(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa en 1995, después de lo cual me involucré en muchas diferentes actividades y proyectos de Dafa. Me desvié y luego regresé al sendero de la cultivación. Aclaré la verdad sobre Dafa, y resistí la persecución. Renuncié al PCCh e hice la cultivación en la Rectificación del Fa.

A veces el paso de mi cultivación parecía muy lento, y no podía ver el final, mientras que otras veces sentí que el tiempo se me escapaba. Era como si fue solo ayer que escuché el Fa de Shifu, pero ya habían pasado 24 años.

En un sueño, íbamos con practicantes al aeropuerto a recibir a Shifu que regresaba a China. Yo estaba muy emocionada, pero al mismo tiempo, avergonzada, porque sabía que no me había cultivado diligentemente, lo que me hacía pensar en cómo enfrentar a Shifu.

Sin importar mi pasado, tengo que estar agradecida de que la Rectificación del Fa no haya llegado a su fin. Espero que este intercambio exponga mis apegos, sea útil para que me haga más diligente, y me permita transitar bien el resto de mi camino.

Bloqueado de la verdadera cultivación

Encontré un fuerte apego a la envidia en 2003, el cual afectó mi vida negativamente. Me acababa de graduar de la universidad, y me hice amiga de una colega que empezó a trabajar en mi compañía ocho meses después que yo. Hacíamos todo juntas.

No mucho después, se convirtió en mi superior. Me sentí incómoda, comencé a tenerle resentimiento, y hablaba a sus espaldas. Ella no reaccionó, era muy amable y nunca se quejaba de otros incluso cuando la trataban mal.

Me sentí profundamente avergonzada en comparación: ¿Cómo podía yo ser así? Ni siquiera era buena como una persona que no practica. Debido a mi envidia, me costaba comunicarme con ella como antes.

Comencé a lidiar con mi envidia e intenté soltarla. Siempre que notaba mi envidia o sentimientos de resentimiento, lo reprimía, pensando: “No soy yo. Mi verdadero ser no es así”. Me llevó dos meses soltar los pensamientos de envidia, después de lo cual pude comunicarme libremente con ella de nuevo.

Estaba muy contenta de haber dejado ir la envidia. Cuando me encontraba con un conflicto podía mirar hacia dentro sin tener que lidiar con la envidia. Pero, me di cuenta de que todavía tenía envidia arraigada en lo profundo.

Debido a arreglos relacionados al trabajo, ya no podía ver a mi colega tan seguido, pero todos sabían que éramos buenas amigas. Nos manteníamos en contacto siempre que estábamos en la misma ciudad, y también nos visitábamos regularmente.

Para mi disgusto, esta amiga mía, no quería renunciar al PCCh, y no podía ver su actitud hacia Dafa. No obstante, ella era una persona de buen corazón, y mucho mejor cultivando el habla que yo.

Debido a que fui una vez fui descortés con ella, se enojó realmente y dijo que nunca practicaría Falun Gong. Luego perdimos contacto.

Pasaron ocho años y yo cambié de trabajo. Estaba frustrada, porque nunca me ascendieron, a pesar de ser una empleada capaz. Sin embargo, mis superiores inmediatos no hablaban bien de mí.

Aunque miré hacia dentro, no podía encontrar mi verdadero apego. Al final, me parecía que era por la envidia de otros hacía mí, y que lo que mejor podía hacer, era soportar. Dado este pensamiento, no podía hablar de Dafa con mis colegas.

Entonces, un día me di cuenta que mi mentalidad envidiosa se había convertido en una gran montaña que me bloqueaba de la verdadera cultivación.

Solía pensar que siempre que pudiera llevarme bien con la gente sin sentirme enojada por celos, entonces lo había hecho bien en cuanto a eliminar el apego.

Luego cuando miré hacia dentro, me di cuenta de que mi apego a la envidia todavía era fuerte. Me sentía infeliz cuando obtenían algo. Además, también tenía malos pensamientos cuando las cosas no salían de mi manera.

La envidia prevenía que entendiera verdaderamente el Fa. Si le pasaba algo malo a otra persona, me decía a mí misma que era porque no me había escuchado cuando le dije que renuncie al PCCh.

Shifu dijo:

“Una persona malvada es dominada por el corazón de la envidia. A raíz de su egoísmo y despecho personal, se queja que no le tratan justamente.
Una persona virtuosa siempre mantiene un corazón de compasión. Sin ninguna queja ni odio, toma la dificultad como alegría.
Un ser iluminado no tiene ningún apego en el corazón. Él contempla tranquilamente a la gente mundana extraviándose en las ilusiones.” (Grado de conciencia – Escrituras Esenciales para Mayor Avance)

Estado de cultivación inestable

Muchas veces me sentía frustrada: ¿Por qué no puedo desarrollar compasión? Sin compasión, uno no puede mantener un estado mental diligente. A pesar de que estaba haciendo las tres cosas, estaba en un estado muy inestable.

