(Minghui.org) Una vez que la rectificación del Fa haya concluido, ¿cuántos seres conscientes quedarán? Cuando uno está en el laberinto, que supone la vida en esta tierra, no es consciente de sus pecados. Será mejor que perdonemos los errores que la gente cometió mientras podamos.
Desde que comenzó la persecución, he desarrollado odio hacia Jiang Zemin, exjefe del partido comunista chino (PCCh), su banda y el partido; especialmente hacia la policía que estaba siendo controlada por el mal. Nunca sentí compasión por ellos. En los primeros años de mi cultivación, incluso albergué un deseo de venganza.
En una ocasión le aclaré la verdad sobre Falun Dafa a un policía que me acosó en mi hogar. Más tarde, cuando me lo crucé en la calle y me saludó de manera amistosa, lo ignoré. Ahora, cuando recuerdo aquello, reconozco que no llevé bien la situación.
En 2016, me persiguieron con mucha crueldad. Odiaba a la gente que me denunciaba, al personal de la oficina 610 y a la policía. Aunque percibí que el odio era menor que antes, quedaban amplios rastros de él en mí.
Después de las pruebas, con la ayuda de otros practicantes, escribí mis experiencias, lo cual me ayudó a despejar muchos malos pensamientos y apegos humanos en mi mente. También me esforcé por estudiar más el Fa. Estos esfuerzos me ayudaron a ver mis pensamientos y nociones, y gradualmente me volví mejor persona, más positivo. Uno de los cambios que noté fue que era más compasivo.
Mi entendimiento fue que necesitábamos persistir y limpiar completamente el mal con nuestros pensamientos rectos. El malvado PCCh no era digno de mover nuestros corazones. El principio del Fa de "la apariencia surge de la mente” (Enseñando el Fa en la reunión de La Gran Época), me recordó que somos cultivadores y que nuestra misión es ayudar al Maestro a rectificar el Fa. Necesitamos limpiar completamente los elementos perversos con nuestros pensamientos rectos.
Por otro lado, la gente común, siento compasión por ellos porque viven en medio del sufrimiento. Además, ni siquiera es seguro que puedan quedarse después de que llegue la rectificación del Fa. Sin importar si han vivido momentos gloriosos o tragedias a lo largo de sus vidas, estas son vidas que el Maestro aprecia. Por lo tanto, aunque a veces tenía mi propia opinión sobre lo que decían o hacían, al atestiguar sus situaciones, dejé de preocuparme por mis propias pérdidas o ganancias. Dejé pasar las cosas y empecé a tomarlas a la ligera. Ya no odiaba a la policía y a la gente que me denunciaba. Solo miré hacia adentro y sentí lástima por ellos.
Independientemente de la procedencia de estas personas, tal vez lo que les pasaría al final sería muy miserable porque estaban completamente controladas por el mal y cometieron crímenes contra Dafa. Ahora tenían menos oportunidades de ser salvados. Una vez eliminadas junto con los malvados, se enfrentarían al final más terrible y trágico de todo el universo.
Cuando llegué a este entendimiento, cambié mi actitud y mi manera de hacer las cosas. Aclaraba la verdad cada vez que la policía o su jefe venían a buscarme. Este cambio fue totalmente inimaginable hace años. Descubrí que cuando hice esta distinción entre Dios y el ser humano, me volví más compasivo. La compasión es algo de Dafa y tiene un poder enorme.
Fui severamente perseguido en 2016. Después de eso, me transfirieron a la unidad de trabajo en la que trabajo ahora. La persona que era responsable de la seguridad me vigilaba e informaba diariamente a su jefe, todas las tardes a las 16:00 h.
El año pasado, trabajé en un proyecto con él. Sentí que era una persona ordinaria que necesitaba ser salvada. Envié pensamientos rectos y luego empecé a aclararle la verdad. Cuando empecé a profundizar en mi aclaración de la verdad, se puso ansioso y se alejó. Luego me denunció a su jefe. Como resultado, su jefe vino a buscarme. Y también le aclaré la verdad. Al día siguiente, el director llevó a la policía a la unidad de trabajo. Aproveché la oportunidad para aclararles la verdad y no recibí ningún comentario. Me dijeron que no saliera a aclarar la verdad. Luego me entregaron un formulario con preguntas y respuestas. Ni lo leí, ni lo firmé, y tampoco me obligaron a hacerlo. Después de aquello se fueron.
Sé, de hecho, que la mayoría de la gente en el “lado de la maldad" sabía que estaban haciendo cosas malas. Así que la mayoría de las veces, solo cumplían con su trabajo superficialmente. Pero después de todo, lo que hicieron fue malo. La persecución aún no ha terminado. No podemos tomar las cosas a la ligera. Necesitamos intensificar el envío de pensamientos rectos y no dejar nada que las viejas fuerzas puedan aprovechar.
Así fue como terminó esta situación. No odié al responsable de seguridad por denunciarme ante su jefe. Al contrario, lamenté no haberle salvado y creo que esto se debió a la interferencia. Continúo mirando hacia adentro, enviando pensamientos rectos para eliminar los factores perversos que lo controlan a él y a otros en la unidad de trabajo.
Poco después, aclaré la verdad a un colega y le ayudé a abandonar el PCCh y sus organizaciones juveniles. Informó de este encuentro conmigo a su jefe, quien luego consultó con otros para ver con quién más había hablado. Sentí que esto era solo una prueba para ver si continuaría con mis esfuerzos. Aunque no pasé muy tranquilo los días siguientes, no odié al colega que informó sobre mí. Pensé: "La gente común no puede entender a los discípulos de la Dafa. ¿Cómo iba a enfadarme con él? Debía perdonarlo". Lo único que podía hacer en ese momento fue enviar pensamientos rectos. También me preocupaba que se arrepintiera de haber abandonado el partido, porque ¡significaría que no se había salvado!
También escuché que mientras el jefe de aquella persona me estaba controlando, mucha gente difundió algunos comentarios negativos como: "Fulano de tal aconsejó que abandonáramos el partido comunista. Si finalmente lo hiciéramos y se metiera en problemas, nosotros también estaríamos en problemas". Verifiqué dos veces a todas las personas que he ayudado a retirar del PCCh, hablándoles de nuevo, para asegurarme de que entendieran completamente lo que habían hecho y no se arrepintieran. De todos modos, así fue como terminó el incidente. Durante todo el proceso, no odié a nadie. De hecho, la gente común está en medio de la ilusión. ¡Es tan difícil salvarlos!
Miré hacia atrás y sentí que, aunque había estado estudiando el Fa continuamente, de alguna manera, parecía hacer la vista gorda sobre algunos principios del Fa. A veces entendía ciertos principios del Fa cuando los leía, pero después no podía recordar exactamente cuáles eran. Eso fue porque no pensé a fondo y no entendí el significado interno de por qué ciertas cosas sucedían, desde la perspectiva del Fa.
Como mencioné, ya no quería preocuparme por mis pérdidas o ganancias, ya que me compadecía de la gente común. El principio parecía simple, pero si no lo entendía desde el Fa, mi xinxing no podría haber alcanzado un reino tan exigente, ni podría haber llegado a ese estado de cultivación. Es realizar el estudio del Fa de corazón lo que me permite entender este principio del Fa, y verdaderamente dejar ir las cosas y tomarlas a la ligera.
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Categoría: Mejorándose uno mismo