguntas que tenía en mi mente, y me ayudó a entender que la razón de estar viva es regresar a mi verdadera naturaleza. Esta era la respuesta que estaba buscando.

Poco después de que empecé a leer el libro y a practicar los ejercicios, mis articulaciones ya no me dolían y mi cuerpo se sentía muy relajado. Aunque no aprendí el Fa y los ejercicios con el fin de curar mi enfermedad, todas mis enfermedades desaparecieron.

Luego participé en una conferencia del Fa a gran escala. Había miles de personas en la sala de conferencias. Algunas personas tuvieron que estar de pie, entre ellas yo, que estuve de pie durante cuatro horas. Un practicante me ofreció su asiento, pero no acepté. Estaba muy concentrada en escuchar las experiencias de los practicantes.

Estaba enferma y cansada de escuchar los reportajes masivos del partido comunista chino (PCCh), así que el intercambio de experiencias de los practicantes fue nuevo. Las historias sobre el poder de Dafa eran increíbles. Hubo un practicante que dejó las drogas a pesar de ser un drogadicto, un gángster que cambió para ser mejor persona, un practicante con enfermedades terminales que se recuperó, un practicante que perdió su visión debido al glaucoma, y la recuperó después de practicar Falun Dafa, un ladrón se convirtió en una persona con altos valores morales, y así sucesivamente.

Defendiendo el Fa y perseverando en mi cultivación

Para que más gente pudiera conocer los beneficios de Dafa, salí con los practicantes a dar a conocer el Fa en mis días libres. Llevábamos algo de comida y visitamos algunos pueblos. A veces, incluso anduvimos en bicicleta durante más de 161 km (100 millas).

Cuando volvía a casa de aclarar la verdad sobre Dafa, me enteré de la Petición Pacífica del 25 de abril en Beijing. Una vez que llegué a casa, le pregunté a mi hijo si podía quedarse solo en casa, mientras yo hacía un viaje. Soy madre soltera y mi hijo nunca había estado solo. Sin embargo, para mi sorpresa, respondió: "¡Ve, vete! Ya tengo 14 años, no hay de que preocuparse", sin siquiera preguntarme adónde iba.

Después de regresar de Beijing, la situación se hizo cada vez más intensa. Perdimos nuestro ambiente de cultivación. Los practicantes y yo fuimos a los departamentos con cartas y visitamos a personas de diferentes niveles, esperando que el gobierno pudiera entender que Falun Dafa es una práctica de cultivación de alto nivel y que es beneficiosa para todos.

Sin embargo, después de nuestro regreso, me dijeron en mi trabajo que me iban a despedir. Mi departamento estaba muy estresado ya que la alta dirección los estaba presionando. Decían que todos ellos iban a perder su trabajo si yo iba otra vez a Beijing a pedir justicia para Falun Dafa de nuevo. Les dije que si me dejaban tener un ambiente de cultivación normal, no necesitaría ir a ninguna parte.

Los oficiales intentaron evitar que practicara Falun Dafa de muchas maneras. Diferentes rangos de oficiales se pusieron en contacto conmigo durante todo el día, y aproveché esta oportunidad para aclararles la verdad. Dijeron que sabían que la práctica era buena, pero que no tenían otra opción, ya que las autoridades superiores seguían forzándolos sobre este asunto. Incluso trajeron a mi madre y le dijeron a ella que me iban a llevar al campo de trabajo si no escribía una declaración de garantía de que dejaría de practicar. Mi madre estaba tan asustada que me abrazó la pierna y se arrodilló frente a mí durante unas horas. Eso fue realmente un dolor desgarrador.

Entonces, el departamento a cargo me mostró un fax de las autoridades superiores, y me dijo con lágrimas en los ojos que no importaba cuántas buenas palabras el departamento tratara de poner en mi nombre, no eran de ayuda. La alta dirección les dio 10 días más para hacerme escribir la declaración de garantía. Si no, el departamento tendría que despedirme. Me sugirieron que renunciara, ya que sonaría mejor que ser despedida.

