(Minghui.org)A fines de diciembre de 2008, mi hermano mayor se sintió incómodo y fue al Segundo Hospital de Mudanjiang para ser examinado. Los análisis mostraron tres tumores en su hígado y que tenía hígado graso. Un doctor le dijo que fuera a casa para el Año Nuevo y regresara luego del 15 de enero con 100.000 yuanes para la cirugía.
Su familia quedó impactada y sin saber qué hacer.
Los visité luego de escuchar lo sucedido. Le había clarificado los hechos sobre Falun Dafa muchas veces antes, pero siempre evadía el tema. Nadie en su familia había abandonado al partido comunista chino (PCCh) ni a sus organizaciones afiliadas.
“¿Cuál es el plan?”, le pregunté. “¿Te harás la cirugía?”. Contó que la probabilidad de éxito de la cirugía era baja, a menos que los tumores se encontraran en una fase temprana. Pensó que la cirugía podría acelerar su fallecimiento. Planeaba más bien tomar medicina herbal china para prolongar su vida.
Le dije: “Te he contado sobre el poder de Dafa y de renunciar al PCCh. Recitar sinceramente que “Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno” es tu única oportunidad para sobrevivir. Muchos pacientes en condiciones críticas se han recuperado sin gastar un centavo ni sufrir dolor. Pero uno sinceramente debe creer que Falun Dafa es bueno”.
Luego le conté sobre cómo se recuperó uno de nuestros familiares. “En el año 2003, la tía de mi hermana tenía cáncer cervical avanzado. Los doctores le dijeron que no había cura. Mi hermana le dijo que recitara “Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”.
“Comenzó a recitar estas oraciones. Al mediodía no vio necesidad de tomarse su analgésico porque no tenía dolor. Luego de un par de días ya no tenía cáncer. Esta viva todavía y hace los quehaceres de la casa. ¿No es maravilloso?”.
Al escuchar, mi hermano dijo con emoción: “Renuncio a la liga de jóvenes comunistas y a los jóvenes pioneros. De ahora en adelante recitaré sinceramente “Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”.
Sus hijos y nietos estaban emocionados y todos renunciaron a las organizaciones del PCCh.
Él recitó con sinceridad ambas frases todos los días. Luego del 15 de enero, fue nuevamente al hospital para que lo examinaran. Los exámenes mostraron que su hígado graso y tumores habían desaparecido. Además, todos los indicadores de salud sugerían que tenía 10 años menos que su edad actual.
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