El progreso de un médico de urgencias al “considerar a los demás primero”

(Minghui.org) El sistema de atención médica en China está lleno de crisis financieras, insatisfacción de los pacientes y tensión en la relación entre el personal médico y los pacientes. Las tensiones son especialmente grandes en las salas de urgencias. Soy médico de urgencias y me especializo en medicina interna. Me gustaría compartir algunas de mis experiencias de cultivación de los últimos 13 años trabajando en una sala de urgencias.

Ir a la facultad de medicina para "ayudar a otros"

Decidí ser médico cuando era un estudiante de último año en la escuela secundaria. Creí que ganaría virtud ayudando a otros. Un día, mi padre me preguntó por qué quería ser médico. Dije que quería ayudar a los demás. Una semana más tarde, tuve la suerte de tener en mis manos una copia de Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa.

Después de leer el libro por primera vez, se contestaron muchas preguntas que tenía sobre la vida. Me sentí iluminado por las explicaciones del libro y entendí para qué es la vida humana. Entendí que la virtud no se puede ver en el mundo material, sino que verdaderamente existe en otra dimensión. Comencé a practicar Falun Dafa y desde entonces me he sentido afortunado.

Después de la secundaria, fui a la facultad de medicina. Después de la residencia, comencé a trabajar en uno de los mejores hospitales.

El punto más bajo de mi cultivación

En 2005 comencé a trabajar en el servicio de urgencias. En el transcurso de mi carrera, he conocido y tratado todos los tipos de personas y problemas que uno pudiera imaginar. El número de casos que traté era sustancial, y la intensidad de la sala de emergencias se convirtió en un escenario ideal para cultivar mi xinxing.

En la transición del ambiente de la facultad al hospital, se hizo difícil para mí concentrar mi mente en ambos, el trabajo y la cultivación. Con el tiempo me relajé en mi cultivación y comencé a competir por ser reconocido. Desarrollé apego a la vanidad y acepté sobornos de las compañías farmacéuticas.

Con el paso del tiempo, comencé a cansarme fácilmente. Me puse ansioso y deprimido, con una mente llena de pensamientos negativos. Me sentía agotado y quise cambiarme del servicio de urgencias. Al mirarme más de cerca, descubrí que me había deslizado a un punto bajo en mi cultivación.

Benevolencia y amabilidad

Solía pensar y actuar basado en mis propios sentimientos. Por ejemplo, una vez me enojé con una paciente que acudió a la sala de emergencias a las dos de la mañana por una enfermedad que sufría hacía dos meses. Me enojé porque ella interrumpió mi sueño por algo por lo que pudo haber venido de día.

El Maestro Li Hongzhi (el fundador de Falun Dafa) dijo:

“Si siempre eres misericordioso, tratas a los demás benevolentemente, consideras a los demás al hacer cualquier cosa, y cada vez que se presenta un problema piensas primero si los demás podrán aguantar o no y si dañas a otros o no, entonces no surgirá ningún problema. Por consiguiente, debes refinar gong según estándares altos, exigirte con estándares aún más altos” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Decidí que debía tomar ligeramente las pérdidas y las ganancias personales e intentar considerar a los demás desde su punto de vista. Aprendí por experiencia, cómo el pensar desde el lado de la otra persona puede cambiar toda la situación.

Una noche, una mujer y su hijo fueron al servicio de urgencias. La mujer se quejaba de un dolor de cabeza. Sus pruebas eran normales, excepto que su presión arterial estaba alta. Escribí una orden para una tomografía computarizada y le dije a su hijo dónde llevarla y qué hacer.

Fue una noche muy activa, y solo una enfermera y yo estábamos de guardia. Pronto el joven regresó y dijo: "No hay nadie en el departamento de radiología, y el estado de mi madre se está deteriorando rápidamente". Corrí a la sala de tomografía computarizada y descubrí que el radiólogo ya había organizado el estudio, así que volví corriendo a la sala de emergencias. Pero el joven volvió de nuevo, quejándose de que no podía manejar los procedimientos del hospital por su cuenta. Me irrité y volví a la sala de TC con él.

Pensé que ya se había calmado, pero media hora después volvió otra vez: “Mi madre tiene una hemorragia cerebral. Su tratamiento se retrasó por tu culpa. Si le pasa algo, iré tras de ti”.

Muchos pensamientos pasaron por mi mente, incluyendo cómo debería tratarlo y si debería llamar a seguridad o al jefe de departamento. Hacer eso solo empeoraría la situación. Me calmé y traté de recordar la enseñanza del Maestro. Hablé con el joven en tono amable. Me dijo que su madre había tenido dos hemorragias cerebrales anteriores, pero se recuperó en ambas ocasiones. Su madre era su única familia, y él estaba extremadamente preocupado por ella como lo estaría cualquier hijo devoto.

