[Fahui de Minghui] Una lección aprendida al traducir una experiencia

(Minghui.org) ¡Saludos, Maestro! ¡Saludos, compañeros practicantes!

Recientemente traduje varios artículos para compartir experiencias junto con algunos compañeros practicantes. Durante el proceso de traducción, encontré muchas pruebas de xinxing. Aunque me tomó tiempo entender realmente lo que estaba pasando y apreciar las pruebas desde la perspectiva de una verdadera cultivadora, estaba profundamente agradecida por las oportunidades para templar mi corazón. Me gustaría compartir una de esas pruebas en este artículo. La situación parecía muy simple, pero aprendí una importante lección de eso.

Un practicante de sexo masculino trabajó primero en un artículo antes de entregármelo para futuras correcciones. Como mujer, tenía la corazonada de que el autor del artículo también era mujer. Revisé el nombre del autor como se muestra en la traducción al inglés, pero no pude distinguir el género por el aspecto. Nadie a mi alrededor hablaba chino, así que no pude verificar el género al verificar el texto original en chino.

Era bastante buena adivinando géneros y nunca había cometido errores en el pasado. Así que cambié el género de hombre a mujer en el artículo hecho por el practicante que había trabajado en él primero. Envié la versión final sin mostrarle mis correcciones. No pensé que él tuviera opiniones diferentes. Además, quería evitar una discusión. Había mostrado una tendencia a escribir muchos correos cuando sus opiniones diferían de las de los demás. Le costaba concentrarse en sus argumentos. A medida que más practicantes se unieran a la discusión, solo veríamos una nueva distracción del tema original. Sentí que él debería aprender y simplemente aceptar las decisiones de otras personas sin discutir. Yo quería darle una lección esta vez.

En retrospectiva, había tanta intención en mi "no preocuparme en mostrarle mis ediciones".

El practicante masculino me envió un correo electrónico cuando vio mi versión de ese artículo. Me preguntó por qué había hecho tantas correcciones, especialmente con respecto al género del autor del artículo. Mi primera reacción a su correo electrónico fue defensiva. Pensé para mis adentros: "Ahí está nuevamente intentando debatir sobre por qué esto, por qué aquello". ¿Por qué no puede simplemente aceptar las ediciones de otras personas sin tener una discusión?".

Quería enviarle un correo electrónico y recordarle que no me preguntara "¿por qué?" cada vez que otros corregían su traducción. Quería decirle que dejara de obsesionarse con la versión de una traducción. Estaba a punto de comenzar a escribir, cuando me di cuenta de que estaba molesta y no estaba calmada en absoluto. Hubo un nudo en mi estómago, y tuve todo tipo de pensamientos negativos sobre él. Me sentí electrificada y estaba lista para un debate.

Entonces me di cuenta de que lo que yo deseaba que hiciera eran exactamente cosas que debería hacer yo misma. Aunque inicialmente esperaba evitar discutir con él, ahora estaba ansiosa por demostrarle mi punto. Vi mi imagen reflejada en él.

Entonces, decidí enfrentarme a mí y no huir más cuando encuentro conflictos.

Shifu dijo:

"Sea lo que sea que experimenten durante la cultivación -sea bueno o malo- es bueno, ya que esto sólo ocurre porque ustedes se están cultivando" (Al Fahui de Chicago).

"Cuando te topas con conflictos, no importa si estás en lo correcto o estás equivocado, sabes pensar en ti mismo: ¿dónde me equivoqué en este asunto? ¿Verdaderamente surge de mí algo que no es correcto? Que todos piensen de esta forma, en el primer pensamiento piensen en sí mismos y piensen en el problema; quien no lo hace así, no es un cultivador verdadero de Dafa. Esta es el arma mágica del xiulian, esta es una de las características de la cultivación de nuestros Dafa dizi. Cuando enfrentas cualquier asunto, el primer pensamiento es pensar en uno mismo, esto justamente se llama “buscar hacia el interior" (Qué es un Dafa dizi).

Para ser honesta, a pesar de que este incidente realmente no fue un gran evento en el gran esquema de las cosas, tardé un tiempo en tranquilizarme internamente. Tuve que luchar realmente contra el deseo de debatir quién tenía la razón y quién estaba equivocado, y el apego de tener el control. Todos estos pensamientos aparecían continuamente en mi mente, pero definitivamente decidí finalmente comportarme como una verdadera practicante y concentrarme solo en lo que necesitaba aprender de esta situación.

