Saber apreciar las oportunidades para despertar a las personas

(Minghui.org) Crecí en la pobreza. Tuve muy mala salud y muchas deudas porque no podía permitirme el lujo de pagar los gastos médicos. Mis dos hijos asistían a la escuela secundaria. Viví con analgésicos y solo pude desempeñarme en simples trabajos agrícolas. Mi vida fue dura.

Encontrando Falun Dafa

Conocí a una practicante de Falun Dafa en 2005 que me dijo que debería tratar de recordar las palabras Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Pensé, ¡estas fueron tres palabras muy hermosas! Pronto tomé prestado el libro Zhuan Falun de los practicantes y comencé a leer. Tenía un fuerte dolor en las piernas, pero seguí leyendo. Cuando el dolor era insoportable, me levantaba y seguía leyendo. Luego, de repente, escuché la voz de un hombre diciéndome que continuara.

En siete días, la enteritis tuberculosa, una enfermedad que tuve hace años volvió, y también tuve diarrea. Pero no tomé ningún medicamento. Otras enfermedades que también había tenido desaparecieron una tras otra. La vida se hizo más agradable para mí, ya que no tenía que luchar contra todo tipo de enfermedades.

Pensé para mis adentros: ¡esto es verdaderamente extraordinario! Daré lo mejor que pueda para hacer en mi camino de cultivación lo que el Maestro Li (el fundador) requiere que los practicantes hagan bien. Necesito aprender, cultivarme, sufrir y salvar seres conscientes en este mundo secular. Así fue como me convertí en Dafa dizi.

Sumergiéndome en la clarificación de la verdad

Durante ese tiempo, hubo pocos recursos para aclarar la verdad. Había una revista semanal. Entonces, escribí cómo me beneficié de la práctica de Dafa y lo usé como folleto para repartir a las personas. Pero no fue suficiente. Entonces pensé para mí, ¿acaso no tenía una boca para poder hablar con la gente? Así fue como comencé a hacer la clarificación de la verdad cara a cara.

Una practicante una vez me vio hablando con la gente sobre Dafa en un mercado local. Ella me llevó a su casa y me mostró bolsas grandes de materiales de aclaración de la verdad. ¡Estaba tan feliz! Pero luego pensé, no podría tomarlos todos porque otros practicantes también podrían usarlos. Desde entonces, salí a distribuir y pegar volantes. También continué hablando con la gente sobre Dafa cara a cara. Donde sea que me necesitaran, yo estaba allí.

A veces salía temprano del trabajo y me dirigía sola a la costa que estaba a unos 26 kilómetros de ida y vuelta. Encontré varias granjas de pepinos de mar y una planta de procesamiento. Había hasta 50 trabajadores en el área. Una vez trabajé allí durante 5 años. Eso fue antes de comenzar a practicar Falun Dafa. A menudo tuve la oportunidad de hablar con grupos de personas. Por la tarde, iba a las aldeas cercanas para distribuir folletos. Hablaba con quien fuera que me encontrara.

En dos ocasiones me siguieron mientras distribuía folletos, y aproveché esas oportunidades para explicar los hechos sobre Dafa. Incluso visité a uno de esos en su casa, y después de escucharme aclarar los hechos, ya no me seguía.

Una vez mi jefa me desafió a que no me atrevía a decir: "Falun Dafa es bueno". Yo dije, ¿por qué no? Entonces, grité: "¡Falun Dafa es bueno!". Una trabajadora dijo: "¡Venga a ver a esta practicante de Falun Dafa! ¡Su complexión ha cambiado y parece muy joven y saludable!". Todos se dieron cuenta de lo que estaba diciendo y me miraron. "Di las gracias a Shifu en mi corazón.

Dejar ir un corazón humano y aclarar los hechos ampliamente

El mes de mayo es la temporada de cría marina. También era el momento de trabajar con las ostras. Había entre 80 y 90 trabajadores temporales en el campo. Como el dinero que ganaban dependía de la cantidad de plántulas de ostra que tenían, decidí no hacer demasiado, y en su lugar, aproveché el tiempo para hablar con la gente sobre Dafa a un grupo de personas, y luego a otro. De esa forma, al final del día, todos debían haber escuchado la verdad.

