(Minghui.org) Tengo 71 años y empecé a practicar Falun Dafa en 1996. Durante estos últimos 22 años, mi salud ha sido restaurada y pude soltar mis apegos a la fama, las ganancias, el sentimentalismo y el odio. El Maestro Li, el fundador de Falun Dafa, me enseñó el verdadero significado de la vida y me ayudó a encontrar mi verdadero ser que había sido enterrado por el ye y las nociones humanas.
El Maestro abrió mi tianmu el primer día que empecé a practicar Falun Dafa. Al principio de mi cultivación, gradualmente me volví indiferente a la fama y la riqueza. También vi que mi gong subía rápidamente.
Altibajos en la cultivación
El partido comunista chino (PCCh) comenzó a perseguir a Falun Dafa el 20 de julio de 1999. Fui arrestado en abril de 2000 y detenido en un campo de trabajo forzado durante tres años porque organicé una conferencia para practicantes en nuestra ciudad para compartir experiencias de cultivación.
Después de haber sido liberado, perdí mi ambiente de cultivación y quedé bloqueado por una barrera que se creó entre el Fa y yo. Aunque no dejé de hacer las tres cosas, no pude ser diligente y sentí amargura en mi corazón. Anteriormente, a menudo hablaba con el Maestro en mi mente, pero en ese momento ya no quería hablar más con el Maestro, y no podía encontrar la razón.
En los peores momentos y los más difíciles, y a pesar de las diversas presiones, participé activamente en la organización de los sitios de producción de los materiales de Dafa, y en la entrega y distribución de los materiales de aclaración de la verdad. Vi con mi tianmu que el Maestro cabalgaba conmigo y con otro practicante para entregar los materiales.
Mirando en mi interior
Miré cuidadosamente dentro de mí y me di cuenta de que había sido profundamente envenenado por el adoctrinamiento del PCCh durante las últimas décadas, y aunque el lavado de cerebro en el campo de trabajo forzado no me engañó para que me "transformara", de alguna manera me había afectado. Aunque no lo dije, también me di cuenta de que la creencia en el Maestro y en la Dafa no era fuerte en mi corazón, lo que podría ser la razón principal de la barrera que se creaba entre Dafa y yo.
Los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista se publicaron en noviembre de 2004. Los leí repetidamente y participé activamente en la impresión y distribución de este libro. También estudié mucho las conferencias recientes de Shifu y miré en mi interior. Podía sentir que la barrera se erosionaba gradualmente, pero aún no podía experimentar el estado de cultivación que tenía cuando empecé.
Shifu dijo:
"... durante el viaje tendrás dificultades, pruebas de todo tipo, tribulaciones imprevistas, y tendrás interferencias inesperadas de toda clase de apegos y qing. Las interferencias vendrán de la familia, de la sociedad, de los buenos amigos y hasta de compañeros practicantes" (Exponiendo el Fa en el Fahui Internacional del Oeste de los Estados Unidos).
Me di cuenta de que mi historia contenía incontables sentimientos de resentimiento y odio que tuve en varios momentos, y que se basaban en apegos a la fama, el beneficio, el sentimentalismo, la hostilidad y la lujuria. Estos materiales degenerados se habían acumulado en mi mente y reforzaron mi resentimiento y odio.
Empecé a comprender que esta fuerte mentalidad era la causa principal de la barrera entre el Fa y yo. Entre todas las causas de mi resentimiento y odio, el factor principal era que buscaba respuestas positivas o reconocimiento cuando hacía cosas por los demás.
En algunos casos, la gente incluso mostraba hostilidad hacia mí, lo que dañaba mi corazón. Shifu dijo: "A raíz de su egoísmo y despecho personal, se queja que no le tratan justamente" (Grado de conciencia, Escrituras esenciales para mayor avance). Yo era exactamente así.
Comprendí que entre todas las causas de mis sentimientos de injusticia, el factor fundamental era el egoísmo. Este egoísmo formó y desarrolló todo tipo de apegos, pensamientos y sentimientos negativos que me atormentaron durante muchos años.
Eliminando mis apegos y volviendo a la pureza
Cuando desenterré la raíz fundamental de la barrera entre el Fa y yo, me sorprendí y también me puse un poco triste. Estaba decidido a eliminar mis apegos y regresar al estado puro e inocente que tenía al comienzo de la cultivación.
