Una nueva practicante: Un voto más allá de las nubes

(Minghui.org) Saludos, apreciado Maestro y compañeros practicantes.

Soy de Kaohsiung. Empecé a practicar Falun Dafa (también llamado Falun Gong) hace poco, en febrero de 2019. Sé que necesito alcanzar a los otros practicantes, pero deseo compartir algunas de mis experiencias como nueva practicante.

Hemos esperado millones de años

Todos hemos esperado millones de años para cumplir nuestros votos durante el período de la rectificación del Fa.

Crecí en una aldea en el condado de Yunlin y solo terminé la primaria. Desde que era pequeña, disfrutaba de mi libertad y quería alejarme de mis padres, así que me casé cuando tenía 20 años. Pensé que disfrutaría de la libertad de la vida matrimonial. En lugar de ello, fue el comienzo de una pesadilla.

A mi esposo le gustaba apostar, y tenía relaciones fuera de nuestro matrimonio, así que tuve que encargarme de la carga financiera de la familia. Mis dos hijos y yo lo soportamos durante 20 años. Finalmente le pedí el divorcio. La vida era mejor después de divorciarme, pero solo duró dos años. Me fracturé las rodillas en un accidente automovilístico y estuve en cama durante tres años.

Siete años después de recuperarme lo suficiente para poder caminar, decidí asistir a una clase de costura en una escuela local y conocí a una practicante de Falun Dafa en la clase. Un año después, otra practicante entró en la clase. Nuestra clase de costura era un gran gozo debido a estas dos practicantes.

Un día, las escuché hablar sobre hacer los ejercicios. Les pregunté qué era y me dijeron que practicaban Falun Dafa. Durante mucho tiempo busqué una práctica de cultivación y entré en contacto con diferentes grupos, pero ninguna de las personas que conocí era tan buena como esas dos practicantes. Pensé: "Quiero ser buena igual que ellas".

El maestro Li dijo:

“Si tu vida originalmente no incluía el xiulian pero ahora quieres el xiulian, entonces hay que arreglarte nuevamente el camino posterior” (Tercera Lección, Zhuan Falun).

Después de leer la primera lección, seguí los principios de Verdad, Compasión y Tolerancia de Dafa. Mi vida cambió y comencé a promocionar Shen Yun, asistí al seminario de las nueve lecciones y distribuí el periódico La Gran Época.

Inmersa en el Fa

Durante el Seminario de las Nueve Lecciones recordé que Shifu dijo que si durante la meditación bajas las piernas porque duelen no logras nada. Entonces me recordé que quería cultivar, que quería poder sentarme en la posición de loto completo. Traté de no pensar en que tenía derecho a los beneficios que da el gobierno por la discapacidad debido a mis rodillas lesionadas. Chillé de dolor las primeras veces que fui a un sitio de práctica local. Unos días después, lloré en voz alta durante la meditación porque me dolían mucho las piernas. Me disculpé con los otros practicantes por hacer tanto ruido durante la meditación. Me animaron y me instaron a no rendirme.

Seguí presionándome, y finalmente pude sentarme en la posición de loto y meditar durante una hora. A veces no sentía dolor en media hora o más durante ese tiempo. Además, mis piernas y mi cuerpo se recuperaron por hacer la mediación, una experiencia maravillosa tal como se describe en Zhuan Falun.

También durante la meditación, vi que el suelo en el que estaba sentada cambiaba de forma y color: inicialmente tenía un patrón de telaraña y luego se volvió dorado. Un practicante me dijo que Shifu me estaba animando.

Antes de ser practicante no me gustaba leer. Pero desde la primera vez que tomé Zhuan Falun, sentí la necesidad de seguir leyendo. Necesitaba estudiar el Fa, hacer los ejercicios y cultivar mi xinxing. Aprendí a ser positiva ante los conflictos. Aprendí a mirar dentro de mí basándome en el Fa en lugar de buscar las deficiencias de los demás. Es maravilloso y mágico que mirar dentro de uno puede eliminar el yeli (karma).

