(Minghui.org) Saludos Maestro y compañeros practicantes de Dafa:

He practicado Falun Dafa durante más de 20 años y he pasado de ignorar lo que estaba a punto de comenzar a cultivar hasta experimentar la belleza y el poder de la cultivación. La infinita benevolencia de Shifu y la inmensidad de Dafa se han manifestado para mí durante el proceso.

Al principio tenía un entendimiento vago

Comencé a practicar Dafa en 1997, sin saber realmente lo que Dafa y la cultivación implicaban. Aunque vi, con otros practicantes, los videos de las conferencias de enseñanza del Fa del Maestro no entendía lo que nos estaba enseñando. Sentía como si una gruesa capa de sustancias me cubriera.

Aún así tenía la sensación de que debía continuar practicando Dafa. Shifu también me dio numerosos indicios y pistas en el camino que guiaron mi cultivación.

Cuando comenzó la persecución en julio de 1999, fui a Beijing para apelar por el derecho a practicar Dafa. Fui arrestado, detenido en un centro de lavado de cerebro y encarcelado. Mi fe nunca se debilitó y seguí cultivándome a lo largo de los años.

Entiendo que entonces no sabía que mi lado que sabe me ayudó a salvarme. Pero siempre he sabido que Shifu me estaba protegiendo y fortaleciendo. Mi vínculo con Dafa siempre se ha mantenido firme.

Despertar

En la ciudad en la que vivía se produjo un arresto masivo de practicantes en 2012. Tres coordinadores en mi zona sufrieron diversos grados de persecución. De pronto, todos los practicantes nos vimos sometidos a una fuerte atmósfera de terror.

Sintiéndome responsable, comencé a coordinar a los practicantes para que compartiéramos entendimientos y estableciéramos sitios de producción de materiales, con la esperanza de mejorar el ambiente de cultivación para todos nosotros. Poco después, comencé a tener conflictos con otros practicantes. Sentía que algunos no cooperaban, así que empecé a abrigar mucho resentimiento.

Más tarde, el Maestro me ayudó a darme cuenta que el método en el que yo insistía en hacer las cosas no funcionaba, así que tuve que descartarlo. Algunas de aquellas experiencias me señalaron las cosas a las que me apegaba. Comencé a prestar más atención al estudio del Fa y a buscar adentro.

Cuando miro hacia atrás, entiendo que el estudio del Fa y la cultivación del xinxing van de la mano. El estudio del Fa por sí solo no puede conducir a mejorar realmente la cultivación, mientras que querer simplemente elevar el xinxin sin estudiar el Fa tampoco es posible porque se carece de la guía adecuada.

Shifu dijo:

“… las dos razones por las cuales el gong no crece cuando se refina gong: si no se sabe el Fa dentro de los niveles altos, no hay Fa para cultivarse; si no se cultiva hacia el interior y no se realiza el xiulian del xinxing, el gong no crece. Son precisamente estas dos razones” (Zhuan Falun, Primera Lección).

Shifu nos explica la esencia de la cultivación en el Fa. Aunque he estado leyendo el libro durante muchos años, realmente no me había cultivado basándome en el Fa.

Un contratiempo

Un practicante de mi región fue arrestado en 2016. Cuando se trataba de rescatar a practicantes arrestados, muchos encontraban excusas para evitar participar: como su falta de experiencia, del conocimiento legal necesario, miedo, etc. Yo era también uno de esos. Así que prácticamente todos dependíamos de otro practicante que era muy hábil en este sentido.

Sin embargo, esta vez, cuando el familiar del practicante arrestado buscó ayuda de los practicantes, el practicante experto me lo envió sin avisar. Me tomó por sorpresa. Al principio pensé que se trataba de una broma, y que no estaba listo para una misión así.

Logré ayudar a ese familiar a compilar documentos y luego le dije que los presentara en la corte. Me suplicó: "¿Puedes ir conmigo?". Lo miré sorprendido por algunos segundos y acepté, porque sabía que necesitaba realmente mi ayuda.

Aunque no me sentía mentalmente preparado para lidiar con tal situación, fue exactamente esta situación la que luego resultó ser un momento crucial y fundamental en mi cultivación.

El coordinador decidió formar un equipo de tres, el familiar, yo y otro practicante, para abordar el problema directamente, mientras otros practicantes enviaban pensamientos rectos.