Me di cuenta de que no debería culpar a los demás y que debería tratar de ver las cosas desde la perspectiva de otras personas. Los cultivadores deben ser amables y considerar primero a los demás. Los cultivadores deberían trabajar en sí mismos, y yo debería tener más fe en el poder del Fa. Las viejas fuerzas son las que quieren cambiar a los demás y no a ellas mismas. Envié pensamientos rectos para limpiar mi campo de todos los malos hábitos que seguían haciéndome criticar las fallas de los demás.

Después de un tiempo, había una sensación de calma en mí.

Me dije que no me molestara con lo que necesitaba cultivar. Decidí centrarme en lo que debería aprender de esta situación. Remonté mis pensamientos, no había ninguna indicación del género del autor, sin embargo, seguí adelante y cambié el género de todos modos. ¿Qué razones concretas tengo para elegir mi versión sobre la suya? Bueno, en realidad, mi única razón era que creía que era más competente que él en estas cosas. Creí que mi solución era mejor, y seguí adelante y la cambié. También quería evitar un debate, así que intencionalmente no le informé mi decisión.

En el pasado, le respondería para decir que debíamos mejorar la eficiencia, esforzarnos por terminar la traducción antes de los plazos y aceptar cambios sin queja. En realidad, eso solo estaba enturbiando las aguas, sin llegar al meollo del problema. Me di cuenta de que eso era exactamente lo que querrían las viejas fuerzas: querrían un debate entre nosotros, lo que inevitablemente arruinaría nuestra futura cooperación. Me sorprendió recordar cuántas veces mis compañeros cultivadores y yo caímos en la trampa y nos enfrascamos en largos debates, a menudo deteniendo por completo la cooperación. Sucedería lentamente, seguramente. Sentí que era realmente el momento de detener este tipo de comportamiento, porque parecía que las viejas fuerzas ya habían ganado muchas veces porque les permitimos hacerlo.

Me permití aceptar la gracia de las enseñanzas del Maestro, para fortalecer la fe de que, si Él me hizo su discípula, entonces seguramente puedo vencer estos malos hábitos que no están en línea con el Fa. Lentamente, se sentía como si un bloque de hielo se estuviera derritiendo alrededor de mi corazón y de mi mente.

Le envié un correo electrónico al practicante, exponiendo todos los detalles honestos desde el principio, desde mi deseo de evitar discutir con él hasta mi ego de pensar que tenía más experiencia que él para darme cuenta de la necesidad de eliminar mi corazón para validarme. Compartí lo que aprendí de todo el asunto, expresé mi gratitud por sus esfuerzos de traducción y me disculpé por no respetar su trabajo. Ofrecí volver a hacer la traducción para incorporar sus ideas originales. Esas fueron las palabras que envié, pero también las sentí realmente en mi corazón y mi mente, eso era rectitud y yo estaba llena de energía, pero humilde.

Me agradeció el correo electrónico y me dijo que no era necesario hacer más cambios a la traducción. No tuvimos más discusiones sobre el tema. Sentí una sensación de paz y unidad. De hecho, hubo algunas otras situaciones entre nosotros que al final también se resolvieron simplemente por ser abiertos y honestos entre sí. Fue realmente una buena lección sobre cómo ajustar mis pensamientos y mi comportamiento.

Mientras cooperamos con otros practicantes, creo que es importante no tomar el anzuelo establecido por las viejas fuerzas, y sus anzuelos vienen en diferentes formas y tamaños, y en diferentes momentos. Pueden parecer menores, pero se suman con el tiempo. Me pregunto por qué me llevó tanto tiempo ver esto más claramente.

Me di cuenta en un nivel más profundo que no debería participar en las luchas del ego, incluso en nuestros proyectos de Dafa, sino que debería actuar con honestidad y respeto por mis compañeros cultivadores. Solo haciendo las cosas de esa manera estamos validando Dafa en nuestras palabras y acciones. Al no hacerlo, parece que nos estamos uniendo a las viejas fuerzas en lugar de negarlas y purgarlas.

Cuanto más abierta y simple soy y cuanto más miro dentro de mí, más fácil es cooperar con otros, tanto en proyectos de Dafa como en mi vida personal.

(Experiencia seleccionada del Fahui de Minghui 2018, abreviado).