Los conflictos pusieron al descubierto mis celos y me ayudaron a empezar a eliminarlos

(Minghui.org) Soy una así llamada "niña sándwich": tengo una hermana mayor y un hermano menor. Debido a eso, ya desde infante me sentí en desventaja. Notablemente, me sentí celosa de mi hermano menor. Estos celos se vieron reforzados por el comportamiento de una de mis abuelas. Le gustaban los niños, mientras que las niñas no contaban mucho.

Antes de empezar a cultivarme no me daba cuenta de que estaba celosa, y estaba segura de que un adulto ya no se pone celoso. Así, este apego se convirtió en una segunda naturaleza en mí. Como resultado, ni se me ocurrió que podría tener celos.

Una Lección de Zhuan Falun trata el tema de los celos, una Lección que he leído innumerables veces. Siempre pensé que no era de mi incumbencia. Estaba segura de que yo no era una persona celosa. Solo cuando reemplacé la palabra envidia por celos al leer a Zhuan Falun vi alguna conexión con el apego a los celos, y recordé mi infancia. Sin embargo, estaba segura de que ya no sentía celos desde que había comenzado a practicar Falun Dafa.

De todos modos, eventualmente me encontré con una prueba importante de xinxing relacionada con este apego. Cuando mi colega, con quien me llevaba bien, se mudó a otra ciudad, mi jefe contrató a otra persona. Todo lo que hice de repente salió mal y mi jefe me culpó de todos los problemas. Además, fue malo conmigo, sin importar cómo tratara yo de defenderme y decirle que yo no estaba involucrada en ese trabajo en particular. En vez de escucharme, me regañó severamente, y cuando mi colega apareció, su cara se iluminó. Yo no logré considerar la situación basada en el Fa, y sentí que me trataban injustamente.

En el proceso, no me di cuenta de que los celos profundamente ocultos en mi corazón hicieron su aparición de nuevo. Al cultivar, todos los apegos salen a la superficie, para que podamos quitarlos. Sin embargo, no me di cuenta de eso en ese momento. Me sentí atrapada en mis sentimientos hasta el momento en que me puse a trabajar, con el corazón palpitando y con dolores de estómago. Ese fue el momento en que me di cuenta de que las cosas no podían seguir así. Quise escapar de esta situación, salir. En realidad entendía que un practicante no huye de una situación que prueba tu xinxing. Pero, estaba tan absorta en mis sentimientos, que olvidé mirar dentro de mí en ese momento, y ya no me comporté como una practicante.

Empecé a buscar otro trabajo. Hasta entonces, solo había aceptado contratos de trabajo a corto plazo. Sin embargo, poco después, la gerencia de mi lugar de trabajo me ofreció un trabajo permanente. Sin embargo yo solo quería irme.

Finalmente entendí que se había arreglado una oportunidad de cultivación para mí, para que pudiera darme cuenta de que estaba celosa y deshacerme de ella. También vi mi apego a la fama. Ahora, podía manejar la situación, pero no me había librado de mis celos. Sin embargo, mis apegos ya no estaban ocultos y los reconocí. Esto realmente fue un proceso de cultivación. Fue un rompecabezas de cultivación que salió a la luz.

El Maestro dijo:

“Por consiguiente, de ahora en adelante durante el refinamiento de gong, te encontrarás con una variedad de tribulaciones de toda clase. ¿Cómo te cultivarías sin estas tribulaciones? Si todos son ‘tú eres bueno y yo también soy bueno’, sin conflictos de intereses y beneficios y sin la interferencia del corazón humano, entonces, sentado allí, ¿ya se eleva tu xinxing? Eso no es posible. El hombre tiene que forjarse y refinarse realmente en los hechos, sólo entonces puede elevarse“ (Zhuan Falun).

Para dejar ir la ira, uno necesita experimentar una situación difícil. Y, tal situación nunca toma mucho tiempo para surgir.

Otra persona me maldijo a mis espaldas y dijo muchas mentiras, haciendo que gente que yo jamás había conocido no me quiera y me condenara al ostracismo. Esto me molestó mucho. Sufrí bajo esta situación, desarrollé mucha ira hacia esta persona, y mi corazón se sintió pesado. No pude dejar ir mi ira y sucedió justo lo contrario: me enojé más. Y otra vez, olvidé mirar dentro. Por lo tanto, no me di cuenta de que esta situación había sido arreglada para mí para que yo encontrara mis apegos y elevara mi xinxing.

El Maestro dijo:

“No sólo no compitas ni pelees como él, tampoco puedes odiarlo en tu corazón; realmente no puedes odiarlo. ¿No te sientes movido una vez que lo odias? Así, no has puesto en práctica Ren. Nosotros hablamos de Zhen-Shan-Ren, entonces tu Shan ni siquiera existe. Por eso, no puedes actuar como él, realmente no debes enojarte con él a pesar de que haya dañado tu reputación ante la gente por encima y por debajo de ti y no puedas ni asomar la cabeza. En vez de enfadarte con él, debes agradecerle en tu corazón y hacerlo genuinamente” (Zhuan Falun).

Dejé de defenderme -algo que solía hacer- hace poco, cuando esta persona me escribió otro correo electrónico mezquino que contenía muchas falsedades y hechos distorsionados. Sentí justo lo contrario. Al leer el correo electrónico mi corazón se mantuvo en calma y no me molestó lo que ella escribió. Pude deshacerme de mi enojo, con el que me habían molestado durante tanto tiempo, y que hacía que mi corazón se entristeciera. Me sentí ligera, como si estuviera flotando en una nube. Nada podía molestarme más. De repente sentí compasión por ella y le agradecí desde lo más profundo de mi corazón.

Pasó mucho tiempo antes de que entendiera lo que el Maestro decía, no solo en mi mente, sino también en mi corazón, aunque haya leído las secciones "Perder y ganar" y "La transformación del yeli", en Zhuan Falun con bastante frecuencia.

Otros practicantes solían decirme que debería dejar ir esto o aquello, no, que no entendiera esto. Pero, es imposible apagar los sentimientos y pensamientos de uno como si fuera una radio. Se necesitan pruebas difíciles para reconocer los apegos y más aún para deshacerse de ellos. No creo que lo haya dejado todo, pero ahora sé cómo encontrar apegos. Tan pronto como mi corazón se mueve inmediatamente busco dentro de mí el apego que necesito eliminar.

El Maestro dijo:

“Validar el Fa también es cultivación. El proceso de cultivación es uno de reconocer continuamente tus propios defectos y luego desecharlos. Es sólo que cuanto más temprano se reconocen los apegos fundamentales, mejor es. Reconocerlos es, en sí mismo, una mejora. El ser capaz de eliminarlo, o superarlo, o debilitarlo, y al final eliminarlo completamente, ese proceso es uno de mejorarse constantemente, y es la transformación fundamental de un ser” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Atlanta, 2003).

Mi camino ha sido a menudo rocoso y doloroso. Sin embargo, todo lo que encuentro me ayuda a mejorar mi camino de cultivación.

Gracias, Maestro.