Algunas personas dijeron: "¡Lo que ella dice es realmente cierto!". Otros dijeron: "Jiang Zemin (el exlíder del partido comunista) causa desastres en China. En el momento en que estuvo en el poder hubo una inundación. Luego despidieron a los trabajadores. Luego hubo nuevos edificios aquí y allá. ¡No tenemos más tierra!".

Aclarar los hechos frente a un gran grupo de personas era algo en lo que era buena. Dondequiera que hubiera una gran multitud, yo estaba allí. No tuve tiempo para contar el número de personas, y tampoco sabía quién estaba a mi alrededor. Seguí hablando y aclarando la verdad de Falun Dafa. Bajo la protección de Shifu y los dioses, nunca ha habido ninguna interferencia. Quizás ese es mi camino de cultivación. Entonces, estaba decidida a hacer más clarificación de la verdad para salvar seres conscientes.

Buenas intenciones de Shifu

A menudo sentí que Shifu me cuidaba cada vez que hacía clarificación de la verdad en público. También me dio la oportunidad de ser diligente. En casa, ya fueran las observaciones irresponsables hechas por mi hijo, los comentarios críticos desencadenados por mi nuera o el lenguaje abusivo utilizado por mi esposo, pensé que manejaba bien estas tribulaciones y que no me afectaba la emoción humana. Aunque debo admitir que me dolía el corazón.

En este momento, las palabras del Maestro vinieron a mi mente:

"Por consiguiente, de ahora en adelante, durante el refinamiento de gong vas a encontrar una variedad de tribulaciones de toda clase. ¿Cómo te cultivarías sin estas tribulaciones?" (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Estas palabras fueron reconfortantes especialmente durante los momentos difíciles. Tal vez había una emoción a la que tenía que renunciar. Así que seguí estudiando el Fa memorizándolo. El estudio me ayudó a enfrentar los desafíos con una mente tranquila. ¡Estaba agradecida por la ayuda de Shifu! Entiendo que cuanto más estudio del Fa hacemos, más seres conscientes podemos salvar. El estudio del Fa y la salvación de seres conscientes se complementan entre sí.

Aún recuerdo el día en que fui a trabajar en un mercado. Había más de 50 personas presentes. Aclaré los hechos mientras trabajaba. Entonces alguien detrás de mí me dijo: "¿Cómo te atreves a hablar de Falun Dafa? ¡Te informaré a la policía!" Respondí: "Mi vida hubiera terminado si no hubiera Falun Dafa. ¡Fue Dafa quien me dio una nueva vida!

Otra persona que estaba trabajando a mi lado no creyó ni una palabra de lo que dije. Ella dijo que solo creía en el dinero que se puede usar para comprar arroz. Le dije: "Un día, cuando la calamidad esté aquí, ya no importará si usas dinero para comprar arroz o pan porque no habrá dinero. Te dan la oportunidad de ser salvada antes de que venga la calamidad es la misericordia de Dafa. ¡Aprécialo!".

A menudo ofrecí a las personas materiales de aclaración de la verdad que traía conmigo. Se los pasaban a otros después de leerlos. Poco a poco, mi apego al fanatismo, la mentalidad de presumir y no estar dispuesta a ser derrotada salieron a la luz.

Una vez soñé que Shifu estaba vestido de blanco y estaba sentado sobre el mercado para observar la escena. Después de despertarme, me di cuenta de que estaba siendo protegida por Shifu, así que estaba a salvo.

Muchas veces, soñé que estaba en medio de un gran campo, aclarando los hechos a una gran multitud. También hubo momentos en que el Maestro estuvo presente y habló con muchas personas. Se sentía como si hubiera una gran conferencia. A veces las flores a lo largo de las aceras me saludaban con grandes sonrisas. Luego hubo un tiempo en que Shifu me mostró en el sueño los efectos de salvar seres conscientes.

