(Minghui.org) Tengo 78 años, soy la madre de un practicante de Falun Dafa y me he beneficiado enormemente de esta relación. Los practicantes de Falun Dafa que he conocido son todos muy sinceros y amables. Su comportamiento e historias son un verdadero testimonio del extraordinario poder de la práctica.

Vivo en las afueras de una ciudad del distrito y he cultivado vegetales para vender durante las últimas décadas. Mi hijo de 55 años, Zhongping (seudónimo), comenzó a practicar Falun Dafa en 1996. Solía trabajar como técnico en una planta manufacturera, pero se vio obligado a dejar su trabajo cuando el partido comunista chino (PCCh) comenzó la persecución a Falun Dafa en julio de 1999. Tuvo que abandonar su ciudad natal para trabajar en otra compañía, y terminó perdiendo 20.000 yuanes de su salario debido a su fe. No tuvo más remedio que regresar a casa y se ha ganado la vida durante los últimos 10 años trabajando en nuestro huerto de vegetales.

Si bien cultivar vegetales no es nada especial, Zhongping es un productor muy diferente al resto. Siempre me dice que debemos ser sinceros, amables y considerados, y no hacer nada en contra de nuestra propia conciencia. Hoy día, es una práctica común que los productores rocíen pesticidas para mantener alejados a los gusanos, y también usen fertilizantes químicos y agentes de maduración para mejorar la apariencia de sus productos y ganar más dinero. Mi hijo nunca ha recurrido a estos métodos artificiales.

La col china crece rápidamente y alcanza un buen precio en el mercado, pero depende en gran medida de los productos químicos. Zhongping prefirió no cultivar col china porque cree que los alimentos que se cultivan de esa manera son la causa de muchas enfermedades raras y complicadas que la gente padece hoy en día. Normalmente cultiva apio, espinacas, lechuga, papas y melones. Nunca usa productos químicos, pero los gusanos o plagas rara vez afectan sus verduras.

Aún recuerdo con claridad un incidente que Zhongping tuvo y que me convenció completamente de tener a Falun Dafa en un alto concepto.

Una noche en el invierno de 2016, viajó en su moto a aldeas agrícolas lejanas para distribuir folletos de Falun Dafa, como era su costumbre. Normalmente regresaba a casa después de la medianoche, pero en esa ocasión no supe a qué hora regresó. Me impresionó cuando lo vi por la mañana. La mitad izquierda de su cara estaba hinchada, su ojo izquierdo era solo una hendidura delgada y había costras en toda su cara. Una herida en la ceja izquierda se la cortó en dos.

Mi hijo me contó lo que pasó. Él y su pasajero regresaban a casa en la carretera después de las 11 p. m. y tomó una curva cerrada con demasiada velocidad. Su moto salió del camino, golpeó algunos árboles pequeños, rebotó y se hundió en una zanja.

Afortunadamente, la zanja no tenía mucha agua, pero tanto él como la moto quedaron atrapados en el lodo. Estaba inconsciente, pero recuperó la consciencia muy rápido. Escuchó a su pasajero gritar desde la curva: "¡Maestro sálvanos!". Sacó las piernas de debajo de la moto, consciente de que su cara estaba sangrando, pero no tenía fuerzas para sacar la moto de la zanja. El choque debe haber despertado a los vecinos cercanos, y un amable señor lo ayudó a sacar la moto con una cuerda. El tablero de la moto estaba muy dañado pero el motor funcionaba. Rogó al Maestro que lo ayudara mientras conducía los últimos 50 kilómetros de regreso a casa.

La noticia del accidente se extendió rápidamente. Todos los vecinos vinieron a verlo y le aconsejaron que fuera al hospital para recibir una vacuna contra el tétanos y así evitar una infección mortal. Yo también temía por él, pero Zhongping no se dejó influir. Les dije que, como cultivador de Falun Dafa se recuperaría muy rápido. Estaba realmente preocupada pero no había nada que yo pudiera hacer, y los sembradíos tenían que ser atendidos, así que salí a arrancar maleza.