Un voto más allá de las nubes

Antes tenía dos trabajos: limpiaba edificios y cosía zapatos. Después de comenzar a practicar, hubo un conflicto en el edificio entre los administradores y los residentes y perdí mi trabajo de limpieza. Un practicante me dijo que un periódico dirigido por compañeros practicantes estaba contratando gente para entregar periódicos y que yo podía ganar un ingreso mientras salvaba gente. En ese momento, ni siquiera sabía qué tipo de periódico era La Gran Época.

Me ofrecieron el trabajo y me dijeron que pronto comenzaría a entregar periódicos. Sin embargo, mi hija estaba usando mi motocicleta mientras esperaba un subsidio del gobierno para comprar una bicicleta nueva para ella. Me preocupaba estar sin transporte cuando necesitara comenzar a entregar periódicos. De hecho, mi hija compró una motocicleta nueva el día antes de que empezara a trabajar; era un testimonio de los cuidadosos arreglos de Shifu para los practicantes.

Me encontraba deseando mi nuevo trabajo, pero temía no poder encontrar las direcciones. Una practicante dijo que su hijo podría ayudar, estableciendo un mapa de navegación para las direcciones. Estaba feliz, entonces otra practicante me advirtió sobre el apego a hacerme dependiente, lo que hacía que la gente se sintiera cómoda y buscara ayuda todo el tiempo. Miré dentro y decidí no depender de los demás. Sin obtener ayuda, pude encontrar el camino y no fue tan difícil como había imaginado.

Días antes de comenzar a entregar, no hice los ejercicios de Dafa. En cambio, me entrené en cómo encontrar las direcciones para mi ruta de entrega. Un practicante me previno de que me estaban interfiriendo, impidiéndome hacer los ejercicios. Comprendí de inmediato que el practicante tenía razón. Después de hacer los ejercicios, pude encontrar las direcciones que antes me costaba localizar. Entendí cómo los practicantes debemos tener un corazón estable, de lo contrario las viejas fuerzas pueden interferir fácilmente.

Durante una reunión en la oficina de La Gran Época, mi gerente me preguntó cómo reaccionaría si los perros me perseguían cuando entregaba periódicos. Le dije que simplemente huiría. El gerente me dijo que él diría fuertemente: "Falun Dafa es bueno". Un día, dos grandes perros negros comenzaron a perseguirme. Aceleré, tratando de perderlos, pero los perros corrieron aún más rápido. Recordé lo que mi gerente me había dicho y grité a los perros: "¡Falun Dafa es bueno!". Inmediatamente me dejaron en paz.

A medida que me sentía confortable en mi trabajo, surgieron nuevos desafíos. Mi hija fue ascendida en su trabajo tres veces y necesitaba ir de viaje de negocios. Eso significaba que tenía que cuidar a mi nieta. Mi hija también me dijo que dejara mi trabajo de La Gran Época, diciendo que no tenía que trabajar tan duro. Le hablé de mi problema a una practicante, y ella se ofreció a ayudarme a cuidar a mi nieta, explicó cómo somos "un cuerpo". Esta experiencia me permitió comprender cómo los practicantes de Falun Dafa somos realmente "un cuerpo" para ayudar a Shifu a rectificar el Fa.

Tras obtener el Fa, comencé a aprender cómo enviar pensamientos rectos. Pero solo cuando comencé a entregar periódicos, comprendí la importancia de hacerlo. Un día, estaba teniendo todo tipo de pensamientos al azar. Un taxi se dirigía hacia mí. El taxi y yo nos detuvimos a solo un segundo de chocar.

Después de eso, me dije que entregar periódicos era una tarea sagrada: se trataba de salvar a la gente. Así que he estado enviando pensamientos rectos cuando entrego periódicos. A veces, cuando lo hago, siento que estoy en un reino diferente, y las carreteras, los edificios y el cielo se ven diferentes, a pesar de que conduzco por una ciudad que conozco desde hace 30 años. Lo que es más, a veces las calles se hacen muy hermosas, es increíble.