Como tenía cierta experiencia en tentativas de rescate anteriores, tomé la iniciativa de compartirla con todos los practicantes de la región, sobre cómo escribir los documentos requeridos, contratar y acompañar a abogados a varias entidades gubernamentales, y otras cosas.

Como no conocíamos ningún precedente, seguimos el modelo del documento en el sitio web Minghui y contactamos de manera proactiva con el tribunal y el centro de detención. Logramos con éxito el derecho del familiar a participar en el alegato de la corte.

El abogado tomó el caso dos días antes de la fecha programada para el juicio. Más tarde mantuvo un alegato acalorado con el juez y con el personal del tribunal, lo que llevó al magistrado a posponer el proceso. Incluso el propio abogado se sorprendió y citó el poema del Maestro:

“Con los dizi repletos de pensamientos rectos, el Shifu posee el poder de llevarlos al Cielo” (Bondades entre el Shifu y los dizi, Hong Yin II).

Cuando el abogado no nos comprendía, manteníamos la calma y continuábamos apoyándolo con nuestros pensamientos rectos, lo que finalmente condujo a un cambio total en su actitud. Nos ayudó de manera proactiva a resolver varios problemas, tal y como esperábamos en un principio.

Cuando las nociones y los apegos humanos me controlaban, y me sentía demasiado exhausto para continuar, mantenía en mente al practicante arrestado y resistía a mis pensamientos egoístas. Cuando daba un paso adelante, la situación pronto parecía calmarse y los problemas se resolvían.

Cuando sentía que mis habilidades se encontraban al límite, recordaba el Fa del Maestro, y me sentía alentado y elevado gracias al fortalecimiento del Maestro. La sensación era muy vívida e intensa, como si estuviera inmerso en un fuerte campo de energía.

Al final, aunque el practicante arrestado fue condenado y sentenciado, la pena de prisión fue la más corta entre todos los casos similares. Al mismo tiempo, todos los practicantes involucrados en los esfuerzos de rescate obtuvimos una mejor comprensión del Fa, y sentimos que habíamos crecido y madurado en nuestra cultivación.

Shifu nos explicó:

“Por eso, lo tienen que atravesar ustedes mismos, porque el Fa ya se les había transmitido a ustedes y todos también están cultivándose, todo puede ser resuelto mediante la cultivación. Es solo una cuestión de si te cultivas diligentemente. Si realmente se cultivan diligentemente, todo puede resolverse” (Enseñando el Fa en el Fahui Internacional de Washington DC 2009).

El mayor beneficio que obtuve en el proceso, fue que me iluminé al verdadero significado de 'cultivar diligentemente' del Fa.

Desde entonces, he estado completamente consciente del poder y el valor inapreciable de Dafa y comprendí que la clave en la cultivación era alinear mis pensamientos y acciones con el Fa. Además, a partir de entonces, formé el hábito de buscar dentro de mí y buscar respuestas en el Fa cuando enfrentaba conflictos y dificultades.

Esta oportunidad que el Maestro arregló para mí fue un momento crucial en mi cultivación, con el que entré en una nueva fase. También me di cuenta de que todos los practicantes podían hacer lo que debían siempre que reuniera la voluntad y el valor suficientes, porque el poder verdadero proviene de Dafa.

Un arreglo excepcional

Solía haber muchos practicantes en mi región. Con los años y tras empezar la persecución, algunos dejaron de cultivarse y otros fallecieron. Algunos se mudaron de la región por varias razones. El número bajó mucho. Con menos practicantes, gradualmente empecé a pensar que los coordinadores regionales no estaban haciendo un gran trabajo, pero que su labor, de ser bien planeada, ayudaría en gran medida a lograr la mejora general de la región en su conjunto. En la superficie, era un pensamiento muy razonable. Sin embargo, cuando formó una mentalidad fija en mi cabeza, fue en contra de lo que Shifu nos enseñó:

“Les he impartido una forma de cultivación más amplia e ideal, ¡porque Dafa no tiene forma!” (Exponiendo el Fa en San Francisco 2005).

Cada practicante tenía su juramento individual antes de descender al mundo humano, y pueden tomar diversas decisiones a lo largo de su cultivación. Diferentes regiones pueden tener diferentes arreglos, y no hay solamente una forma correcta de hacer las cosas. Si imponía a la fuerza mis ideas y entendimientos a los demás, estaría violando el Fa.