Dije: "Me desempeñé aún mejor después de que empecé a cultivarme, así que ¿por qué debería dejar mi trabajo? El departamento tampoco tiene motivos para despedirme. Trato de ser una buena persona al vivir bajo los principios de la Verdad, Benevolencia, Tolerancia. Incluso cuando me redujeron mi salario a solo unos pocos cientos de dólares al mes porque me negué a escribir la declaración de garantía, aún así he venido a trabajar temprano y me voy tarde, limpié la oficina y me desempeñé bien". Todos saben eso. Le dije que si realmente me despedían, limosnearía por comida y aclararía la verdad sobre Dafa a donde quiera que fuera.

Durante más de un año, me pusieron bajo arresto domiciliario. Ellos destinaron un auto para que me llevara a hacer las tareas domésticas e ir a trabajar.

Tortura

Durante estos 20 años de persecución, estuve detenida durante casi 10 años. Fui arrestada 5 veces, detenida ilegalmente y llevada a campos de trabajo, centros de lavado de cerebro y prisiones. Pasé por tormentos emocionales y físicos.

Me colgaron con cuerdas y esposas, electrocutaron con una picana eléctrica y me obligaron a comer con alcohol. No me dejaron lavarme, ducharme ni cambiarme de ropa por meses, solo me lo permitían cuando me cambiaban de estación, cuando se me permitió ducharme solo fue durante 10 minutos.

Me golpearon y patearon para hacerme reacionar cuando me desmayé por las palizas. Me jalaron del pelo para golpearme la cabeza contra la pared hasta que me mareé y mi cara estaba magullada. Los guardias me golpearon con sus porras hasta que ambas piernas quedaron magulladas, cojeé durante 2 meses, y se me formaron 2 protuberancias del tamaño de una palma en mis caderas que tardaron unos años en desaparecer. También me privaron de dormir.

Cuando me desmayé debido al maltrato y caí, me golpeé la cara contra el piso causando que mis encías colapsaran, y mis dientes se aflojaron. La sangre salía de mi boca y mi cara y cabello estaban inmersos en un charco de sangre. El director de la oficina 610 incluso dijo: "Si mueres, les diremos que te has suicidado". No me dejaron usar ropa ni zapatos acolchados en invierno y me hicieron pararme en la nieve durante 18 horas. Un guardia del campo de trabajo incluso me pisó con fuerza el dedo gordo del pie hasta que mi uña de desprendió, y me hizo correr justo después de eso. Cuando me desmayé por todas las palizas, dijeron que solo estaba fingiendo.

Fui liberada en 2017. El poder de Dafa me ayudó a sobrevivir a la tortura.

Al igual que muchos practicantes, aunque he experimentado la tortura, sigo creyendo firmemente, porque "Verdad, Benevolencia y Tolerancia" ya había echado raíces en mi corazón.

Ser una buena persona sin importar donde me encuentro

Después de ser liberada, la persecución no cesó. Cuando regresé, me dijeron que mi pensión de jubilación había sido suspendida cuando fui sentenciada a prisión. Ellos continuaban su persecución financieramente. No pude obtener mi pensión, a pesar de haberla solicitado muchas veces.

Para poder mantenerme, encontré un trabajo a tiempo parcial. Este trabajo es mental y físicamente agotador. La mujer que trabajó en la tienda durante seis años me dijo que tardó medio año en recordar todos los precios. Pensé que soy una practicante de la Dafa, así que debo hacer lo mejor que pueda sin importar dónde esté.

Anoté todos los precios, categoricé los artículos en rangos de precios e hice una lista. Luego, ordené todos los artículos de acuerdo a la lista de precios. En un mes, pude recordar los precios de todos los artículos, y antes de que pasaron dos meses pude atender la tienda por mi cuenta. A pesar de la carga de trabajo, no me sentía cansada.

Cuando estoy en la tienda, mi jefa puede descansar medio día. Ella dijo que ha estado manejando este negocio durante tantos años que su cuerpo está cansado. Desde que estoy allí, ella puede relajarse mucho más. Dijo que estoy haciendo el trabajo de tres personas. Los clientes también me felicitan y dicen que les traje buena suerte. Poco después, toda la calle supo que yo era una practicante de Falun Dafa.