Yo también me habría enojado si fuera él. Reflexioné sobre mis acciones y vi que no había actuado para su mejor interés. No hice todo lo que pude para ayudarlos.

Después de haber hablado con él por un rato, me disculpé y dije: "Sé que necesito mejorarme. Tal vez es porque he sido médico mucho tiempo, que a veces paso por alto ciertos detalles”. Después de mi sincera disculpa, sentí su energía positiva y ya no estaba enojado. Cuando se estaban yendo, deseé a su madre una pronta recuperación y le ofrecí ayudarlo en todo lo que pudiera. Me dio las gracias y se inclinó cuando nos fuimos.

Este incidente me hizo arrepentirme de las oportunidades de cultivación que había perdido simplemente porque no había llevado seriamente mi cultivación en mi vida cotidiana.

Mejoramiento

Con el tiempo me volví más diligente y productivo. Creé hojas de información para la admisión y el alta para que los pacientes y sus familias tuvieran en sus manos, una guía de referencia rápida. También realicé planes de cuidados y reglamento de admisión para visitas comunes a la sala de emergencias para que las enfermeras las imprimieran. Como resultado, la eficiencia de la sala de emergencias aumentó y los niveles de estrés tanto de los pacientes como del personal del hospital disminuyeron.

Me di cuenta de que, como practicante de Falun Dafa, debería presentarme de la mejor manera posible. Una primera impresión positiva puede ser de ayuda cuando estoy hablando con la gente sobre lo bueno que es Falun Dafa y la maldad de la persecución del partido comunista chino (PCCh), a la práctica y sus practicantes. Entonces, cambié mi corte de pelo infantil y comencé a usar ropa más bonita.

Una noche, un joven con fiebre alta vino al servicio de urgencias acompañado por su amigo. Le receté un antibiótico intravenoso por goteo. Después de que me acomodé, escuché a su amigo y una enfermera discutiendo y el sonido de vidrio rompiéndose en la habitación de al lado. Corrí y encontré que cuando el amigo trajo la receta del departamento de farmacia y le preguntó a la enfermera dónde debería ponerla, la enfermera tuvo una mala actitud diciéndole simplemente que la dejara sobre la mesa. La discusión se acaloró, y la botella de medicamento cayó y se rompió en el suelo. Le pedí a la enfermera que se abstuviera de hablar y saqué al amigo fuera de la habitación y le pedí disculpas.

Para evitar que las cosas empeoraran, pagué para reemplazar el medicamento y se lo llevé al joven y a su amigo. La enfermera me informó que al joven todavía le faltaba una dosis. Cuando me di la vuelta y me dirigí a la farmacia por segunda vez, el amigo se sintió un poco avergonzado y se ofreció a pagar el medicamento que faltaba.

Comencé una conversación con él, y caminamos juntos a la farmacia. Él estaba decidido a hacer que despidieran a la enfermera. Trabajaba en turismo y entendía la importancia del servicio al cliente. Le dejé desahogarse y dije: "Espero que tu negocio tenga éxito, pero creo que un gran líder debería tener un gran corazón, ¿verdad? Las enfermeras trabajan muy duro por un pequeño salario. ¿Qué ganarías en realidad si la despidiesen? ¿Discutiría un digno hombre de negocios con una joven enfermera por cosas triviales?". Se calmó y dijo: "Sería mejor si ella fuera tan dedicada y responsable como usted. Usted es una buena persona”. Lo miré a los ojos y dije: “Eso es porque tengo una creencia espiritual. Creo en Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Practico Falun Dafa. El gobierno chino persigue a Falun Dafa, pero Dafa es bueno y muy popular fuera de China".

Después de escuchar lo que dije, parecía haber olvidado su pelea con la enfermera. Dijo: “Fui a Hong Kong como guía varias veces. Vi a practicantes de Falun Dafa repartiendo información y hablando con la gente. Creo que es grandioso que le digan a la gente la verdad sobre Falun Dafa”. Al final de nuestra conversación, renunció felizmente a todas las organizaciones afiliadas al partido comunista.

Cuando volvió y preguntó por la condición del joven, me trajo una botella de té verde para que la bebiera. Me emocioné mucho. Después de esa experiencia, pongo más atención en ser minucioso y responsable en todos mis tratos con los pacientes y con quienes los acompañan.

Todavía tengo muchos defectos que deben ser eliminados, incluidos la pereza, la terquedad y la impulsividad. Como resultado de mis experiencias de cultivación y de aprender a considerar a los demás antes que a mis sentimientos e intereses, ahora tengo un deseo genuino de eliminar también mis otros apegos. Quiero ser más diligente en mi cultivación y volverme uno con Dafa.