Shifu nunca me ha abandonado

(Minghui.org) Mi esposa padecía muchas enfermedades y tenía que tomar medicamentos a diario. Los médicos encontraron un tumor benigno en su hígado en la primavera de 1996. Los médicos de dos hospitales simplemente le recomendaron que lo ignorara. Entonces renuncié a mi trabajo e intenté encontrar tratamientos y medicinas para ayudarla.

Renunciando a Falun Dafa por miedo

Uno de nuestros parientes le presentó Falun Dafa a mi esposa y dijo que los ejercicios eran muy efectivos. Sin dudar, ella decidió comenzar esta práctica de cultivación, y en un mes se había recuperado de todas sus dolencias.

La gente de las aldeas cercanas fue testigo de su recuperación, por lo que muchos vinieron a mi casa para aprender Falun Dafa. Compramos un reproductor de video, una televisión y una grabadora y mostramos el video con las lecciones de Shifu en mi patio, porque nuestra casa era demasiado pequeña para todas las personas que llegaban. También escuché las conferencias y aprendí los ejercicios y poco a poco me convertí en un practicante de Falun Dafa.

Sin embargo, en julio de 1999, Jiang Zemin, el jefe del régimen comunista chino, lanzó la persecución a Falun Dafa. Los oficiales de policía saquearon mi casa.

Cuando mi esposa y otros practicantes fueron a Beijing para pedir justicia por Falun Dafa, estuvieron detenidos en un departamento de policía durante más de un mes. No solo eso, también nos extorsionaron dinero y exigieron que renunciáramos a Falun Dafa. Por el miedo a perder todo dejé de practicar Dafa.

Recuperando mi fe en Falun Dafa

Aunque no estudiaba el Fa ni practicaba los ejercicios, leí todas las nuevas conferencias de Shifu. Lo hice más por curiosidad, ya que ya no vivía según los estándares de Dafa de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Y así regresé a ser una persona común. Mi esposa me pedía que volviera a practicar Dafa, pero me negaba a escucharla.

A principios de 2016, cuando navegaba por Internet, rompí el cortafuegos de Internet para China y pude escuchar una serie de programas de radio de practicantes de Falun Dafa que recuerdan la compasión del Maestro. Eso realmente me conmovió y comencé a llorar.

"Shifu", le dije en mi mente: "¿todavía me consideras como tu practicante? ¿Tengo suficiente tiempo para regresar a Dafa?". Claramente escuché en mi mente que todavía tenía la oportunidad mientras la rectificación del Fa aún no terminara, y entonces decidí practicar Dafa nuevamente.

Ejercitando la Tolerancia

Después de reanudar mi práctica de cultivación, tuve un problema con la persona que administraba nuestros materiales. Él me gritó, pero recordé que Shifu dijo: "Siendo alguien que refina gong debes, ante todo, ser capaz de no devolver el golpe al ser golpeado ni devolver la injuria al ser injuriado, tienes que ejercer Ren” (Zhuan Falun).

Dije que solo estábamos hablando y que no valía la pena enojarse. Pero en lugar de calmarse, se enojó aún más. Shifu dijo: "Pero generalmente cuando viene un conflicto, si a uno no lo irrita hasta lo profundo del corazón, no vale, no sirve para elevarse” (Zhuan Falun).

Entonces el conflicto empeoró y el administrador me insultó frente a los demás.

Shifu dijo:

"Digo que esto aún no es suficiente; tal vez en el futuro se haga que alguien te dé dos bofetadas en la cara justamente enfrente de la persona ante quien sientes más miedo de “perder la cara”, haciéndote pasar vergüenza para ver cómo lidias con este asunto y si puedes ejercer Ren o no” (Zhuan Falun).

Me recordé que era un practicante de Falun Dafa y que debía seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia todo el tiempo. No peleé y no dije nada. El administrador siguió haciéndolo durante más de 10 minutos, hasta que se cansó.

Si no hubiera sido un practicante, no hubiera dejado que me insultara así. Yo era el administrador del proyecto, yo era su jefe. En un conflicto así habría salido triunfante.

Shifu dice:

"...ya soportaste mucho sufrimiento, por lo tanto, el yeli de tu propio cuerpo también será transformado. Debido a que te has sacrificado, cuanto hayas soportado, tan grande es la transformación, y todo se convierte en de” (Zhuan Falun).

Tenía cálculos renales y a veces sentía tanto dolor que rodaba por el suelo. Sin embargo, después de ese incidente, sentí que debido a que había mejorado mi xinxing, Shifu purificó mi cuerpo. Sentí como si mis cálculos renales hubieran sido eliminados. Pero el que me gritó tuvo que ser hospitalizado y le extirparon quirúrgicamente los cálculos renales.

Los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia son la medida de si uno es bueno o malo. Lo que uno hace determina lo que uno recibe. Y entendí mejor cuando Shifu habla sobre "transformar el yeli".

Para un practicante nada sucede por casualidad

Mi amigo y yo comenzamos una empresa de renovación. Antes de eso, alguien rechazó uno de sus proyectos y no le pagaron. Decidió ir al departamento de trabajo para pedir ayuda. Le dijeron que llevara los materiales como prueba y también necesitaba que apareciera la persona a cargo del proyecto. Dijo que solo confiaba en mí, pero yo no había estado involucrado en ese proyecto. Insistió, preocupado de que alguien más empeorara las cosas, así que acepté hacer lo que pudiera.

En mi mente, solo pensé una cosa: "Soy un practicante de Falun Dafa, tengo que vivir según los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia". En mi camino hacia el departamento de trabajo seguí enviando pensamientos rectos. Esperé en la fila. Cuando llegó mi turno, pedí la ayuda de Shifu y supe que lo haría pero sin mentir.

Cuando el oficial me preguntó, le dije que yo no era el que estaba a cargo. Me dijeron que, en principio, no podían tomar el caso. Les dije que todo lo que necesitaban estaba documentado y que podían verificar cualquier cosa con una llamada telefónica. Pensaron un tiempo y me pidieron mi tarjeta de identificación. La fotocopiaron, tomaron una foto y yo firmé como representante enviado por alguien a cargo. Eventualmente me dijeron que todos los materiales estaban completos y que todo lo que tenía que hacer era esperar el dictamen. Entendí que para un practicante nada sucede por casualidad.