Un día, un anciano entró en la tienda y preguntó: "¿Tienes un CD?". Estaba un poco aturdida porque pensé que estaba aquí para comprar algo. Me miró y me preguntó: "¿Tienes el CD sobre "La verdadera historia de Jiang Zemin"?". Le pregunté cómo sabía que yo practicaba Falun Dafa, y me dijo que toda la calle lo sabía. Algunas personas entran a la tienda para escuchar la verdad y abandonar el PCCh. El dependiente que trabaja conmigo dijo: "¡Qué buena es tu actitud! Tratas a todo el mundo tan bien, y eres tan feliz todos los días, aunque no hayas recibido tu pensión. Si fuera yo, habría luchado duro con ellos. Debo aprender de ti".

Clarificando la verdad

Me arrestaron y me detuvieron dos veces por aclarar la verdad a la gente, pero sigo haciéndolo siempre que tengo tiempo. Puedo ir bastante rápido en mi motocicleta y aclaro la verdad cuando voy a los mercados, en las calles, ciudades y pueblos.

Desde la publicación de los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, persistí en aclarar la verdad. Inicialmente, muchas personas no entendieron por qué el PCCh se opone a que practiquemos una disciplina tan buena. Por lo tanto, les daba el material de aclaración de la verdad, y les decía: "Falun Dafa es realmente muy bueno, ya que puede mejorar la moral y restaurar la salud. En ese caso, ¿por qué se opuso el PCCh? Te daré un libro Los Nueve Comentarios para que le eches un vistazo y lo sabrás.

"El PCCh se opone a ello porque el PCCh es malo", y todos estaban de acuerdo con eso. También hay gente que dijo: "Solo practica para ti". ¿Por qué te pones en contra del PCCh?". Les dije: "Todos ustedes saben que todos saben que los practicantes de Falun Dafa son buenas personas, y que el PCCh persiguió a mucha gente buena de maneras muy crueles. Al perseguir a la gente buena, ¿no están apoyando a la gente mala? Por lo tanto, muchos de los funcionarios son corruptos y no tienen una alta integridad moral, lo que trae mala influencia a la sociedad y hace sufrir a todos, incluso a ti y a mí. Te dejaré leer Los Nueve Comentarios para que puedas ver la verdad y diferenciar lo bueno de lo malo por tu propio bien".

La vida se volvió más sencilla

Ahora, las cosas ya no son las mismas. Alguien puede gritar en las calles desde lejos: "¿Tienes nuevos materiales?", y yo responderé: "Sí, tengo los materiales de esta semana". Algunos de los que nos ven se amontonan a nuestro alrededor y buscarán materiales en mi bolso. Algunos toman los pequeños folletos de aclaración de la verdad, otros toman La Meta Última del Comunismo y otros me preguntarán si tengo la versión más gruesa, o me pedirán que traiga Los Nueve Comentarios la próxima vez.

Distribuí los calendarios de mesa y de pared antes del Año Nuevo y algunos me dijeron que les dé unos cuantos más ya que sus hijos, parientes y amigos también quieren una copia para su casa. Una bolsa grande de calendarios la repartí rápidamente, me arrebataban los materias

A mediados de febrero de este año, le estaba aclarando la verdad a alguien y me dijo que no había recibido el calendario de este año. Me pidió dos. Le dije que ya es demasiado tarde, porque los calendarios se han distribuido antes del Año Nuevo. Él le contestó con mucha confianza: "Hoy ya está oscuro. Te esperaré aquí mañana por la tarde". Escuchando eso, rápidamente fui a la casa de un practicante cercano para conseguir una copia del calendario para él. Preferimos prescindir de los calendarios que perder esta oportunidad. Al día siguiente, fui al lugar de reunión 10 minutos antes. Esa persona fue incluso antes. Cuando me vio, levantó el pulgar y dijo alegremente: "Los practicantes de Falun Dafa son buenos. Cumplen su palabra".

También hay mucha gente que dice: "Ayúdame a saludar al Maestro Li (el Fundador)". Algunos se darán la vuelta cuando se vayan y gritarán: "¡No olvides enviar mis saludos al Maestro Li!".