Había tratado de influir con mi mentalidad a varios estudiantes. Al final, poco a poco, se habían ido distanciando, lo que me hizo despertar.

Pronto me di cuenta de mi apego por enfatizar demasiado la importancia de coordinar a los practicantes, centrando mi atención en las personalidades y el estilo de trabajo de otros practicantes. En lugar de eso, volví mi atención a mi propia cultivación.

Cuando mi proyecto necesitaba ayuda urgente, a los demás no parecía importarles ya que la comprensión de lo que es importante es distinta. Cuando los miembros del equipo del proyecto renunciaban repentinamente, dejándome a la buena de dios, o los compañeros practicantes cambiaban de rumbo en el proyecto sin consultarme previamente, no me sentía perdido ni guardaba rencor. Cooperaría de la mejor manera posible, y la prioridad sería  que el grupo lograra el éxito en su conjunto.

A lo largo del proceso, fui descubriendo que lo que pensaba que eran problemas de los compañeros practicantes, resultaban ser los míos propios. Al tener conflictos de xinxing una y otra vez, me liberé de los apegos de depender de los demás, exigir que los demás posean un alto nivel, fama, demasiada atención a la formalidad, egoísmo, arrogancia y varias otras nociones humanas profundamente arraigadas en mi mente. Cuando mi mente se tornó humilde, tranquila y pacífica, pude ver las fortalezas de los compañeros practicantes y todo mejoró.

Shifu dijo: “El xiulian es forjar vidas” (Explicando el Fa en Washington D.C. 2018).

Al elevar mi nivel de cultivación, me di cuenta de que lo que Shifu había organizado para los practicantes era la mejor manera de perfeccionar y realizar a un ser. Entonces mantuve la más profunda gratitud hacia el Maestro, así como también agradecí a mis compañeros practicantes.

Validar el Fa con mi pluma

En los primeros años, no aceptaba la petición de muchos practicantes de escribir cartas para persuadir a las personas de que hicieran cosas buenas y se mantuvieran alejados del mal. La razón era que obtuve malas calificaciones en mis clases de chino en la escuela. Además, no me gustaba escribir y sentía que hablar con las personas cara a cara era una mejor manera de salvarlas. Les decía a los practicantes que todavía no había encontrado la "pluma mágica", que regalaba el Maestro, y que me serviría como pista de que debía hacer aquel trabajo.

La situación cambió cuando participé en la tentativa de rescate. Como nadie más lo iba a hacer, tuve que preparar los documentos. Fue un proceso difícil escribir los materiales de la defensa para entregarlos a la corte en nombre de otro practicante. Como se usaría en la corte y se presentaría en varias entidades gubernamentales, el lenguaje debía ser preciso y profesional.

Me senté frente a mi computadora por dos días sin realizar ningún progreso ni tener ninguna idea de por dónde empezar. Un compañero practicante con cierta experiencia laboral legal compartió su experiencia conmigo. No me pidió que hiciera ninguna cosa en especial, sino que trató de recordarme por qué razón hacía aquello. Después de aquello siguió sin surgirme ninguna idea, y ni siquiera podía pensar con claridad.

De repente, me pregunté: "¿Por qué estoy tan inquieto? ¿Qué estoy haciendo y que quiero lograr?”. Luego busqué en mi interior y pensé en lo que el practicante acababa de compartir conmigo. Descubrí que estaba tratando de terminar lo más pronto posible este intento de rescate, sin pensar que esto se hacía para salvar a más personas. Luego, me tranquilicé un poco y gradualmente pude ordenar mis pensamientos.

Siguiendo la estrategia de defensa del abogado, hablé sobre la legalidad de practicar Dafa, de cómo las autoridades violan la ley y de la transformación positiva que tenían los practicantes después de cultivarse mental y físicamente.

También incluí la súplica sincera de los familiares del practicante, en un intento por hacer brotar la bondad y el sentido de justicia en los funcionarios de gobierno. Mi lenguaje fue preciso, pero pacífico, sin demasiado sentimentalismo humano. Solo me llevó una tarde completar el documento de más de 10.000 palabras.

Hay un dicho: los buenos artículos vienen del cielo. Me di cuenta de que escribir artículos también era cultivarme, y la sabiduría de elaborar un gran artículo provenía de Dafa, siempre que el xinxing del escritor estuviera a la altura del estándar de Dafa.