Envié pensamientos rectos permanentemente y continué aprendiendo y memorizando mucho el Fa. Con el tiempo, sentí que el hielo duro que se formó por el resentimiento y el odio comenzaba a derretirse gradualmente.
Shifu vio mi corazón y me ayudó a quitar este apego, que fue reemplazado por la compasión. Ahora me doy cuenta de lo equivocado que estaba cuando me quejaba de los demás.
Continué enviando pensamientos rectos, y después de un período de tiempo mi mente estaba tranquila, y el sentimiento de estar separado del Fa desapareció. Fue reemplazado por sentimientos de paz y plenitud.
En algún momento, empecé a hablar en silencio con Shifu otra vez. Cuando estudié el Fa, los principios del Fa venían a mi mente. La sensación que solía tener cuando empecé a cultivarme regresó.
Finalmente encontré el camino de vuelta a casa.
Ayudando a la gente a abandonar al PCCh
Muchos practicantes en nuestra ciudad han estado llamando a la gente para hablarles sobre Falun Dafa y ayudarlos a renunciar al PCCh y a sus organizaciones juveniles.
Empezamos llamando a ciudades y pueblos lejanos y luego empezamos a llamar a las ciudades cercanas. Al principio, muchas de las personas que contestaron el teléfono no se atrevieron a escucharnos, y algunas incluso nos maldijeron.
Sin embargo, con el tiempo más y más gente escuchó los mensajes grabados y muchos renunciaron al PCCh. Mucha gente nos dijo que habían recibido este tipo de llamadas muchas veces y que estaban bien informados sobre Falun Dafa y el movimiento de renunciar al partido.
Ahora, nos estamos concentrando en llamar a la gente de nuestra ciudad. Debido a que no le habíamos dado la suficiente importancia a estas personas, la mayoría de los que contestaron el teléfono inicialmente tenían miedo de escuchar nuestros mensajes, al igual que las personas a las que llamamos años antes en otras ciudades.
Hay docenas de universidades y numerosos edificios de lujo en esta ciudad y sus alrededores. Estas personas tienen menos oportunidades de conocer a los practicantes porque sus instalaciones tienen una seguridad que bloquea nuestro acceso, o tienden a conducir en lugar de caminar a sus destinos.
Hicimos muchas llamadas telefónicas a estas personas y muchos escucharon nuestros mensajes. Seguimos haciendo llamadas a números locales, y después de un tiempo, más y más gente decidió renunciar al partido.
Una familia, que eran todos miembros del PCCh, decidieron renunciar juntos. En otra ocasión, una familia de ocho personas también renunció.
Caminando por el sendero pavimentado por Shifu
Todos los practicantes entienden claramente que es Shifu quien está salvando a la gente. Solo estamos caminando por el camino pavimentado para nosotros.
Shifu dijo:
“Estos asuntos son arreglados por el shifu, el shifu lo está haciendo; por eso se dice que la cultivación depende de uno y el gong depende del shifu. Tú mismo solo tienes este tipo de deseo y piensas de esta manera, pero ese asunto verdadero es hecho por el shifu” (Lección Segunda, Zhuan Falun).
Hace más de un año, cuando estaba meditando, vi un Falun gigante cargado de adoquines blancos y negros bien colocados. Pero no entendí lo que significaba.
Cuando participé en el envío global de pensamientos rectos al mediodía de ese día, vi que el gong que estaba emitiendo estaba compuesto de brillantes diamantes blancos. Pero, de nuevo, no sabía lo que significaba.
Entonces, un párrafo del Fa de Shifu me ayudó a comprender:
“Los pensamientos rectos e indestructibles hacia la verdad del cosmos, forman los cuerpos jingang, benevolentes y sólidos como piedra de los discípulos de Dafa, espantan a todo mal, y la luz de verdad que emiten hace que se desintegre de los pensamientos de todos los seres, todos los elementos no rectos. Sea cual sea la fuerza de los pensamientos rectos, así de grande será su poder” (También en unas pocas palabras, Escrituras esenciales para mayor avance (II)).
Solo entonces me di cuenta del significado de lo que vi. Los adoquines blancos y negros se asemejan a nuestros cuerpos sólidos como piedra y jingang, y el gong que brilla como un diamante blanco se asemeja a nuestra inmutable creencia en el Fa.