Una vez vi a más de 50 personas vestidas de blanco y con sombreros blancos. Todos se arrodillaron y se inclinaron ante mí. No estuve segura de cómo interpretar el sueño. Entonces, una voz que sonó como Shifu dijo que tenía algo que ver con mi aclaración de la verdad. Entonces comprendí que estas personas eran todas las personas que habían sido salvadas.

Todo gracias a la poderosa virtud del Maestro. No me atrevería a decir que era un mérito de mi parte que todas estas personas fueran salvas.

La familia de mi hijo necesitó mi ayuda en 2010 y esto creó un nuevo ambiente para que yo pudiera aclarar la verdad. A veces lo hice bien, pero a veces lo hice mal. Cuidé a mi nieto mientras estudiaba el Fa de memoria.

Pensé que no podría decepcionar a Shifu. No me quiero quedar atrás. Entonces, todos los días llevé conmigo a mi nieto para aclarar los hechos a la gente. Algunas veces salía de noche para encontrar gente con quien hablar y no me iba a casa hasta las 9:00 o 10:00 p. m. ¡Los días fueron fructíferos!

Ya que he sido pertinaz en aclarar los hechos todos estos años, he conocido a todo tipo de personas. Algunas escucharon y otras no. También hubo quienes acudieron a la policía para delatarme. Una vez, la policía buscó a mi hijo para que los visitara y les contara cosas sobre mí. Mi hijo no deseaba que me arrestaran, por lo que gastó más de 3.000 yuanes para invitar a la policía a comer. Debieron haberle dicho algo. Cuando llegó a casa, estaba furioso. Me gritó e incluso amenazó con mantener a mi nieto lejos de mí. En ese momento, las palabras de Shifu surgieron en mi mente:

"…Sólo permaneciendo inamovibles podrían manejar todas las situaciones… que los firmes pensamientos rectos y la fe recta de una persona se mantengan inalterables". (Exponiendo el Fa en el Fahui de Canadá, 2005)

Pensé, los Dafa dizi son sólidos como rocas y nadie se atreve a moverlos, así que envié pensamientos rectos y aclaré los hechos. Al final, mi hijo dijo: "Vamos todos a dormir. ¡Esta anciana es muy testaruda!". Así fue como superé otra tribulación de emoción.

No tener miedo a perder cuando se trata de salvar a la gente

Una vez fui a hacer algunas compras en un mercado, y había un vendedor que vendía pimientos largos. Los pimientos estaban en dos montones, uno caro pero de buena calidad y otro más barato pero naturalmente imperfecto. Vi que una señora mayor que practicaba el cristianismo compró los de buena calidad, pero pagó el precio más barato. Le dije al vendedor que me diera dos libras de cualquier calidad. Pagué y le dije que guardara el cambio.

El hombre dijo: "¡Ojalá todos fueran como tú!". Dije: "Soy practicante de Falun Dafa y mi Maestro nos enseñó cómo ser buenas personas. Debemos considerar a los demás primero y comportarnos bien sin importar dónde estemos".

A veces, un vendedor me daba una bolsa extra para llevar las compras cuando compraba mucho. Esta bolsa extra me hizo pensar dos veces sobre mí. Revisé para ver si estaba apegada a la codicia. Muy a menudo me negaba a llevar una bolsa adicional por evitar pagarle más al vendedor, aunque a veces los comestibles que compraba no eran muy frescos, nunca regresé con el vendedor para presentar quejas y nunca me aproveché de ninguno.

Cada pensamiento único que tiene un cultivador, que dice un cultivador, y su comportamiento, e incluso una mirada, pueden reflejar su estado de cultivación. Necesitamos cumplir con los estándares del Fa y comportarnos bien. De lo contrario, podríamos dañar la reputación de Dafa e incluso obstruir a las personas para que no sean salvadas. Necesitamos ser reflexivos en todo lo que hacemos.