Llegué a comprender que mientras pongamos a Dafa en primer lugar y tengamos una visión correcta de lo que hacemos, Dafa revelará su poder.

Desde entonces, siempre que presenciaba algunos problemas en la cultivación de los practicantes o que escuchaba alguna historia conmovedora que otros practicantes compartían, experimentaba un sentido de urgencia para escribirla. La mayoría de los artículos ya han sido publicados en el sitio web Minghui.

Ahora, ya no espero a que los demás actúen, más bien, escribo siempre que veo la necesidad, independientemente del área de conocimiento que se requiera.

Rara vez he encontrado muchos obstáculos, siempre que logro mantener una mente recta y la atención adecuada, los escritos se realizan como si estuviera vertiendo mis pensamientos en un recipiente. Es realmente una manifestación del poder mágico de Dafa.

También cuando encuentro problemas en los artículos de Minghui que deben corregirse, hago comentarios e informo a los editores de Minghui. Creo que esta es la responsabilidad natural de un practicante.

Nuestra responsabilidad

Un día fui a visitar a una compañera practicante. Su nieta en edad de preescolar se mostraba poco amistosa con los visitantes e interfería con el envío de pensamientos rectos de los practicantes, pues quería jugar con su abuela todo el tiempo y acaparar toda su atención.

En esa ocasión, comenzó a portarse igual y a interrumpir nuestra conversación. La miré y le pregunté: "¿Qué tal si nos sentamos y enviamos pensamientos rectos juntos?". Me ignoró.

Le dije: “No debes molestar a tu abuela. ¿No estás tú aquí por el Fa? Ven aquí. Enviemos pensamientos rectos juntos”. Luego levanté la mano para mostrarle cómo hacerlo. Me miró por un rato y luego se acercó al sofá. Se sentó a mi lado y levantó la mano para imitar mi gesto. Le pedí: “Vayamos a casa con el Maestro juntos. ¿Quieres hacerlo?”. Claramente pronunció las palabras: “Sí quiero”. Su abuela nos estaba mirando y se quedó atónita por su reacción, ya que se había abstenido de hablar con ella sobre Dafa por temor a que pudiera comentarlo fuera del círculo familiar.

Aún más, después de ese día, inesperadamente actuó como una persona totalmente diferente, amable y amigable, sin molestar más a su abuela. Cuando su abuela aflojaba, se sentaba y ponía su mano erecta en la forma en que se envían pensamientos rectos, para recordarle a su abuela que fuera diligente otra vez.

La transformación de la niña fue inspiradora para mí y para su abuela. Todos los seres están esperando la salvación de Dafa.

Shifu nos dijo:

“En la práctica de cultivación, no estás haciendo progresos reales y verdaderos por tu propia cuenta, los cuales traerían grandes cambios esenciales en tu interior. En cambio, te apoyas en mi poder y en la ayuda de los fuertes factores externos para efectuarlo. Esto nunca podrá transformar tu naturaleza humana en naturaleza fo. Si cada uno de ustedes puede entender el Fa desde lo profundo de su corazón, eso sí será la manifestación del Fa cuyo poder es infinito – ¡La reaparición del poderoso FOFA en el mundo humano!” (Palabras de Advertencia, Escrituras esenciales para mayor avance).

Los practicantes de Dafa deberían liberarse de las nociones y apegos humanos lo más rápido posible, y alcanzar el estado de un ser divino. Esto se necesita urgentemente en el proceso de elevación de los practicantes como un todo y en salvar seres conscientes.

Conclusión

Un día, vi desde un alto edificio el follaje de un árbol alto moviéndose con la brisa. Las hojas en la parte superior parecían endebles, y no tan robustas como las más bajas. Pensé que no era importante dónde o en qué nivel estaba un ser. Lo que realmente importaba era que todas las hojas formaban todo el árbol y se convertían en parte de él. Como practicantes de Dafa, no importa en qué proyectos estamos involucrados y qué roles desempeñamos, la clave es que todos somos parte del todo, actuando hacia la misma meta, purificándonos, validando y armonizando el Fa, y demostrando así la ilimitada benevolencia de Shifu y la virtud de Dafa.

¡Gracias Maestro y gracias compañeros practicantes!