Ahora entiendo que nadie puede desarrollar compasión mientras se aferra a una mentalidad envidiosa, la cual va directamente opuesta a la característica del universo. Con tal mentalidad, ¿cómo puede salir bien las cosas cuando intentamos hacer que la gente renuncie al PCCh? Siempre sentí que era difícil elevarme y avanzar en el xiulian; en vez de eso, sentía que iba hacia atrás. La razón es que no me había cultivado bien, y por ende estaba siendo restringido por la característica del universo.

No respetaba mucho a los líderes de mi compañía y siempre prestaba atención a sus fallas, pensando que eran estrechos de mente y no podían tolerar a nadie que fuera mejor que ellos. A medida que pasaba el tiempo, simplemente hacía las cosas a mi manera y mantenía a los demás alejados.

Me sentía muy feliz cuando tenían problemas, esperando que los reemplazaran. Cuando la gente era recompensada en el trabajo, me sentía agobiada, pensando que nuestro jefe tenía problemas para juzgar a las personas.

Mentalidad de competencia y ostentación

Siempre esperaba poder contarles a mis colegas sobre Dafa, y enviaba pensamientos rectos muchas veces para poder cumplir mi deseo, pero no tenía mucho éxito. Al contrario, mi compañía incluso estableció un “comité del PCCh”.

Me parecía que había dejado ir el apego a la fama y la ganancia personal, pero no podía evitar pensar sobre la fama y la ganancia cuando venía que mis superiores no eran lo suficientemente buenos según mis estándares. Me parecía que había abandonado mi mentalidad competitiva, pero cuando mis superiores pensaban que yo no era capaz de hacer algo, trabajaba duro para probar que sí podía y que ellos estaban equivocados. Además de mi mentalidad competitiva, también tenía el apego a ostentar.

Shifu dijo:

“del libro Crónica de la Investidura de los Dioses, consideraba que Jiang Ziya era viejo e incompetente; sin embargo, la Honorable Divinidad del Origen mandó a Jiang Ziya a conceder títulos a los dioses. Entonces, dentro de su corazón Shen Gongbao se desequilibró: «¿Por qué razón lo mandan a él a conceder títulos a los dioses? Mira cuán formidable soy yo, Shen Gongbao, si mi cabeza es cortada, aún puedo volver a colocármela. ¿Cómo no me dicen a mí que vaya a concederles títulos a los dioses?»” (Zhuan Falun)

Intenté mostrarle a la gente que soy capaz; puedo hacerlo bien mientras que tú no, aun así ¿intentas decirme qué tengo que hacer?

En el pasado, cuando leía el pasaje del Fa de arriba, no entendía por qué Shifu nos daba este ejemplo. Ahora entiendo que pensar que uno mismo es mejor que otros es compararse uno mismo con otros, que también es el apego a competir y envidia.

Interpretando mal las intenciones de los demás

Las cosas en el trabajo no iban bien, y siempre pensaba que era porque otros estaban celosos de mis habilidades. De hecho, era mi envidia que causaba el problema.

Shifu nos dijo:

“… Cuando dos personas tienen conflictos y una tercera persona los ve, incluso esta tercera persona debe pensar sobre qué es lo que ha hecho mal y por qué se le da la oportunidad de ver esa escena”. Sin mencionar a las dos personas envueltas en el conflicto; ellos deben mirar hacia adentro aún más.” (Exponiendo el Fa en el Fahui del Este de los Estados Unidos)

El Fa de Shifu me enseñó que cuando vemos apegos en otros, de hecho, nosotros también tenemos un apego así. Shifu me ha dado pistas una y otra vez a través del comportamiento de las personas a mi alrededor, para ayudarme a iluminarme a diferentes principios del Fa, pero fallé en ver mis problemas y pensé que eran mis colegas los que tenían envidia de mí. Lo que es peor, me estanqué en mi situación por un largo tiempo y tomé una postura pasiva, pensando erróneamente que estaba siendo tolerante.

Shifu me dio una pista en los sueños. Me sentía celosa de mi hermana usando una falda muy linda. En el sueño yo era una persona totalmente diferente. Por el sueño me di cuenta de que mi envidia estaba profundamente escondida en otra dimensión, emitiendo sustancias negras. Esta mentalidad envidiosa afecta cada aspecto de mi cultivación y mis esfuerzos en hacer las tres cosas.

Me pregunté a mí misma: “Esas personas necesitas salvarlas, no obstante les tienes envidia. ¿Cómo podrías salvarlas así?” Me di cuenta de que mi mentalidad de envidia escondida me estuvo bloqueando por largo tiempo.

Abriendo camino para soltar la envidia

Me llevó un mes prepararme mentalmente para compartir y otro medio mes para escribirlo. En el proceso, sentí profundamente que lo que pensaba fue diferente de lo que escribí, y que el proceso de escribir fue como sacar un diente, y luego muchas cosas que no me había dado cuenta, las vi claramente.

Cuando me volví clara, se eliminar malas sustancias en otras dimensiones. Dejé de estar resentida como antes y siempre que siento envidia, lo niego inmediatamente.

Al momento que terminé de escribir este intercambio, dejé de tener pensamientos negativos sobre mis superiores, y su actitud hacia mí también cambió. Mi ambiente ha mejorado mientras mejoro mi xinxing.