​Convertir algo malo en algo bueno

(Minghui.org) En mi camino de regreso a casa el 21 de junio de 2018, fui atropellado por un auto cuando cruzaba la calle. Cuando desperté, un oficial de tránsito estaba parado a mi lado. Me pedía el número de teléfono. Le pregunté: "¿Dónde estoy? ¿Por qué estoy aquí?".

El dueño del auto dijo: "Te atropellé con mi auto". Quería llevarme al hospital. Aunque le dije que estaba bien y que quería irme a casa, insistió en llevarme al hospital.

Sufrí varias lesiones, incluyendo una fractura de mi clavícula izquierda y de los huesos de mi pie izquierdo. El doctor dijo que necesitaba operarme. Sabiendo que me recuperaría haciendo los ejercicios de Falun Dafa, decliné educadamente la sugerencia del médico.

El médico me trasladó de la sala de emergencias a una cama temporal en el pasillo.

Mi familia, que había llegado al lugar del accidente antes de que me llevaran al hospital, insistió en que me quedara dos días más en observación en el hospital.

Durante esos dos días, seguí enviando pensamientos rectos. El dolor se hizo menos intenso. Nadie me creyó al principio, pero cambiaron de opinión cuando vieron lo rápido que me recuperaba. Estaban asombrados. Sabía que el Maestro se estaba encargando de muchas de mis cosas.

Empecé a buscar en mi interior. Nada es accidental. Me di cuenta de que, con una fuerte mentalidad competitiva, a veces tenía tendencia a pasar los semáforos en rojo. No estaba siendo considerado con los demás y no estaba siendo benevolente. Decidí deshacerme de ese apego y cambiar.

Continué enviando fuertes pensamientos rectos hasta que sentí que el dolor había desaparecido por completo. A la mañana siguiente, pude hacer los cinco ejercicios. Aunque no lograba levantar mi brazo izquierdo lo suficiente, lo hice lo mejor que pude.

A la tarde siguiente, me dieron de alta del hospital. Seis días después, el dueño del auto me visitó en casa. Se sorprendió al verme abrirle la puerta. "¿Cómo puede estar caminando?", preguntó. Su esposa quedó asombrada de lo que vio.

El dueño del auto se sintió aliviado. Le pregunté si conocía Falun Dafa. Respondió: "Cuando la gente trató de hablarme de eso en el pasado, no quise escucharla. Simplemente no lo creí".

Entonces le hablé de Falun Dafa y me prestó atención. Le dije que no le pediría ningún dinero por que el Maestro Li nos enseñó así. Exclamó: "¡No sabía que Falun Dafa era tan bueno!".

Al cabo de dos semanas, me había recuperado completamente. La familia del dueño del auto y yo fuimos juntos a la estación de policía de tránsito para arreglar todo lo relacionado con el accidente. Les ayudé a renunciar al partido comunista chino y les dije que recordaran: "Falun Dafa es bueno. Verdad, Benevolencia y Tolerancia es bueno".

El dueño del auto me agradeció sinceramente y nos invitó a mi esposo y a mí a cenar. Su esposa nos dijo que su primo también estuvo involucrada en un accidente automovilístico y se le rompieron los huesos del pie. Continuaba usando muletas incluso después de tres meses.

Le contó lo que me pasó. Su primo le dijo: "¿Por qué no me lo dijiste antes?". El dueño del coche también le dijo al primo que recitara: "Falun Dafa es bueno. La Verdad, la Benevolencia y la Tolerancia son buenas". También les hablaron a sus amigos sobre Falun Dafa.