El 1 de junio de este año, la Gran Época local puso fin a todas sus asociaciones con personas no practicantes que estaban entregando el periódico. Esto aumentó la carga de trabajo de los practicantes. Llovía a cántaros ese día. Pensamos que este clima representaba una batalla entre el bien y el mal en otra dimensión.

Ese día entré en pánico porque no podía encontrar una dirección. Entonces recordé lo que dijo el Maestro: “La gente de hoy actúa de tal forma que no les entra pánico cuando algo les ocurre, se mantienen serenos y calmados, piensan racionalmente” (Viaje por Norteamérica para exponer el Fa, 2002).

Tan pronto como me tranquilicé, el lugar de la dirección estaba justo en frente de mí. Finalmente, todos nos sentimos muy conmovidos cuando entregamos con éxito todos los periódicos, a pesar del mal tiempo.

Mirando en mi pasado, recuerdo que cuando tenía cuatro o cinco años, tuve un sueño recurrente de una nube que me empujaba. Pero dejé de tener este sueño a medida que crecía. Recuerdo haberle preguntado a mucha gente por qué estaba teniendo este sueño, pero nadie podía decirme. Un día, le pregunté a un practicante, quien me dijo que los dioses generalmente vuelan de pie en las nubes. "La nube podría ser tuya", dijo el practicante. Entonces vi la misma nube en una pintura de dioses en mi sueño y me di cuenta de que la nube era realmente mía.

Mientras más tiempo pasaba leyendo las enseñanzas de Shifu, me daba cuenta de que los practicantes en el período de rectificación del Fa, habíamos firmado un contrato con Shifu para cumplir con nuestra misión de salvar seres conscientes. Pensé en no entregar más periódicos. Luego me encontré con lo que Shifu dijo sobre "... la humanidad enfrentará un gran juicio" (Enseñando el Fa en el Fahui internacional de Gran Nueva York 2009).

“Si no cumpliste tu promesa original o no hiciste lo que el Señor Creador requirió, entonces no habrás completado lo que se supone que debías hacer y en efecto habrás engañado al Señor. Ya que entonces habrás traído pérdidas a la situación de tu área local de ese momento, al progreso de la rectificación del Fa y a los seres conscientes que no fueron salvados, y habrás dañado o arruinado diferentes niveles del cosmos, debes ser considerado responsable” (Enseñando el Fa en el Fahui internacional de Gran Nueva York 2009).

Así que pensé que mi voto podría ser venir a entregar periódicos. Por lo tanto, nunca debo renunciar y solo puedo esforzarme por elevarme.

Entender los sucesos desde la perspectiva del Fa

Mientras escribía esto, compartí con otros practicantes las cosas terribles que había hecho mi exesposo. Por ejemplo, cuando todavía estábamos casados, me convertí en el centro de las burlas entre nuestros parientes después de que mi esposo llevó a su novia a tomar una copa en una tienda dirigida por uno de mis familiares. Pensar en esto me hizo llorar.

Un practicante sugirió que me sentía triste pensando en el pasado porque en realidad no había entendido lo que había sucedido desde la perspectiva del Fa. El practicante me pidió que volviera a pensar en el pasado, pero desde la perspectiva de mi esposo. Entonces pude apreciar lo que el Maestro ha dicho: que cada dificultad que encontramos es el resultado de nuestro propio yeli (karma). Cuánto sufres es el resultado de que una vez le hayas causado a la otra persona la misma cantidad de dolor. Habiendo llegado a comprender más de las enseñanzas, siento que mi espíritu ha sido elevado. La cultivación es realmente asombrosa.

Gracias, Maestro, por tu salvación compasiva. Gracias, compañeros practicantes, por su ayuda desinteresada. Seamos todos diligentes y completemos nuestros votos sagrados para ayudar al Maestro a rectificar el Fa.

(Presentado en la Conferencia de Fa de Taiwán 2019)