Por la tarde, otra practicante vino a verlo, así que le pedí que intentara persuadirlo para que se aplicara una vacuna contra el tétanos. Ella también me dijo que no me preocupara, porque los practicantes de Falun Dafa están protegidos por el Maestro Li y Zhongping se recuperaría pronto. Ella me contó algunos otros incidentes similares con practicantes de Falun Dafa que terminaron bien y me hizo sentir mucho mejor.

Zhongping le dijo a la practicante que estaba inmensamente agradecido con el Maestro, por protegerlo de lo que podría haber sido un accidente catastrófico. Él lloraba en ese momento y yo también mientras los escuchaba. Nunca fue al hospital ni tomó ningún medicamento. Al leer Zhuan Falun y hacer los ejercicios, se recuperó en poco más de una semana. Tres semanas después, incluso las cicatrices en su rostro habían desaparecido. Nuestros vecinos ahora estaban totalmente convencidos de que Falun Dafa es extraordinario. Algunos incluso dijeron que lo practicarían es sus tiempos libres.

Aunque desde el principio supe que Falun Dafa es bueno, me preocupaba Zhongping porque el PCCh estaba arrestando y encerrando a los practicantes. Le aconsejé que dejara de practicar por ahora y lo retomara a los 60 años. Pero se mantuvo practicando a pesar de haber sido arrestado varias veces por distribuir folletos de Falun Dafa. Su determinación me ganó. Yo también seguí su consejo de recitar sinceramente "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" todos los días y sentí que mi salud mejoraba. Le dije a otras personas que lo hicieran y también se beneficiaron.

Me cuenta historias sobre la cultura inspirada en la divinidad y sobre Falun Dafa, y me encanta escucharlas. Siempre me hacen sentir más feliz, dormir mejor y mejoran mi apetito. Con el tiempo, mi salud ha mejorado mucho.

He sufrido de mareos severos durante casi 40 años. Suceden dos o tres veces al año. Cuando aparecen, mi cabeza da vueltas, me dan náuseas y me siento terrible. Estar acostada con los ojos cerrados lo hace un poco más soportable, pero terminaba en la cama durante una semana o dos. Parece que mi condición ha mejorado mucho en los últimos años. En febrero del año pasado, el mareo me duró más de diez días. Vomité un poco, pero ya no era tan fuerte como antes. Tuve otro período de mareo este febrero, pero lo superé en solo un día. No vomité ni me sentí enferma.

Todavía puedo trabajar en nuestro huerto de verduras de casi una hectárea, en cambio la mayoría de las personas de mi edad, ya se habrían retirado. Zhongping realiza el trabajo pesado mientras yo siembro las plántulas y arranco maleza. Arrancar la maleza no es tan fácil como parece. Tengo que tener buenos ojos y tener cuidado de no sacar las verduras. Durante el verano, cuando hace calor trabajo tres o cuatro horas al día y mucho más tiempo si no hace tanto calor. A veces trabajo tan fuerte que sudo fácilmente incluso en invierno.

Algunas veces me levanto justo después de las 5 a. m. y subo a mi carrito docenas de kilos de verduras para llevar al mercado. En un buen día, puedo vender todos mis productos y estar en casa a las 8 a. m. Lo más tarde que me quedo fuera es hasta las 10 a. m. Por lo general, cosecho las verduras cuando están tiernas y las pongo ordenadas para asegurar que mis clientes obtengan el valor de su dinero. Solo vendo verduras que han sido cosechadas ese día, así que vendo las últimas con un descuento o las regalo al final del día. Como podrás imaginar, mis productos frescos son muy populares.

Zhongping me dijo que el Maestro de Falun Dafa cuida a una persona virtuosa. Gracias a Shifu Li Hongzhi por cuidar de mi familia y de mí.